«DDR» Inuyasha©Rumiko Takahashi.
«N/A ¹» Hi! Estoy de vuelta con tres nuevos cortos que serán publicados de forma paralela durante los próximos días, empezando por el día de hoy. Espero que se animen a leer porque es un «segundo» regalo para mi amiga secreta de la «CDY del GE». ^_^ Enjoy it! Tks!
El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos.
~William Shakespeare.
¿DESTINO?| Versión III.
CP. #1: El encuentro.
—Esto es… inconcebible... —cuestionó mascando cada palabra con desdén—, ¿por qué ese híbrido va heredar nuestra empresa? ¡Mi empresa! —exclamó con enojo.
—Sesshōmaru —recalcó su padre con malestar, mientras se tocaba con sus largos dedos su sien. La migraña era inminente y más por tener que explicar un tema que lo había repetido hasta el cansancio—, no eres el único dueño de la empresa y tu hermano ha demostrado… ¿Adónde vas? —preguntó con sorpresa al ver a su estoico hijo lanzar los papeles que hace pocos minutos le habían dado hacia el piso, ponerse de pie de una manera abrupta, y sin más salir de la amplia oficina completamente indignado por la noticia que su padre le había dado, aun estando de espaldas y sin mirar a su padre no se privó de decir en un tono bajo, apenas un humano le podría escuchar, pero ellos no eran humanos:
—No tengo nada que hacer aquí...padre... —comentó sin dejar que el enojo que sentía se filtre en sus expresiones faciales, pero al abrir la puerta no dudó en recalcar—: Cuando Inuyasha arruine todo por lo que trabajado, ¡llámame!..., tal vez esté disponible para arreglar ese desastre. —puntualizó con saña.
Todo había quedado dicho entre padre e hijo, pero Inu no Taishō no pudo evitar suspirar con amargura, sabía que su hijo mayor no se iba quedar tranquilo hasta que obtuviera la presidencia de las empresas familiares que ahora estaba en manos de su hijo menor. ¿Qué iba hacer?... No tenía ni la menor idea, pero sabía que serían días tensos para él y su familia.
En otro lugar de la cuidad de Tokio de forma paralela, una joven de cabellos largos se quedaba completamente perpleja al ver el sobre que tenía entre sus manos.
— ¿Qué significa esto, Kagura? —preguntó finalmente en un tono bajo. Nunca había tenido una buena relación con su hermana mayor, no entendía el porqué de sus conflictos ya que no había una razón en particular, pero desde que ella tuvo uso de razón, sus diferencias con Kagura parecían hacerse más fuertes con el tiempo.
—Sabía que tanta perfección era mentira —reveló la joven demonesa sin pizca de remordimiento alguno—, eso de haber sido concebida cuando nuestros padres eran humanos es una farsa. ¡Patrañas! —comentó con desdén, hacía mucho tiempo que lo sospechaba pero no tenía pruebas para hablar al respecto, pero está vez, la situación era diferente.
— ¿Qué? ¿Por qué me dices todo esto? —Rin preguntó con cuidado, la razón de su pregunta radicaba en que ella era la única humana en medio de una familia de demonios puros, medios-demonios y sacerdotisas, pero su condición no la limitaba porque ella había sido educada para conocer, saber y defenderse incluso todos ellos sin importar el poder que tuvieran y sus extraordinarias habilidades.
— ¡Kagura! —Una hermosa mujer de cabellos largos exclamó con el ceño fruncido—: ¡¿Qué hiciste?! —cuestionó con asombro más que malestar.
La joven demonesa se puso mortalmente pálida, no esperaba que su madrastra llegue antes de tiempo y sin pensarlo contestó con premura:
—Lo descubrí accidentalmente…ella —señalo con amargura intentando mentir—, no es tu hija menos la de mi padre…, aquí está su certificado de adopción... —gruño y exclamó: — ¡Rin no es mi hermana! —Finalmente gritó perdiendo la escaza compostura que tenía.
Sus hermanos como la joven afectada se quedaron callados, Kikyō no sabía cómo explicar lo sucedido porque no encontraba las palabras para tratar un tema que había jurado nunca revelar.
Rin seco sus lágrimas producto de su asombro, en un tono bajo comentó con cuidado:
—No importa lo que digas —señalo—, ellos son mis padres y ustedes son mis hermanos —miró a Kagura con el semblante serio, aunque por dentro sentía que algo se rompía—, incluso tú... Kagura, eres mi hermana —afirmó con tristeza—, debo irme…, tengo —Rin estaba aturdida y completamente desconcertada—, tendré la última prueba de mi vestido de novia y…
—Cierto…, te casas en dos días, ¡wow! ¡Qué emoción! —Kagura comentó con envidia, pero Kana decidió intervenir al entender perfectamente las intenciones de su hermana y comentó:
—Suficiente Kagura, ya le dijiste a Rin lo que querías decir, es hora de irnos. —puntualizo, mientras la tomaba del brazo.
