Todos en la vida, alguna vez, hemos soñado, pero no sueños que forman tu inconsciente sino deseos, anhelos que quieres que se conviertan en realidad, los cuales algunas veces estos te lo produce tu mente cuando dormís pareciéndote, en el momento, reales. Sin embargo cuando despiertas no es más que una hermosa fantasía.
Adrien algunas noches siente eso, como si en algún momento va a despertar y de que su vida junto a Ladybug no es real, que ella no es real. Por lo tanto significaría que algún día ella se va a desvanecer enfrente de sus ojos y lo piensa, a pesar de que está a su lado y de que prometieron estar siempre juntos.
Porque estar con Ladybug, la persona que soñó casarse, la cual hace poco logro cumplir ese sueño, como también la futura madre de sus hijos, el cual ese sueño se encuentra en proceso, eso, es para él tan irreal como montar un unicornio y volar junto a un arcoíris. Era exagerado, pero nunca pensó que algún día ella formaría parte de su vida, quien a pesar de que no lleva mascara, aun ve a la joven valiente de la que se enamoró.
Y ahora él debe aceptar que todas las noches que Adrien pasaba con su Lady ya no eran un sueño. Eran reales.
Ella era real.
Y eso es lo único que realmente importaba.