Bueno, este es mi primer FanFic.

Introduccion: En este FF, Laura fue rescatada de las instalaciones del Proyecto X cuando tenia 8 años. Su madre, Sarah Kinney fue asesinada 6 años más tarde (por el Dr. Rice, a quien Laura creia muerto...muchas cosas que tengo en mente y que pienso desarrollar, MWUAHAHAHAH), y Laura se fue a vivir con su tia Debbie y su prima Megan. Llegado el momento, cuando cumplío 17, Logan le comunico a su "hija-hermana" que tenia planeado llevarla al Instituto. Y ahi es donde estamos ahora.

Tuve la necesidad de crear una Laura no tan castigada. Traumada, pero a un nivel mas manejable. No pierde aun la escencia de ese personaje callado, analitico. E incomprendido...una "niña" que aun no entiende muchas cosas.

En fin...espero que les guste!

El año escolar casi se terminaba. Todos estaban ocupados con exámenes finales y ensayos. Hasta Laura, que estaba escribiendo un largo ensayo sobre el libro de Frank Kafka "La Metamorfosis". Estaba casi terminado, era bastante largo pero objetivo para un libro tan aburrido. Un tipo que se despierta transformado en un escarabajo...Ewww...

Laura estaba sola en su cuarto; eran casi las 5:00 PM. Estuvo escribiendo durante horas en su Laptop y ahora la espalda le dolía, y los ojos le ardían un poco.

Alzó la vista de la pantalla, miró el calendario colgado en la puerta de su cuarto y sonrió. Logan le prometió llevarla a México, a Cancún, un lugar que ella conocía solamente por fotos, o por haberlo visto en la televisión.

Desde que tenia 9 años, Logan la llevaba de vacaciones todos los veranos. Gracias a él, ella conocía casi todos los , y España, Inglaterra, Alemania, Italia y Grecia. A ella le encantaba ir con el, y Logan disfrutaba mucho la compañía de Laura.

Para cuando terminó su ensayo, Laura estaba hambrienta, así que se puso sus botas y bajó a la Cafetería.

El lugar estaba lleno, y en el aire bailaba el aroma a café y chocolate.

-Laura! – A su izquierda, una mano le hacia señas en el aire.

Cessily, Nori y Sofía estaban sentadas en una mesa, tomando capuccino.

- Hey. –Laura sonrío mientras se sentaba frente a Cess.

- Donde has estado todo el día? – Nori pregunto, sorbiendo el café humeante.

- Uhmm…Terminando mi ensayo.

- Sobre el tipo-escarabajo? –Nori preguntó, y Laura asintió con la cabeza.

- Que libro más estúpido...no podría ser más aburrido.- Nori dijo, dejando en claro que había odiado tener que leerlo.

- Bien chicas, cuales son sus planes para el verano? - Preguntó Cess poniendo sus codos metálicos sobre la mesa.

- Iré a China, a visitar a unos amigos – Nori sonrío, y algo sonrojada agregó – David viene conmigo.

- OH Dios! eso es genial…- Cess chilló, como si la hubiese picado una abeja.

Nori tenía una gran sonrisa en su cara. Había estado saliendo con David hace casi un año.

-Yo iré a Tahití con mi amiga Anna – Sofía dijo sonriente. Anna no era mutante, pero era una muy buena amiga de Sofía. Laura la vio solo una vez.- OH, estoy tan entusiasmada! nos quedaremos allí 1 semana y después iremos a Brasil.- dijo Sofía, golpeando levemente las palmas de las manos.

-Geenial- Nori le sonrío – Tráeme algo bonito.

-Lo haré! le traeré regalos a todos mis amigos.-Sofía sonrió. Era una chica bonita. Muy educada, y Laura la respetaba mucho. Sofía era rubia, ojos claros, su piel siempre estaba bronceada. Sip, los chicos se volvían locos por ella, especialmente Julian Keller. Laura se sentía algo extraña ante esta situación, pero no sabia explicar por qué. Una vez los vio besándose en un pasillo, y esa fue la primera vez que sintió esa sensación, una leve pesadez en el corazón.