—No, aún me falta decir algo más… —reveló Kagura con malicia, Kana se alertó y aunque intentó detener a su hermana, fracaso por completo porque Kagura no dudó en afirmar—: ¿Por qué no le preguntas a tu perfecto novio «Miroku» lo ha estado haciendo todo este tiempo con Sango?, si…, tu mejor amiga —enfatizó—. Si es que a ella se le puede llamar amiga, después de lo que ha hecho con tu prometido, incluso en tu propia casa.
Antes que Rin reaccionara, Byakuya, uno de sus hermanos mayores no dudó en darle una potente bofetada a Kagura que la lanzó al piso ante el asombro de todos. Esa acción de parte de su hermano no fue esperaba por la joven demonesa.
—Fuiste demasiado lejos Kagura —cuestionó—, no tenía por qué revelar eso; Era Sango y Miroku quienes iban hablar con Rin, está noche. —reveló con un leve color rojo en sus mejillas, producto de la incomodidad que le producía haber tal revelación.
—Es mentira… —Rin susurró.
Kagura a pesar de estar en el piso con la mano en la mejilla lastimada mostró una sonrisa ladina, ella no dudo en decir:
—¿Por qué no le preguntas a tu flamante y perfecto novio? —Kagura sonrío abiertamente en señal de triunfo—, te puedo dar detalle de todo lo que han hecho ese par y más —reveló—, porque ellos no iban hablar contigo, ellos iban huir juntos porque se am...
— ¡Suficiente! —Kikyō grito, finalmente perdiendo la compostura.
—Necesito salir de aquí —Rin comentó en un tono bajo, antes de salir de forma abrupta de aquel despacho—, no me sigan...quiero estar sola —miró a su hermano mayor—, Byakuya —solicitó— ¡Por favor, cancela todo! —El dolor era tal que no le permitía seguir hablando.
Verdad o mentira, el daño era irreparable, Rin no supo cómo pudo salir de la amplia mansión y ponerse en frente del volante para meter el acelerador a todo lo que daba, no era que tenía intenciones de suicidarse, sencillamente ella quería salir de ahí, cuánto tiempo paso ni ella mismo lo supo, en dónde estaba menos, probablemente manejo sin darse cuenta que había llegado a una zona completamente desconocida para ella.
Era tarde y no sabía si debía bajarse a preguntar, el sector al que había llegado no tenía muy buen aspecto; La peor parte, notó la aguja que indicaba que el tanque de gasolina estaba por terminarse, pero temió bajarse a preguntar después de todo a medida que avanzaba notaba unas caras extrañas, iba aprovechar el cambio de luz para acelerar pero no contó que un supuesto indigente se le cruzara por delante y la obligará a frenar, se aterró pensando que lo había atropellado cuando un hombre de aspecto desagradable bruscamente toco los vidrios de sus ventanas posteriores y gritó con falso enojo para asustarla:
—¡Bájate del carro!
Rin estaba aterrada, si la llegaba asaltar o peor aún, si algo le pasaba a su integridad física sería culpa de ella, eso ella lo sabía pero no le hizo caso, entonces uno de los hombres rompió el vidrió de su ventana lateral y ella se quedó estática en su lugar del temor que experimentó; Parecía todo perdido pero sin que ella se lo esperara de repente, los hombres que la había interceptaron fueron lanzados de forma intempestivas por encima del carro, lo sucedido la dejo completamente perpleja.
—Una chica como tú, en un auto como este —señalo—, no me sorprendería que la quieran atacar —comentó un hombre de un aspecto imponente, albino, que dejo a Rin sin palabras—, sal de aquí sino quieres que realmente te pase algo. —ordenó sin tino alguno.
Sesshōmaru ni siquiera cuestiono lo que había hecho, después de todo para desahogar sus iras siempre se internaba en los barrios bajos de Tokio, ya que por lo general salían malhechores que intentaban asaltarle, pero él, un demonio letal aún camuflado como un humano no tenía problema para eliminarlos de un solo zarpazo; La satisfacción experimentada era efímera pero de cierta forma le ayudaba a disipar su enojo.
Al ver que la joven no contestaba, afirmó con seriedad:
—Estás perdida —Rin solo movió la cabeza para afirmar lo obvio—, si quieres regresar a Tokio debes seguir tres bloques y virar a la izquierda para regresar —comentó con calma—. ¿Te ubicas? —preguntó sin pensar. Él no ayudaba a humanos, pero sencillamente no quería verla ahí, tenía ganas de seguir matando lacras humanas, como él les llamaba para desfogar su furia.
—No quiero regresar. —Rin reveló al bajar la mirada, mientras presionaba con fuerza el volante, ella no entendía la razón de haber revelado eso al extraño; Lo siguiente que pasó fue muy rápido, porque cuando ella reacciono ya estaba en el asiento del co-piloto, miró con asombro al extraño que estaba en su lugar—, ¿cómo hiciste eso?, ¿quién eres? —preguntó con rapidez.
