Prologo
La Esperanza del Clan Ootsutsuki
Cada historia cuenta un suceso diferente, algunas historias tratan de sucesos que pasaron cuando la humanidad todavía comenzaba a dar sus primeros pasos, otras de historias futuristas que tal vez se volverán ciertas o quizás no.
Sin embargo, toda historia tiene un comienzo, y un final, mismo que tarde o temprano debe llegar.
Esta historia, tiene un comienzo muy atrás, tan atrás que nadie recuerda estos sucesos…
En aquello días, en aquellos días distantes…
En aquellas noches, en aquellas noches antiguas…
En aquellos años, en aquellos años distantes…
En aquellos días pasados cuando toda las cosas fueron creadas, en aquel tiempo antiguo donde a todas las cosas se le dio su lugar en los santuarios sagrados de la tierra, cuando el horno fue prendido…
Cuando los cielos fueron separados de la Tierra, cuando la Tierra fue separada de los Cielos…
Cuando la Humanidad fue establecida…
Cuando el pan fue probado por primera vez…
Había una vez un mundo, un mundo lleno de guerras y conflictos, un mundo cuyos habitantes no les importaba quien moría o vivía, no les importaba como pasase ni que edad tenía al que mataban, no les importaba matarse entre ellos hasta extinguirse.
Los Humanos.
Una raza con mucha potencial, el potencial de alcanzar las estrellas y más allá.
Todo eso tirado a la basura por su "actitud"
Lo primero que aprendieron a hacer cuando le dieron la espalda a los dioses, fue construir armas, mismas que fueron aumentando cada vez más su potencia y mortalidad.
Con el pasar de los años, millones de civilizaciones fueron creadas, primero se unieron bajo una sola bandera, un mundo unificado que a pesar de su matanza, era lo más parecido que se podría a una utopía pacifica.
Sin embargo, eso termino, más temprano que tarde.
Los continentes, el mundo mismo se partió.
Cada "trozo" del mundo, eligió su propio nombre, guardar celosamente los tesoros de su tierra y, si se acababan, ir por los de los países más pobres por los suyos.
Eso continuo por unos miles de años, hasta el momento en donde ocurrió.
Una catastrófica guerra que llevo a los humanos al borde de la extinción, destruyendo su tecnología, su historia, sus cimientos, todo simplemente se perdió en el tiempo.
En esos momentos es en los que aparece una raza de seres muy importante, una muy poderosa raza:
Los Ootsutsuki.
Seres de piel blanca, sin poros o pelo corporal, con cabello blanco como la luna, ojos blancos o morados con anillos concéntricos, protuberancias en la cabeza, simulando cuernos.
Una raza extraterrestre que iba y venia de un planeta a otro con el propósito de esparcir por el universo su doctrina, su dios, su todo:
El Shinju.
Un árbol inmenso, descomunal, a veces más grande que un planeta.
Un árbol que recolectaba la putrefacción y la energía negativa del mundo que habitaba para convertirla en una energía que iba mas halla de la comprensión mortal:
El Chakra.
Condensándola todo en un fruto, un simple fruto.
Toda esta historia comenzó por eso; un fruto, nada destacable, podría ser comido por cualquier, pero algo tan pequeño comenzó una larga historia.
y al mismo tiempo lo liberaba para renovar la energía del mismo planeta y así evitar que esta se corrompiera o se malversara por los habitantes de dicho mundo.
Cada mil años este árbol daba luz a ese fruto que alimentaria la energía del mundo una vez mas y así el ciclo se repetiría sin fin y permitiría al mundo que viviera y que se renovara a si mismo.
Había un tabú entre los del Clan Ootsutsuki: Jamás comer el fruto del Shinju.
No solo por ser algo sagrado sino también porque solo a algunos se les permitía comer de el, esto se debe a que el poder que daba el Shinju era tal que podía doblar el espacio y el tiempo a voluntad, convertir a quien lo comiera en prácticamente en un Dios, solo a algunos pocos en el Clan se les concedía este privilegio y a quien no se le concediera pero comiera de este fruto, seria considerado como nada mas que traidores a su Clan.
Sin embargo el ultimo mundo al que fueron los Ootsutsuki estaba plagado por una criatura a la que no le importaba hacer con el mundo lo que quisiera siempre y cuando sacara de ello un beneficio: El Ser Humano
Algunos humanos y Ootsutsuki se enfrentaron, principalmente por la codicia humana y porque los Ootsutsuki creyeron que a los humanos les importaría algo tan "banal" como que La Tierra estuviera bien, es más, cuando los Ootsutsuki les informaron a algunos humanos de lo que hacia el Shinju, estos corrieron la voz y juntos trataron de robar el Fruto de el Shinju para sus propias ambiciones, primero fueron unos pocos, pero luego…
Ocurrió una guerra en la que ningún Ootsutsuki podría sentirse orgulloso de la matanza que hicieron contra los humanos.
