All the Lost Souls
-Prologo-
Hogwarts, 3 de diciembre. Sala Común de Gryffindor.
-¡Albus, Albus!
La Sala Común esta casi vacía, las vacaciones de Navidad ya casi empezaban y todos los alumnos estaban empacando. Albus Potter desde una butaca cercana a la chimenea levanto la cabeza de su libro en dirección a un rubio que corría hacía él con la túnica de Slytherin desarreglada y el cabello alborotado. Sorprendido, dirigió su mirada al reloj que le habían regalado al cumplir diecisiete años, eran las 2:30 de la madrugada.
Frunció el ceño y estuvo a punto de reclamarle porque lo molestaba a esas horas de la mañana, cuando se fijo que su amigo estaba lleno de cortadas sangrantes y su expresión facial era de preocupación y terror.
Eso fue lo que más le preocupo, Scorpius Malfoy nunca tenía una expresión que no fuera una máscara de indiferencia.
-¡Albus, se la llevaron! ¡SE LA LLEVARON! No pude hacer nada, nada. ¡Me la arrancaron de los brazos! Y ella se fue, se fue sin siquiera mirarme.
Para ese entonces, muchos alumnos iban saliendo de sus respectivas habitaciones con sus ropas de dormir y asomándose por las escaleras de caracol. Los gritos los habían despertado y estaban de espectadores en algo que nunca creyeron oír.
Algunos tenían expresiones de horror mientas que otros solo miraban con curiosidad. Poco después se sintió la sala más fría mientras todos esperaba.
-¿A quién se llevaron, Malfoy? Tranquilízate.- empezaba a impacientarse con los gritos de desesperación de su amigo. Nunca lo había visto tan fuera de control.- ¿Quién era, Scorpius?
-Albus, era Rose.- soltó fuera de sí mientras caía de rodillas en la alfombra de color rojo golpeándola con sus puños con esperanzas de que todo se destruyera.
Sintió como algo pesado le caía en el estomago, aplastaba sus pulmones impidiéndole respirar y provocándole arcadas. Sus ojos le escocían y la cabeza le daba vueltas. Todo lo que pasaba por su mente era la cara de su prima, Rose. Rose a los 5 años columpiándose en el columpio muggle que su abuelo les había construido a los dos. Rose a los 11 años cuando habían recibido su carta de Hogwarts, que tan feliz había estado. Rose cuando fue enviada a Slytherin junto con Scorpius, había tenido tanto miedo pero tras sonreírle ella le regreso la sonrisa. Rose a los 14 en su primera ida a Hogmeade con él. Rose, su prima pelirroja que tanto adoraba.
Se escucharon los gritos ahogados de las personas y unos metros más lejos de ellos, Hugo Weasley soltaba gritos de furia contenida mientras era abrazado por Lily, que sollozaba a su lado.
Lo sabían, tenían años sabiendo que algún día pasaría algo así. Pero nunca pensaron que sería tan pronto.