—Sin preguntas…, iré a Osaka —afirmó—, si quieres puedes venir conmigo pero deberás mantenerte callada. —ordenó en un tono imperativo.
— ¿Me estás secuestrando? —Rin preguntó aterrada, recién se había dado cuenta que su carro estaba en movimiento, pero al segundo se arrepintió de haber hecho la pregunta al ver la ladina sonrisa del supuesto hombre, quien ni siquiera se molestó en contestar. Había cosas que él hacía por instinto y nunca las explicaba, menos se las iba comentar a una hembra humana.
Manejo en completo silencio, llegaría a su destino, luego dejaría a la mujer a su suerte, además no tuvo problema en reconocer que a pesar de su desatino de estar en un lugar que no debía, se notaba que era de una buena familia, sin duda podía desenvolverse sola.
Rin por su lado se quedó completamente desconcertada, el supuesto hombre se le hacía familiar pero no sabía de dónde le conocía, además extraño o no, la había salvado posiblemente de una muerte segura, pero a la primera oportunidad iba averiguar sobre él. De alguna forma que ella no sabía explicar pero el extraño no le causaba temor, aunque si le abrumaba ese silencio, así que sin pensar comentó en voz baja:
—Soy Rin, ¿cómo se llama? —Sesshōmaru la miró pero no contestó, Rin sonrío con nerviosismo pero no se dio por vencida, cuando comentó sin pensar (de nuevo)—: ¿Por qué va Osaka? ¿Qué hay allá?
—Dije sin preguntas. —puntualizo el supuesto hombre, dando por terminado la conversación.
Rin sonrío con confianza y no se privó en decir:
—Eso va estar algo difícil —afirmó con naturalidad—, no se me da bien quedarme callada —sonrío—, me gusta hablar. —afirmó lo obvio con seguridad.
Sesshōmaru la miro con seriedad para regresar su mirada al frente y poner atención a los lugares que iban recorriendo, estaba considerando la posibilidad de usar sus garras envenenadas con ella para hacerla dormir, pero para eso tendría que transformarse y tenía la certeza que eso sería un mayor problema.
—Soy Sesshōmaru —respondió de forma cortante—, no me gusta hablar, porque no tengo nada que decir.
Rin sonrío con más confianza, para responder:
—Quienes no les gusta hablar son por lo general excelentes oyentes y siempre tienen cosas interesantes que comentar, aunque ellos no quieran hablar —Sesshōmaru la miro sin decir palabra alguna—, me parece conocido…pero no sé de dónde…
El demonio empezaba a maldecir su suerte, por qué de todos los humanos con los que se podía topar tenía que ser una parlanchina, como le llamó en ese momento. La peor parte, lo usual era aburrirse con las conversaciones banales de los humanos, pero la joven tenía una conversación tan versátil que realmente lo distrajo y hasta que finalmente parecía haberse quedado dormida, después de todo había sido un día con muchas emociones intensas que ella había experimentado.
—Por fin…—suspiró—, pensé que nunca se callaría —comentó en voz baja, mientras Sesshōmaru estacionaba el carro en una gasolinera para llenar el tanque—, en qué demonios estaba pensando cuando me subí a su carro.
Sesshōmaru la observó con atención, movió su cabeza de un lado a otro y decidió bajarse, nada bueno podía salir de observar a una humana, una raza a la que consideraba como inferior y que él despreciaba abiertamente.
«Continuará»…
«N/A ²» Hi! Estoy de vuelta con un nuevo corto ^_^ el siguiente capítulo lo público mañana y será algo intenso. Espero que se animen a leer porque es un regalo para mi amiga secreta; Al igual que mis otros cortos que tienen el mismo título: ¿Destino? Versión I [Fandom de SCC] y Versión II [Fandom de Skip Beat]. Ideas centrales simples pero impregnados con mi humor burlón y mi estilo evil ^_^ no van a ver tanto drama de por medio.
• El final lo público el 01/01/2014 y mi amiga secreta va decidir qué final desea que tener ^_^ así que espero que sigan leyendo.
«N/A ³» Adicional, para quienes gustan del género azucarado les invito a participar en el III y IV Desafío del Forum de DZ del GE que vamos a sacar en el 2014 ^_^ espero que se animen a participar ^_^ Tks!
• Finalmente; Gracias por seguirme leyendo después del tiempo que ha pasado. Leer sus comentarios, en especial aquellas críticas que me incentivan a mejorar y a seguir escribiendo son un excelente aliciente para mi mortífera creatividad. A mis lectores y/o críticos les deseo 2014 lleno de sorpresas positivas y que sus metas tantos laborales como personales se concreten. ATT. Sake's Evil22
• Nota Final. Sorry! Por la cacografía siempre hay cosas que se me pasan por alto a la hora de editar.