- Y tú, Laura? – Sofía le preguntó

- Iré a México.

-México es hermoso, especialmente las playas. - Sofía suspiro, evocando antiguos recuerdos de viajes pasados.

-Lo sé, no puedo esperar mas para ir!- Laura rió suavemente.

-Yo me quedare aquí…- Dijo Cess, en un tono levemente triste.- Pero no me interesa, puedo hacer muchas cosas aquí durante el día. Me distraigo…el problema es la noche, me aburro mucho.

- Yo puedo ayudarte con eso.- Una voz ronca detrás de Nori. Santo.

Ahí estaban Santo, Julian y Josh.

-Ewww no, gracias…-Cess dijo, haciendo un gesto de desagrado.

Sofía volteo los ojos.

-Por que todos los chicos solo piensan en eso? – Nori quiso saber, frunciendo el ceño. Y Laura empezó a explicar,

-Es una respuesta química: las mujeres en edad reproductiva emanan una feromona que indica que es apta para-

- Si, Kinney, todos sabemos la respuesta científica, peeero – Julian la interrumpió - la vedad es que algunas chicas son muy atractivas dijo, dándole una mirada fugaz a Sofía – Y no somos de piedra, saben?

-Eh! Yo SOY de piedra!. Gracias por recordarme que NO PUEDO tener una vida sexual.- Santo dijo y le dio un codazo a Julian en las costillas.

Todos rieron.

Tres días antes de su viaje Laura estaba feliz. Aunque no había podido hablar con Logan durante los últimos dos días, ya tenia todo preparado.

Así que esa noche fue hasta su cuarto a arreglar los últimos detalles.

Knock, knock.

Silencio.

Knock, knock, knock.

Silencio. Laura frunció el ceño, y apoyo su oído contra la puerta. Podía escucharlo respirar, y sabía que él podía olerla.

-Sé que estas ahí, ábreme.- Dijo, no necesitaba elevar la voz, Logan podía oírla perfectamente.

Unos instantes de silencio. Luego, movimiento tras la puerta.

-No esta noche nena, tengo algunos... problemas que necesito arreglar- Él dijo sin abrir la puerta. Laura percibió el olor del cigarrillo y el alcohol. Era bastante penetrante, y se imaginó que el cuarto debía estar lleno de humo y botellas de vodka vacías.

-Pero yo-

-No nena, perdón.- Logan gruñó- Hablaremos mañana, si? te buscaré.

Laura se quedó callada. Algo andaba mal, no sabía qué pero tampoco se atrevió a preguntar, sabia que cuando Logan estaba enojado, es mejor dejarlo solo. Ella era así también.

-Bien.

Laura se dio media vuelta y se alejó caminando.

La noche anterior al viaje, Laura y Cess estaban sentadas en el living. Laura le relataba a Cessily la situación de la noche anterior.

- Y el olor al cigarrillo permaneció en mi nariz como por una hora...

-Seguro no es nada. Quizás este nervioso por el viaje.- Dijo Cess, tratando de calmarla, mientras cambiaba de canal en la tele.

- No lo sé…algo le esta molestando, y no tengo idea de qué es.- Laura suspiró - además, me dijo que me buscaría para hablar y aun no ha aparecido.

-No te preocupes, ya vendrá.- dijo Cess - Agradece que por lo menos tienes vacaciones de verano, Laura - Agregó, dándole un suave toque con su codo en el brazo.

-Laura…- La voz de Logan en la puerta – necesito hablarte.

Ella se paró y camino hacia él. Algo en su rostro no le gustó.

Salieron afuera, eran como 9.00pm en una noche ventosa. Diferentes perfumes bailaron en la nariz de Laura, humedad, el olor a los árboles y las flores nocturnas.

- Mira, Niña...-Logan empezó a hablar, se oía nervioso -Sé que solemos pasar los veranos juntos, y sé que hace 3 meses te prometí llevarte a México, pero...

