De shinobis y Piratas.

Dedicado a Cossette sempai ^^

I. Reencuentro.

Las balas de los marines silbaban a través del viento mientras el Sunny avanzaba briosamente alejándose de Impel Down. A pesar de que el cyborg no se encontraba presente, Duval había aprendido a manejar de manera aceptable los beneficios del Soldier Dock System. Debido a que Kuma había desaparecido a los demás mugiwara, Duval y los suyos ocupaban provisionalmente el cargo como tripulantes provisionales, pero Luffy no quería meterlos en problemas. Después de todo, Ace, Hancock y él, resultaban presas demasiado tentadoras para los cazarrecompensas.

Debido a su prolongada estancia en Impel Down, Ace estaba aún algo débil, y a consecuencia de ello, Luffy decidió optar por la prudencia y ahora se encontraba huyendo en lugar de arriesgarse a pelear poniendo en riesgo a Ace. Hancock, solícita, había seguido a Luffy. Por suerte para las amazonas, los del Gobierno Mundial creyeron que había sido secuestrada como rehén, no les pasó por la cabeza la posibilidad de que una Shichibukai, tan orgullosa y feminista como ella cooperara con un pirata varón. Sin darse cuenta, Garp sirvió como respaldo para esta hipótesis, ya que riendo a mandíbula batiente declaró que Hancock la tendría difícil usando su Mero Mero no mi en alguno de sus nietos, ya que Ace era narcoléptico y Luffy era demasiado inocente (o baka, en sus propias palabras).

Al primer mugiwara con él que se reencontraron, fue a Zoro. Fue una mera casualidad que se toparan, ya que tan pronto como se había recuperado de sus heridas, gracias a los cuidados de Perona, Zoro había decidido abandonar Kuraigana en una pequeña barca para ir en busca de sus nakama. Por desgracia, Perona no sabía mucho de navegación, y aunado a eso, estaba el pésimo NO sentido de la orientación de Zoro… así que habían estado naufragando sin rumbo por semanas.

El segundo al que se toparon, fue a Chopper. Al parecer unos exploradores lo habían encontrado extraviado mientras huía de unos nativos que querían comérselo en Reino Torino. Interesados en su habilidad, y más que nada por su extraño parecido a un tonakai pese a ser un tanuki (había resultado infructuoso que Chopper les hubiera dicho más de mil veces que en efecto, era un tonakai), total que habían decidido venderlo en el Archipiélago Sabaody como mascota. Por suerte Luffy pudo salvarlo.

Usopp no tardó en aparecer un par de días después, lucía más seguro de sí que nunca. No era la falsa seguridad que siempre intentaba proyectar, sino que esta vez en verdad parecía un Usopp valiente. Comenzó a contar sus aventuras, sin embargo al hablar de Hércules, Hancock lo tildó de mentiroso alegando que Hércules era un mito griego. (auch… suena como la fábula de Pedro y el lobo no? Jeje que cruel es Nemo Robin)

Sanji corrió prácticamente a los brazos de sus nakama cuando, por casualidad, acertaron a pasar por Momoiro. El pobre rubio estaba en shock por haber tenido que pasar tanto tiempo entre okamas. Al borde de un colapso nervioso, casi se infarta al conocer a Hancock. Una vez que lograron convencerlo de que ella era una onna de verdad, Sanji suspiró aliviado y comenzó a cortejar a Hancock, aunque sin el entusiasmo obsesivo acosador que dedicaba antes a cuanta mujer se cruzaba en su camino.

Brook reapareció de forma tan misteriosa como cuando lo conocieron. Una mañana de niebla llegaron a la isla Namakura, y Hancock gritó aterrada cuando vio a un esqueleto sentado en el barandal pidiéndole que le mostrara sus bragas. El pobre esqueleto había tenido días difíciles, la mayoría de los habitantes de la isla lo llamaban Satán, cosa que le provocaba escalofríos. En cierto modo, él, Chopper y Sanji, fueron los más entusiasmados de reincorporarse a la tripulación.

Franky apareció montado en un vehículo parecido al Mini Merry 2, sus aventuras parecían salidas de un libro de ciencia ficción, e incluso Usopp se quedó callado oyendo admirado como Franky describía cyborgs y demás tecnología avanzada. Increíblemente Hancock no lo tildó de mentiroso a él, cosa que dejó algo amoscado a Usopp.

Pasaron las semanas y todos comenzaban a preguntarse donde estarían sus dos nakama femeninas. Ace ya estaba mejorado gracias a los cuidados de Chopper, y aunque era común encontrarse con Sanji o Brook convertidos en piedra, cortesía de Hancock, no pasaba nada importante para los Mugiwara. Ocasionalmente algún destacamento de la marina los alcanzaba, pero gracias a Franky, que conocía perfectamente el Sunny, podían implementar diferentes formas de ataque o de retirada.

Como a los dos meses, apareció Robin en un barco. Iba acompañada por una enorme cantidad de gente que la dejó en el Sunny mientras se despedían de ella con lágrimas de agradecimiento en los ojos. Al parecer, la arqueóloga había ido a parar a Tequila Wolf, donde se estaba construyendo un puente desde hacía 700 años. En cierto modo, las condiciones de trabajo eran intolerables (N/A: casi como la construcción de pirámides por hebreos según yo jajaja), así que Robin empleó su experiencia en rebeliones y maquinaciones contra el sistema y logró hacer que los demás obreros la apoyaran. Estalló una especie de insurrección, se deshicieron de los opresores (la akuma de Robin fue bastante útil) y finalmente consiguieron un barco y abandonaron el maldito puente. Hancock se pasmó al ver como Luffy entusiasmado abrazaba a Robin, con demasiada familiaridad y se puso celosa. Aunque eso no fue nada comparado a cuando encontraron a Nami.

La pelirroja había tenido más complicaciones que los demás, debido a que había ido a parar a una isla del cielo. Aunque, práctica como siempre, Nami había aprendido bastante. Robó un barco y regreso al mar de Grand Line. Usando sus antiguos conocimientos como ladrona, logró reunir algunos tesoros, comida y barcos que cambiaba conforme iba avanzando. Al ver a su navegante, la sonrisa de Luffy se amplió ocupando tres cuartas partes de su cara. Zoro y Robin sonrieron maliciosamente, Ace dormía, Franky, Chopper y Brook lloraban, Usopp tragó saliva y se le humedecieron los ojos al recordar a Kaya.

-¡¡¡Nami saaaan!!!- Sanji corrió a recibir a su pelirroja, pero Zoro le metió una zancadilla y cayó de bruces.

-No interrumpas…-gruñó en voz baja y Sanji observó aterrado como Nami se sonrojaba ante el recibimiento de Luffy "mi pelirroja…" T.T

Hancock bufó molesta y se alejó de ahí.

Duval, Perona y los demás decidieron utilizar el barco que llevaba Nami para regresar a sus vidas. Luffy los despidió con una sonrisa, y reunidos de nuevo, los Mugiwara se decidieron por hacer lo posible para llegar a Raftel y alcanzar el sueño de su senchou. Sin embargo, el destino había decidido otra aventura… muy diferente…. Y muy lejos de Grand Line.


Un proyectillo que se me ocurrió xD más bien es como un reto surgido a raíz de una conversación con mi sempai. Para demostrarle que sí se pueden combinar los psjs de Naruto y One Piece (Juntos pero no revueltos ^^)

Espero que les guste... y espero, más que nada, reviews XD