Pairings; Newton Geiszler/Hermann Gottlieb, Vanessa Gottlieb/Hermann Gottlieb, Ella/Newton Geiszler.
Disclaimer; Pure Lies. Pacific Rim post Guerra.
Warnings; rating variable, relaciones disfuncionales, kaiju, telepatía, desorden bipolar, self harm, slash, discapacidad, familia rara, spanglish, japanglish, Canon TFYZ, Novela y Film.

Antes que todas las cosas…

(verso primero de la Titanomaquia. Hesíodo)

Éramos –¿Aún lo somos?- científicos.

Era obligatorio que definiera lo que me estaba pasando, de forma racional, pero ni siquiera lograba ponerme en pié.

Me dolía la cabeza, infinitamente. No tenía forma de recuperar la coherencia, después del Drift. Veía todo azul. Muy azul.

Y entonces, apareció Ella…

Newton no estaba seguro de estar soñando; la sensación de realidad –incluyendo el frío del agua- era demasiadamente tangible, como para creer que se trataba de una alucinación y como fuera, Vanessa mantenía vigilados sus medicamentos.

Hermann estaba en alguna parte, pegado a él, igualmente inconsciente. Podía percibirlo, pero no lograba verlo, como cuando sabes que hay alguien contigo en la misma habitación, pero se encuentra a tus espaldas. No reconocía el lugar; una playa de arena blanca y agua de un azul doloroso a los ojos, a más del sol brillante. Pero era la Tierra, sin duda alguna.

Y ella –o ¿Eso?- era… enorme, por decir lo menos. Unos buenos cinco metros de altura. No tenía manera de adivinar que se trataba de una hembra, pero lo supo de inmediato. Cuatro ojos y la piel escamosa, los cuatro brazos y las marcas azules en el pecho. Ocho o quizá diez tentáculos, formando una especie de falda. No era un Precursor, pero tampoco se trataba de un kaiju.

La figura le pareció conocida.

Juan y Daniel Trejo, los pilotos de Matador Fury y sus ídolos aztecas, grabados en los hombros del Jaeger mexicano; el dios de la guerra y la diosa madre.

El parecido era espeluznante y Ella -¿Cómo diablos sabía que era mujer, demonios, si se trataba de un monstruo?- pareció sonreír.

[Percepción. Confianza. Simpatía. Pena]

La ola de sentimiento barrió a Newt; la Mente Colmenaria se comunicaba de forma instantánea, sin seguir la secuencia humana de ideas, pensamientos, palabras, mil veces más lenta.

Ella sintió al instante la sobrecarga en la mente del pequeño humano y, de alguna forma, bajó la velocidad hacia ideas simples, de una sola palabra.

[No dañar. No intención de daño]

Newt se concentró.

—¿Qué quieres de mi? ¿Dónde estamos?

Ella inclinó su cabeza, entornando los ojos y Newton notó las olas del mar mojando las enormes garras, hundidas en la blanca arena.

[Lugar intermedio. En tu mente. Ayuda. Interrogación]

Newton trató de repartir las sensaciones; uno era el ser humano y otro, en ese momento, el científico y tenía que mantener lúcidos a ambos. Y no iba a ser fácil. El significado no dejaba lugar a dudas; ella le estaba pidiendo alguna clase de auxilio.

Una parte de sí mismo soltó una carcajada: ella lucía terrible en su poder, majestuosa en su aspecto ¿Cómo podía estarle pidiendo ayuda? Y, pese al realismo tangible, efectivamente estaban en un sueño. Ella tenía que mantenerse cerca del mar, siendo anfibia, como todo kaiju.

La siguiente idea cayó por su propio peso, en el recuerdo de los instantes eternos, dentro del Drift; una hilera de Precursores manipulando tejido vivo y haciendo kaiju enormes y diferentes, todos salidos del mismo patrón.

Knifehead, Mutavore, Otachi… todos, parte de lo mismo y sin embargo, subordinados a Ambassador y Bishop, pese a ser ellos monumentalmente más grandes, pesados y fuertes.

Una correntada de afecto, dentro de sí, incapaz de definir de qué se trataba o cómo, al mirar a los mil o veinte mil clones de cada kaiju, inermes, indefensos, mansos, heridos…

Y la mirada inteligente de Bishop, las manos inferiores arrancadas de cuajo, la membrana frontal cicatrizada; claro, la carga nuclear de Gipsy había destruido la Garganta, pero no los había matado a todos y la siguiente percepción fue de odio y venganza helada y rencor y apetito.

[Yo. Afecto. Mucho. Tu. La parte de ti que no camina bien (Hermann?) Todas las partes de ti. Yo. Ayuda. Interrogación]

Newton pestañeó, desconcertado, y fue entonces cuando notó la luz en sus manos; todos los tatuajes resplandecían en tonos de un azul y naranja vívido, bajo el sol. El sentimiento era claro e indefinible a la vez, porque no podía trasladarlo a las palabras y de esa forma, tampoco sabía si estaba interpretando lo correcto. Decidió obligar al ser frente a él, hablando en la misma secuencia.

—No comprendo ¿Quieres mi ayuda? ¿Quieres ayudarme?

Ella se inclinó y tomó un poco de arena en una de sus cuatro manos.

[Tú. Parte de mí. Todas las partes de ti. Parte de mí. Ellos, muchos. Ellos, desafecto. Odio. Yo. Protección. Yo, afecto/preocupación/cariño. Amor]

Bueno, Ella estaba avanzando hacia ideas más complicadas y expresándose mejor. Newton sintió la gota ardiendo sobre su pecho; la sangre cubrió uno de los ojos de Onibaba. Uno de los tentáculos que formaban la 'falda' de ella se adelantó y sacando una de sus fosforescentes lenguas azules, lamió la gota caída sobre el corazón del humano. Newt se aterró, paralizado y se preparó para sentir el doloroso pinchazo del kaiju blue.