Se detuvo y bajó la mirada, metiendo sus manos en los bolsillos de su vieja chaqueta de cuero. El corazón de Laura se sintió pesado.

- No vamos a ir, verdad? – Ella suspiró, cerrando sus ojos verdes.

- Lo siento niña…surgió algo.- Logan dijo, y sonaba decepcionado también. Puso su pesada mano en el pequeño hombro de Laura - Te lo compensaré lo prometo.

Laura no dijo nada. Estaba enojada y triste.

-No te preocupes, estoy acostumbrada a sentirme decepcionada, Logan.

Laura le dio la espalda y se alejo caminando lentamente, en dirección a la mansión.

-Lo siento Dulzura...

- Ahórratelo...-contestó ella, moviendo su mano en el aire.

Laura pasó corriendo a través del Living, y ahora Julian estaba sentado con Cess en el sofá.

-Laura! – Cess le grito, pero ella no se detuvo. Subió corriendo la escalera.

Los chicos se miraron entre ellos.

-Diablos, si que es rara -Julian dejo escapar una risita, que fue callada por Cess.

-Iré a hablar con ella- dijo la chica y se paró del sofá.

-Si yo fuera tu me quedaría aquí…- le advirtió Logan, mientras entraba del jardín- Está enojada, y no es nada amigable cuando esta enojada.

Cessily puso cara de preocupada

-.

Arriba en su habitación, Laura estaba sentada en la oscuridad. Las lágrimas le caían de los ojos, y ella las secaba rápidamente. Odiaba llorar, lo consideraba un signo de debilidad. Y ella no estaba creada para ser débil.

Pero esta vez no lo podía evitar, estaba realmente triste. Estuvo esperando este viaje por 3 meses.

Se arrodillo en el piso, y puso una gran toalla debajo de ella

SKNITT.

Necesitaba liberar la ira, y la mejor forma de hacerlo sin lastimar a nadie era lastimándose ella misma. En silencio. En la oscuridad. Como siempre había sido. Laura comenzó a cortarse cuando tenía 14 años, luego de que su madre fuera asesinada. Cortarse era algo normal para ella, algo usual, hasta hermoso: ver su sangre carmesí corriendo por su blanca piel, calida. Laura iba hasta el límite, hasta el punto de desmayarse por la pérdida de sangre.

Presionó su garra en su antebrazo, lentamente, mientras sentía su piel abrirse. El líquido vital comenzó a brotar. Mas profundo... mas, hasta que todo se haya ido, hasta que el mundo parezca desaparecer...mas profundo, hasta que toda la ira, todo el dolor haya desaparecido.

Pero se detuvo...

Escuchó pasos en el pasillo.

-Cariño, estas bien?- Cess susurro en la puerta de Laura. No había necesidad de levantar la voz.

-Si.- Laura respondió, cerrando los ojos.

-Quieres hablar?

-No.

- Te sentirás mejor si hablas conmigo…

- No quiero hablar.

Cess guardó silencio por un instante. Cessily conocía a Laura, y sabia que era en vano obligarla a hablar si no quería, porque lo único que lograría es que se cierre más.

-Bien…Estaré en mi habitación si me necesitas.

Laura no respondió y Cess se marchó.

Sus heridas se habían cerrado ya. Solo quedaba una toalla empapada en sangre. La lavaría después. Ahora necesitaba dormir, se sentía un poco mareada.

Luego de una pequeña siesta, Laura se despertó en la oscuridad. Se había quedado dormida bajo la ventana, en el piso. Ahora la luna se elevaba en el cielo, iluminando con una tenue luz blanca el cuarto de Laura.

Abrió la ventana, y se sentó en el marco, con los pies colgando hacia afuera, y miró la luna.

Una hora después, vio a Logan irse del Instituto en su Harley-Davidson, con un bolso. Laura se deslizó dentro de su cuarto otra vez, y cerro la ventana. Volvió a dormir.

A las 3.30am Laura abrió los ojos.