Las aguas se tiñeron de rojo, el suelo se lleno de cadáveres, fue tal el nivel de muertes que llevaron a la humanidad al borde de la extinción.
Tras la gran guerra que hubo entre humanos y Ootsutsuki que obligo a los supervivientes a esconderse, los humanos estuvieron volviendo a repoblar en numero el planeta poco a poco sin prisa pero sin pausa.
Esto normalmente seria visto como algo bueno por los Ootsutsuki, de no ser porque tan pronto como sus números crecieron y repoblaron el planeta, sin saber nada del Shinju o los Ootsutsuki, y al no tener un objetivo en común entonces comenzaron las luchas territoriales.
Estas luchas condujeron a cientos de guerras y muertes que se podrían haber evitado y salvado de no ser por la arrogancia humana
Entre este caos y esta mala situación los Ootsutsuki fueron testigos de una mujer que fue afectada por estos acontecimientos y aquella mujer había perdido a su marido por estas guerras y además de ello estaba embarazada
Esta mujer simplemente no quería ver a sus hijos nacer en un mundo de guerra y dolor.
Un mundo plagado por el odio y el sufrimiento sin compasión al que no le importaba que una madre viera morir a sus hijos.
Los Ootsutsuki vieron esto y decidieron darle una oportunidad a la mujer, por lo que sin que la mujer se diera cuenta, ella fue guiada hacia el árbol gracias a los Ootsutsuki y cuando estuvo enfrente del enorme árbol Shinju, lo vio.
Era un fruto con 4 hojas a cada lado, tenia una cascara de color rosado-purpura y adentro estaba el fruto que tenia un color mas purpura, un poco mas grande que una manzana , sin embargo, la mujer podía sentir el poder que venia de aquel fruto.
Entonces la mujer tomo una decisión que iba a afectar a la historia de la humanidad y del Clan de los Ootsutsuki, ella comió el fruto de el Shinju y obtuvo el poder que este árbol escondía tras de si.
Lo que ocurrió fue algo que ningún mortal pudiera prever y que iba a afectar al mundo en un nivel que ninguno se podría imaginar jamás ya que una vez que ella se comió el fruto todo cambio en el mundo y ella gano un increíble poder sin ningún enemigo pudiera oponérsele.
El aspecto físico de Kaguya cambio para adaptarse mejor a su nuevo poder así como su propia genética cambio para convertirse en una Ootsutsuki de sangre pura por ser la única raza, capas de soportar la energía que recorría todo cuerpo: El Chakra.
Ahora su pelo era blanco plateado como la mayoría de Ootsutsuki, sus ojos eran blancos pero en un tono aperlado y su piel pálida como la nieve.
Sin embargo el cambio mas notorio fue la aparición de un tercer ojo en su frente con el que mostraba que su grado de la comprensión del mundo estaba mas allá de lo que nadie jamás habría podido imaginar, algo nuevo incluso entre los Ootsutsuki, que si bien algunos de los que comieron el fruto tenían un ojo extra en alguna parte de su cuerpo el tercer ojo de Kaguya era nuevo incluso para ellos, era un ojo con 6 círculos concéntricos y 3 comas distribuidas en los 3 primeros anillos del ojo.
El obtener esta energía le concedió poderes sobrehumanos que le dieron la facilidad de dominar el mundo sin oposición y eso fue lo que ella hizo: Domino el mundo.
No fue muy difícil gracias a su capacidad de manipular los cinco elementos, las capacidades especiales de manipular el cuerpo y el espíritu, el espacio y el tiempo, las fuerzas fundamentales del universo.
Pero fue gracias a un poder mas allá de la comprensión que ella se hizo con el control de todo: Omnyoton o el Elemento Ying-Yang.
El poder del cuerpo y el alma le dio la capacidad de moldear el mundo prácticamente a su antojo, sin saber que este el poder de este elemento iba muchos mas allá que eso, y con eso ella empezó la conquista del mundo conocido y a imponer la paz a los belicosos y aquellos que querían esclavizar a los demás seres humanos.
Fue una época dorada para el ser humano como alcanzaron la paz y pudieron llegar a un nuevo avance y a una unión nunca antes vista gracias a la Diosa Conejo como se la llamaba mujer.
Kaguya fue a su vez bendecida con dos hijos que adquirieron una parte de el mismo poder que ella poseía así como un aspecto mas parecido al de ella debido a haber estado influenciados al poder puro del fruto. Sin embargo había diferencias entre ambos hermanos como uno de ellos heredo los ojos blancos de su madre llamados Byakugan y la capacidad de manipular los huesos del cuerpo como ella mientras que su otro hijo obtuvo en ambos ojos una versión degradada de su tercer ojo al cual llamo Rinnegan aunque ambos tenían la capacidad de manipular los cinco elementos, junto con los elementos Yin y Yang además de combinarlos
Sin embargo, Kaguya con todo ese poder se volvió arrogante, creyéndose la única merecedora de poseer el Chakra así que se revelo contra los Ootsutsuki y se impuso a si misma como la cabeza del Clan, algo que ni sus hijos ni ningún humano sabia, pero que si importarle mucho vivió alegremente con sus hijos.
