círculo
Rusia siempre lo mira.
No hacerlo, en realidad, sería faltarse el respeto a sí mismo. A sus sueños y metas.
Y no puede permitir que pase eso. Así que lo mira.
Y lo mira. Entonces China se da cuenta y escapa. Porque China siempre escapa.
(Lo hace porque le parece lo más correcto, aunque en el fondo está confundido. No piensa, hace -que es más sencillo-).
Y porque China siempre escapa, Rusia se disfraza y lo sigue.
Y lo sigue porque no puede dejarlo irse. No es lo correcto, por más que Yao piense lo contrario, no lo es.
Entonces lo sigue. Se disfraza de panda y se infiltra.
Se infiltra para tenerlo cerca -lo más posible, aunque nunca alcanza, y se disfraza como panda para lo mismo.
Otro motivo que nunca aceptó es que usó ese animal porque los pandas son la familia de China y él también quiere ser parte de su familia. Quiere fusionarse en él, perderse, pero nunca lo consigue.
Entonces lo acosa.
(Así, justo como Belarús hace con él. Quizás menos aterrador, en realidad no lo sabe).
Y como lo acosa, China se asusta. Aunque en realidad no es tan así. Es más bien que no sabe qué hacer y cómo manejar su confusión.
Rusia no quiere que se asuste, por lo que, por un pequeño período de tiempo, lo deja en paz.
China se confunde aún más y no comprende el motivo del alejamiento del siempre persistente ruso. Luego se acostumbra.
(Iván siempre vuelve a él).
Para cuando se acostumbra, el nombrado regresa a su rutina. Y el asiático vuelve a asustarse y escapa. Rusia lo persigue -lo quiere para él-, lo acosa y lo mira.
Y el círculo vuelve a empezar.
Probablemente nunca termine, a menos que el país más antiguo ceda y se vuelva uno con el más joven.
Algo que difícilmente pase. Pero Iván puede soñar.
(Fusionarse. Enterrarse. Perderse en él. Juntos. Una familia.
Cerca).
Ya tenía ganas de publicar algo de APH en ff hace poco.. y bueno, me di el gusto.
Espero de todo corazón que les haya gustado, es uno de mis favoritos personales.
Nos vemos~ :)