Haikyuu y todos sus personajes son propiedad de Furudate Haruichi.
• Autora: Tooru
• Palabras: 292
• Advertencias: Posibles faltas de ortografía y gramática, OoC no tan intencional
• Prompt: High heels
Imaginen a Kageyama usando tacones altos. Ahora entienden por qué sentí que era una necesidad escribir esto.
Tsukishima le observa de arriba a abajo, varias veces. Y se concentra en la forma en la que las piernas de Kageyama se estilizan de una forma que debería ser, como mínimo, ilegal con los altos tacones negros.
Kei se siente tan bendecido de que Tobio haya aceptado ponerse tacones solo para satisfacerlo, y aunque no haya logrado su cometido de obligarle a usar medias altas, se da por bien servido solo con los brillantes zapatos negros.
—Te quedan bien, Reina —suelta con burla y sarcasmo. Quiere provocar a Tobio para que el azabache se acerque y le pise el pecho con uno de sus estilizados y bonitos pies.
Kei, muy en el fondo, desea ser tratado como la mierda que es. Y tocar las torneadas piernas de Kageyama con sus largos y callosos dedos, y pasar su lengua de manera descarada sobre los brillantes tacones negros.
Tobio le complace, pues si algo le molesta más que ser llamado Rey por ese imbécil pervertido, es que usen adjetivos femeninos con su persona. Kageyama obliga a Tsukishima a tocar el frío piso de azulejo con más fuerza de la necesaria, y se sorprende de poder caminar de manera decente con un par de tacones tan altos sin torcerse los tobillos o parecer un potrillo recién nacido.
Tsukishima sonríe complacido al sentir el peso y la presión ejercida por Kageyama. Y se siente tan bendecido que podría morir ahí, en ese preciso instante, y no se arrepentiría de nada.
Porque simplemente es un maldito fetichista que ama ver como Kageyama Tobio le pisa como si fuera la peor mierda del mundo (y tal vez lo sea), mientras pasa su lengua con descaro y sin pudor alguno por un sucio par de brillantes tacones negros.