Historia de desviaciones e intrigas en cuatro reinos
By ryu-kun
Introducción.
Había una vez cuatro reinos muy lejanos..
En donde 12 niños decidirían el destino de 4 países..
Los cuales invocarían a las fuerzas de la oscuridad y se unirían en su infernal cruzada..
Y..
Un momento es mi lista para después de ir de compras..
Lo siento fic equivocado.
Aunque no este mal.. debo decirles..
Cuatro reinos en la edad de los caballeros.. Los magos.. La fuerza bruta.. Cuando el amor filial era algo muy noble..
La amistad lo decidirá todo..
Dichos niños al crecer aprenderán a vivir en un mundo brutal.. En donde la rara vez la caballerosidad era de los caballeros.
atte.
Ryu-kun
Capitulo 1.
Príncipe Yamato de la Galia.
La vida de este joven príncipe de once años de edad se había vuelto demasiada complicada desde la muerte de su padre el Rey.
Desde cualquier punto que lo viera estaban metidos hasta el cuello en problemas.
Primero.
El reino del Norte. Lo que sería Noruega muchos años después.
Era comando por un tirano el cual buscaba una debilidad en cualquier reino para caer sobre él como si fuera el único alimento en una villa de pobres. La ambición de ese rey era tal que su hijo Taichi estaba siendo entrenado en las artes de la caballería de la manera más estricta posible.. Lo mandarían a las cruzadas a los once años.
Yamato alzó las cejas al ver el sequito de la princesa con que se debería casar para formar un matrimonio. El joven príncipe aborrecía su suerte. Casado a tan temprana edad con una niña de apenas ocho años.
Eso ya era algo fuera de su control.
Pero con eso habría una especie de pacto. La princesa Hikari del reino del norte.. Sería la heredera del reino de la Galia si algo le llegará a pasar a Yamato. El reino de la Galia sería anexado al reino del norte tan solo para proteger a la princesa Hikari.
Su vida no estaría tan complicada si no fuera porque tenía un seguro con muerte Accidental.
"Takeru" pensó al recordar como también estaba en problemas. Sin embargo se calló en sus pensamientos.
La mirada de la princesa Hikari era extrañamente cautivadora.. Era una niña muy inocente.. Claro estaba que era muy pequeña para poder concebir un niño..
El joven príncipe suspiró al menos solo habría que comprobar que era virgen y los de los herederos de la corona.. sería cuando ya fuera mayor.. Cuando ella tuviera unos once o unos doce..
El príncipe Yamato vio a su cuñado.. el cual venía con la princesa Hikari.. Era un chico alto y al parecer no tenía mas músculo que un palo de escoba.. Pero Yamato lo vio como había aprendido a ver. Debajo de esa apariencia infantil y semifloja. Caminaba con un gran control y pudo ver que sus músculos aunque al parecer pocos eran fuertes.
El príncipe Taichi le dio la mirada más venenosa que podía lanzar un príncipe.
Yamato supo que él lo mataría personalmente en cuanto pudiera hacerlo sin problemas. Era de esos príncipes que les gusta hacer el trabajo sucio ellos mismos.. Era ávido de sangre. Se le veía en la cara el aire barbaro.
Yamato agradeció que Takeru estuviera en otro reino amparado por el matrimonio. Si no los intentos de asesinato hubieran sido muy tentadores.. Había escuchado que había llegado sin novedad al otro reino. A pesar de todo el escocés no lo matarían..
Aun..
Era posible que lo..
Yamato cerró sus ojos para no pensar en eso.
Algo peor que la muerte le esperaba a Takeru si el secreto se llegaba a descubrir. Sin embargo era mejor su vida de todos modos corría peligro.
Y como decía su madre la reina es mejor que muera por el país que muerto envenenado o por alguna traición.
Pero Yamato y tal Takeru hubieran deseado que muriera envenenado.
Estaba triste por lo que le había hecho a su hermano. Lo habían forzado a casarce con un principe al cual no amaba.. Claro en matrimonios la familia real nunca amaban a nadie. Solo así misma.
La boda en sí no era mas que la reafirmación de la alianza entre dos reinos.
Su país etsaba en uan posición estrategica situado de modo que servía de escudo contra la poderosa roma. Y junto con el país de la princesa Hikari formaban un escudo para inglaterra.
Arthur pendragon era un enemigo temible que pronto partiría a las cruzadas.
Sin embargo era algo que Yamato querría hacer.. ir a las cruzadas para poder hacerse fuerte y así ir a rescatar a su hermano.
Con todo lo que pudiera aprender podría liberar a su hermano de ese destino tan cruel al que su madre la reina lo había disuesto.
El lucharía en las cruzadas y se haría fuerte para así largarse a otro reino en donde podrían vivir felicies para siempre.. Era la promesa que le había hecho a su hermanito.
"Principe Yamato.. Aceptas a Hikari como tu leal esposa para amarla y respetarla" dijo el cardenal.
"Acepto" dijo yamato a esas palbras sin convicción.
"Los declaró marido y mujer.. puede besar a la novia" dijo el cardenal.
Yamato besó a Hikari y no le agradó para nada el regusto de sus labios.. demasiado polvo para los labios.