Estaba hambrienta. Y seguía enojada. El toque de queda es a las 23.00, las luces se apagan a esa hora y esta prohibido salir de las habitaciones…pero estaba tan hambrienta. Siempre se sentía hambrienta después de cortarse.

Así que se levantó de su cama, y salió lentamente de su cuarto.

Laura estaba entrenada pra ser silenciosa, casi imperceptible. Y su visión mejorada era muy útil. Así que fue hasta la cocina sin ser vista ni oída.

Abrió el refrigerador, y tomó en sus manos un pote de yogurt. Era una noche calurosa, así que fue una buena elección.

Laura se sentó en la mesa de la cocina y comenzó a comer. Afuera todo era quietud, solo se oia a los grillos cantar.

El yogurt estaba delicioso. Y refrescante. Estaba tan distraída disfrutándolo que casi se cae de la mesa cuando un brillo verde brillante elevó su yogurt en el aire.

-Que estas haciendo aquí, Kinney?- Una voz masculina. Julian estaba en parado en la puerta de la cocina, sus ojos brillaban, verdes.

-Uhmmm…yo?...uhhmm….- Laura masculló, él caminó hacia el refrigerador con una sonrisa, sabia que la había asustado y eso lo ponía de buen humor.

-No te preocupes…yo lo hago todo el tiempo – Julian susurró y le devolvió a Laura su yogurt. - No diré nada si tú no dices nada.

Él abrió la heladera y sacó una manzana, y se paró al lado de Laura. Silencio.

- Pensé que te ibas de viaje, pero vi que el Sr. Logan se fue solo.- Finalmente dijo Julian, mirándola por el rabillo del ojo.

- Me iba a ir.- Laura contesto, bajando la mirada. Él le dio un mordisco a su manzana.

-Y que pasó?- preguntó, luego de tragar.

-No es de tu incumbencia.

-Apuesto a que te dejo porque eres aburridísima - Le dijo él, burlón. – Quien querría pasar un verano contigo de todas maneras? – agrego, mientras le daba otro mordisco a su manzana.

'OK, es suficiente' se dijo Laura.

Julian, por alguna razón, tomo a Laura como objetivo de sus maltratos. Ella lo conoció hace dos años, y desde entonces jamás la trató bien. Laura se contuvo todo este tiempo, no quería pelear: él era el líder de su escuadrón, ella era la chica nueva...

Pero esta vez, algo en su tono de voz la enfureció. Le recordó la voz del Dr. Rice llamándola Bestia estúpida. Era hora de hacerle saber las cosas.

-Sabes qué?- ella le dijo, mientras se bajaba de un salto de la mesa y le ponía la cara frente a la de él - Prefiero ser aburridísima a ser un niño de papá, un tipo que no sabe como sentirse bien sin refregar su poder o su dinero a los demás. Un tipo que se cree muy rudo, pero en realidad es un niño asustadizo, patético e inseguro. Si, prefiero ser aburridísima a ser como tú, Julian Keller.-

Los ojos azules de Julian se ensancharon. Su boca se abrió, pero no pudo articular palabra, así que solo la miro atónito. Los ojos verdes, ahora vivaces y brillantes estaban fijos en los suyos.

Él estaba enojado, ofendido. Asustado. Como diablos lo conocía tan bien? Nunca nadie jamás le había dicho esas cosas. Se sintió desnudo, vulnerable.

- Jodete, clon!. – Julian susurró en la cara de Laura

-Te encantaría, no? – Ella le contestó, con ojos desafiantes. Lo desafiaba a contestarle, a seguir.

Se miraron unos momentos Finalmente, Laura sacudió su cabeza y se dio vuelta para irse.

Julian la observó alejarse. Tenía una sudadera gastada de AC/DC, y bragas de encaje rosado. Julian sabia que Laura Kinney era atractiva, muy atractiva, pero nunca la vio con los ojos que la estaba mirando en ese momento.

Nunca conoció una mujer que lo enfrentara. Ella era brava, feroz.

Y eso le gustaba.

CONTINUARÁ