Hola.! Aquí estoy con un fic que se me ocurrió a partir de mi one-shot Una Noche de Verano, primero lo subí a Potterfics y ahora lo hago aquí.! Espero de corazón que les guste y aquí comienzo con una breve introducción.
Disclaimer: Los personajes que reconozcan aquí le pertenecen únicamente a J.K Rowling y no los uso con ningún objetivo mas que entretenerlos.
La vida de un Black
Cuando el futuro de una persona esta decidido desde antes de nacer, no tiene más que resignarse a lo que ya se decidió. Eso solía ocurrir en muchas de las familias de sangre pura, debían decidir que hacer con sus retoños sino querían que estos se fueran por el mal camino. Para cada joven que naciera en esas familias esto resultaba ser una suerte o un martirio, dependiendo de cómo quisieran llevar su vida.
Con respecto a esto, la vida de un Black era relativamente sencilla, mientras se siguieran las reglas que esta acarreaba. Respetar a la familia y el linaje era lo principal, aunque le seguían otras normas que estaban basadas en lo básico de la etiqueta y las buenas costumbres de una familia de renombre. Aunque… ser parte de algo que por años fue considerado lo mejor que la magia mantenía no llegó a ser nada para Sirius Black.
Para el joven Black ese apellido sólo lo hacia cargar con un saco de responsabilidades y tonterías que nunca llegaron a interesarle; Un gran fastidio, eso era ser un Black. Quedar en Gryffindor fue lo mejor que pudo pasarle a pesar de que su madre lo viera como una tragedia, en esa casa nadie prestaba tanta atención al tipo de sangre que tuviese o la cantidad de galeones que albergara su cámara de Gringotts.
Esa era la casa perfecta para él en Hogwarts.
Ni siquiera tuvo que conocer a cada persona de su casa, siempre le bastó con el pequeño y unido grupo de amigos que consiguió. James Potter, a quien conocía desde antes de entrar al colegio, fue su mejor amigo a pesar de tener otros dos a los que quería y en los que confiaba ciegamente, ellos eran Remus Lupin y Peter Pettigrew; el segundo siempre fue el más extrovertido del grupo y el primero a pesar de ser tímido y de cargar con un secreto que hizo dudar a sus amigos, fue quien les dio las mejores noches de diversión de su vida. Gracias a Lunático, como solían llamarlo, se convirtieron en "Los Merodeadores".
Sirius era de los que tomaban su vida de sangre puro como un martirio y detestaba el tener que pasar sus vacaciones en la casa de sus padres, el tener que aguantar la perorata acerca de cómo ser un Black era lo mejor y como todos debían envidiarlo por ello, era un karma. Aunque claro… Ser la "oveja negra" tenia sus ventajas, normalmente no se pedía su opinión y sus padres no estaban tan interesados en hablar con él para evitar así un disgusto.
Sirius siempre esperaba ansioso el día primero del mes de Septiembre para poder "huir" y no volver a casa sino hasta el año siguiente. Pero irse era algo que no podía lograr, aun…
