Siempre pasa lo mismo, me siento en mi desordenado escritorio, y abro una pagina de Word, pero lo dejó ahí, no puedo escribir, no después de lo que pasó.
¿Conoces el sentimiento de saber que han jugado contigo, más no te importa, porque amas demasiado a esa persona? Yo lo conozco, vaya que lo conozco.
Amo escribir romance, es mi vida, mi talento, mi pasión; ¿pero cómo escribir sobre amor si tu corazón está roto? ¿Cómo hacer escenas de besos si mis labios están completamente secos? Es triste, vaya que sí, pero no puedo hacer nada más, no cuando mi modo de ver el mundo está totalmente dado vuelta.
Esa forma romántica que tenía... siento que se ha ido por completo, y que ahora lo único que puedo escribir son historias hirientes donde nunca hay un final feliz.
¿Qué es una escritora de romance sin romance? Esa es mi pregunta de todos los días. Por más que intento, no puedo responderla, es como una piedra en mi camino, una pesa que no me deja levantarme.
Me duele, me duele saber, me duele sentir que me levanto todos los malditos días sin ningún motivo de vida, ya que mi motivo de vida ha tomado mi amor y lo ha tirado lejos, y no tengo cómo alcanzarlo.
Ahí es donde está mi amor, mi romance, con él, con esa persona que me ha robado tantos suspiros.
Pero ya he tratado demasiado, y siento que lo único que puedo hacer es sentarme a esperar. ¿Irónico no? El saber que moverías cielo y tierra por una persona, pero que es inútil cada cosa que hagas.
Supongo que no puedo hacer nada, supongo que tengo que seguir aquí, añorando tu regreso.
Y ese es el motivo por el cual no puedo escribir romance, porque mi romance se ha ido, él se lo ha llevado.