Continuará.
By ryu-kun
Introducción.
Había una vez cuatro reinos muy lejanos..
En donde 12 niños decidirían el destino de 4 países..
Los cuales invocarían a las fuerzas de la oscuridad y se unirían en su infernal cruzada..
Y..
Un momento es mi lista para después de ir de compras..
Lo siento fic equivocado.
Aunque no este mal.. debo decirles..
Cuatro reinos en la edad de los caballeros.. Los magos.. La fuerza bruta.. Cuando el amor filial era algo muy noble..
La amistad lo decidirá todo..
Dichos niños al crecer aprenderán a vivir en un mundo brutal.. En donde la rara vez la caballerosidad era de los caballeros.
atte.
Ryu-kun
Capitulo 1.
Príncipe Yamato de la Galia.
La vida de este joven príncipe de once años de edad se había vuelto demasiada complicada desde la muerte de su padre el Rey.
Desde cualquier punto que lo viera estaban metidos hasta el cuello en problemas.
Primero.
El reino del Norte. Lo que sería Noruega muchos años después.
Era comando por un tirano el cual buscaba una debilidad en cualquier reino para caer sobre él como si fuera el único alimento en una villa de pobres. La ambición de ese rey era tal que su hijo Taichi estaba siendo entrenado en las artes de la caballería de la manera más estricta posible.. Lo mandarían a las cruzadas a los once años.
Yamato alzó las cejas al ver el sequito de la princesa con que se debería casar para formar un matrimonio. El joven príncipe aborrecía su suerte. Casado a tan temprana edad con una niña de apenas ocho años.
Eso ya era algo fuera de su control.
Pero con eso habría una especie de pacto. La princesa Hikari del reino del norte.. Sería la heredera del reino de la Galia si algo le llegará a pasar a Yamato. El reino de la Galia sería anexado al reino del norte tan solo para proteger a la princesa Hikari.
Su vida no estaría tan complicada si no fuera porque tenía un seguro con muerte Accidental.
"Takeru" pensó al recordar como también estaba en problemas. Sin embargo se calló en sus pensamientos.
La mirada de la princesa Hikari era extrañamente cautivadora.. Era una niña muy inocente.. Claro estaba que era muy pequeña para poder concebir un niño..
El joven príncipe suspiró al menos solo habría que comprobar que era virgen y los de los herederos de la corona.. sería cuando ya fuera mayor.. Cuando ella tuviera unos once o unos doce..
El príncipe Yamato vio a su cuñado.. el cual venía con la princesa Hikari.. Era un chico alto y al parecer no tenía mas músculo que un palo de escoba.. Pero Yamato lo vio como había aprendido a ver. Debajo de esa apariencia infantil y semifloja. Caminaba con un gran control y pudo ver que sus músculos aunque al parecer pocos eran fuertes.
El príncipe Taichi le dio la mirada más venenosa que podía lanzar un príncipe.
Yamato supo que él lo mataría personalmente en cuanto pudiera hacerlo sin problemas. Era de esos príncipes que les gusta hacer el trabajo sucio ellos mismos.. Era ávido de sangre. Se le veía en la cara el aire barbaro.
Yamato agradeció que Takeru estuviera en otro reino amparado por el matrimonio. Si no los intentos de asesinato hubieran sido muy tentadores.. Había escuchado que había llegado sin novedad al otro reino. A pesar de todo el escocés no lo matarían..
Aun..
Era posible que lo..
Yamato cerró sus ojos para no pensar en eso.
Algo peor que la muerte le esperaba a Takeru si el secreto se llegaba a descubrir. Sin embargo era mejor su vida de todos modos corría peligro.
Y como decía su madre la reina es mejor que muera por el país que muerto envenenado o por alguna traición.
Pero Yamato y tal Takeru hubieran deseado que muriera envenenado.
Estaba triste por lo que le había hecho a su hermano. Lo habían forzado a casarce con un principe al cual no amaba.. Claro en matrimonios la familia real nunca amaban a nadie. Solo así misma.
La boda en sí no era mas que la reafirmación de la alianza entre dos reinos.
Su país etsaba en uan posición estrategica situado de modo que servía de escudo contra la poderosa roma. Y junto con el país de la princesa Hikari formaban un escudo para inglaterra.
Arthur pendragon era un enemigo temible que pronto partiría a las cruzadas.
Sin embargo era algo que Yamato querría hacer.. ir a las cruzadas para poder hacerse fuerte y así ir a rescatar a su hermano.
Con todo lo que pudiera aprender podría liberar a su hermano de ese destino tan cruel al que su madre la reina lo había disuesto.
El lucharía en las cruzadas y se haría fuerte para así largarse a otro reino en donde podrían vivir felicies para siempre.. Era la promesa que le había hecho a su hermanito.
"Principe Yamato.. Aceptas a Hikari como tu leal esposa para amarla y respetarla" dijo el cardenal.
"Acepto" dijo yamato a esas palbras sin convicción.
"Los declaró marido y mujer.. puede besar a la novia" dijo el cardenal.
Yamato besó a Hikari y no le agradó para nada el regusto de sus labios.. demasiado polvo para los labios.
Continuará.