Sin embargo la alegría no duro para siempre y esta fue condenada a terminar tarde o temprano , con el tiempo grupos de personas que se oponían a la voluntad de Kaguya se levantaron y trataron de quitarle su poder.
Ella al sentirse amenazada borro a los rebeldes como motas de polvo sin embargo la mecha fue encendida y pronto mas y mas facciones rebeldes empezaron a revelarse en su contra con la intención de arrebatarle el poder y esto causo que la paz que ella había creado se rompiera en mil pedazos.
Así que para terminar con los conflictos Kaguya pensó que necesitaba más poder, un poder superior, una fuerza capaz de imponerse a los demás sin ninguna resistencia por lo que ella decidió algo muy estúpido.
Fundirse en uno con el Shinju.
Sin embargo ella no conto con lo que sentía el Shinju ya que tras años de ver a los humanos matándose y a su vez ella robarle su fruto habían dado lugar a que el árbol sagrado sintiera lo mas cercano a la ira y el odio que claramente dominaron a la pobre Kaguya sometiéndola y convirtiéndola en algo diferente, el Juubi, un ser que se volvió contra los humanos con toda la ira de un Apocalipsis y al ver que los humanos podían aportarle la energía que quería para producir nuevamente un fruto del Shinju uso un Genjutsu proyectado por la luna llamado Mugen Tsukuyomi (Tsukuyomi Infinito).
Con este Genjutsu el Juubi buscaba encerrar a todos los humanos entre las raíces que tenia en su forma Shinju que le serviría y le proporcionarían esa energía que era tan necesaria para crear el fruto, pero hubo dos únicos guerreros que se le resistieron: Hagoromo y Hamura, los hijos de Kaguya.
El Shinju combinado con Kaguya, es decir el Juubi tenia recuerdos de ellos y los veía como sus hijos y pensó que aceptarían de el de devolverle la energía que obtuvieron, mas sin embargo no fue así y el Juubi viéndolo como una traición fue testigo como ambos lo atacaron y sellaron arrebatándole una vez mas su energía y poder conduciéndolo a volverse una simple estatua demoniaca.
En el proceso de sellado ambos hermanos también se dieron cuenta de que perdieron a su madre viendo como Shinju y ella eran uno solo en ese momento.
Años mas tarde Hagoromo decidió dividir la mitad del poder que tenia del Juubi en 9 partes:
Shukaku el mapache de arena de 1 cola.
Matatabi la gata de fuego azul de 2 colas.
Isobu la tortuga camarón de 3 colas.
Son Goku el toro-mono-pulpo de 4 colas,
Kokou la caballo delfín de 5 colas.
Saiken la babosa de 6 colas.
Choumei el escarabajo rinoceronte de 7 colas.
Gyuki el toro-Pulpo de 8 colas.
Y finalmente, el más poderoso de todos, Kurama el zorro de 9 colas.
Estos nueve seres eran la representación de el poder del Juubi, seres que solo estaban hechos de Chakra y nada mas, sin embargo, Hagoromo no los miraba de esa forma, los miraba como sus hijos, por haber sido el quien les dio la vida.
Y por ello Hagoromo amo y cuido de los 9 Bijuus como nadie pudo imaginarse, sin embargo eso también hizo que sus dos hijos biológicos: Indra y Asura se quejaran con el sabio por ello creyendo que el sabio quería mas a unas "simples criaturas" que a sus propios hijos, claro que nunca se lo dirían en la cara.
Cada vez que se quejaban de ello el sabio les daba una respuesta que los callaba inmediatamente.
—Indra y Asura ambos son mis hijos, pero al igual que yo llegara un momento en el que morirán y nos podremos reunir en el otro mundo… pero Kurama y los demás no podrán, ellos tendrán que estar sin mi por toda la eternidad, sufriendo mucho dolor y muchas que no podre evitar por no estar con ellos, este mundo no los acepta y me duele no poder hacer nada para evitarles todo el dolor que tendrán que padecer por ello
Sin embargo hay algo que ni Hagoromo ni Hamura sabían y que podía cambiar el destino del mundo.
Antes de ser sellado el Shinju dejo una semilla que tardaría mucho mas tiempo en germinar que cualquier otra semilla hecha por el, pero tendría aun mas poder que cualquier otra semilla del Shinju y sin saberlo seria el inicio de alguien que se volvió tan poderoso que la mera mención de su nombre hacia temblar a ejércitos, hacer rogar misericordia a el mas valiente y sus pasos hacían temblar la tierra, esta es la historia de un humano que callo al lodo pero que se levanto al cielo como algo que nadie nunca pudo alcanzar, esta es la historia de el humano que se levanto como un DIOS.
Esta es la historia de Naruto Ootsutsuki.