Todo el tentáculo pareció estremecerse y cambiar de color, pasando por el púrpura y el verde, subiendo en gotas ígneas por la piel del monstruo, atravesando su pecho. Y de pronto, Ella rió.

[Ahora, hablar. Tú y todas las partes de ti, partes de mí, también]

—¿A qué te refieres? ¿Partes de mí? ¿Mis manos? ¿Mis ojos?

Risa.

[No. Ellos, como tú. Iguales a ti. Y pequeños. Y ruidosos. Todos como tú]

—Hum… los demás? Te refieres a todos los humanos, los que son como yo?

[Afirmación. Tú, parte de mí. Humanos, parte de mí. Amor. Afecto/preocupación/cuidado. Mucho tiempo atrás. Muchas eras atrás. Ellos, otros, sangre azul. Tú, humanos, sangre roja.]

Newt trató de discernir los significados. En este momento, las habilidades de Vanessa como lingüista habrían sido invaluables

—Déjame ver si entiendo. Soy lento, si? Los humanos somos parte de ti…

[Afirmativo]

—Los Precursores… es decir, los que tienen sangre azul, también son parte de ti.

[Afirmativo]

—Y ¿Quieres protegernos de ellos?

[Tú, humanos, parte de mí. Ellos, sangre azul, no afecto/preocupación/cuidado. Ellos, no ustedes. Ellos, no amor. Yo, dolor. Yo, defensa, tú/humanos. Tú, ayuda, interrogación]

Como una ola de muchas toneladas de peso, la idea por fin fue clara a la mente de Newton; el monstruo frente a él, tenía que ver con la raza humana y también, con los Precursores. Era alguna especie de lucha fratricida y ella, frente a él, quería su ayuda para evitar esa guerra. Porque no podía hacerlo sola…

Su cerebro eligió ese momento para llegar a un límite y el dolor en el ojo izquierdo aumentó, haciéndolo desmayarse –y ¿cómo carajos alguien puede desmayarse dentro de un sueño?

La voz de Vanessa lo volvió a la realidad

—¡Newt! NEWTON? Got in Himmel! ¡Despierta, por favor!

-0-

Abril de 2027, The Jasper Schoenfeld Research Institute, San Francisco, California.

…La iniciativa de dotar a quienes así lo requieran, de las prótesis adecuadas, utilizando en menor escala la programación original del Programa Jaeger, ha rendido no sólo los resultados esperados, sino que ha beneficiado a más población de la prevista, dados los daños civiles cuantificados durante la guerra kaiju…

…Destaca, en el programa de voluntarias, la actuación de la reconocida modelo Vanessa Elba (neé Gottlieb) quien ha aplicado sobre sí misma los principios más elementales de la integración neural/máquina, consiguiendo notabilísimos resultados en…

Newt se frotó las sienes y releyó el informe.

—Deberías convencerlo, Vannie…

Ella lo miró, desde el restirador de dibujo. Altísima, un metro y noventa –es decir, más que Newton y más que Hermann incluso- la cascada de rizos caramelo oscuro desparramándose sobre sus hombros, de color de café con leche, la tank top y los shorts cubriendo apenas lo necesario de un cuerpo a todas luces perfecto, el pié descalzo y los anteojos de marco redondo en la punta de la nariz. Newt no evitó la sonrisa; era hermosa, en verdad.

Vanessa se encogió de hombros y terminó de atornillar la larga extremidad. Luego, la bajó al piso y se la calzó en la pierna, asentando el pié artificial en el borde del banco, con un click. Negó, con la cabeza.

—No te hace caso a ti, Newt, y eres su otra mitad.

—Y tú, eres su esposa…

—¿Crees que se vería bien si le pinto unas cuantas flores?

Newton se encaró a ella.

—No me cambies el tema. Herms perderá el dolor si acepta la prótesis. Él diseñó y programó esta…cosa— señaló la pierna artificial de Vanessa, tan perfecta que no se diferenciaba de una natural, excepto quizá en el color azul claro y las flores de porcelana que la decoraban completa— para ti y los dos son la pareja del año por eso.

Vanessa lo arremedó en gestos y manos, inclinándose a su estatura.

—El genio del que estamos hablando dice que se sentirá incompleto. Y sabes que es…

—Un maldito terco, lo sé. Lo conozco bien. Pero sucede que a mí también me duele la pierna y la cadera ¿Por qué no lo seduces o algo?

Vanessa puso las manos sobre los hombros de Newt, sonriendo maliciosamente.

—¿Por qué no lo seduces tú?—Newton hizo ojos de espiral.

—Oh, claro ¿Por qué no pensé en eso? Después de todo, tengo mas trasero que tú y…

—Más panza también, querido…

—Mi pancita es adorable y tiene fans, por si no lo sabías!

—Me muero de la envidia, Newt! ¡No tienes idea!

—AHEM…

Los dos se volvieron a la puerta, riendo aún; Hermann traía en brazos y con dificultad, a la pequeña Karla.

—Les he dicho a ambos que no hablen de mí. Vannie, la bebé se despertó y quiere a su mamá. Newton, quieres explicarme que es todo este escándalo?

Vanessa se adelantó y tomó la chiquita en brazos, sonriente y haciéndole arrullos y Newton se cruzó de brazos.

—Fue TU idea que yo viniera a vivir con ustedes, Herms. No puedes pretender que me la pase callado y encerrado en mi habitación, a merced de tus bajos instintos…

—¿CUÁLES BAJOS INSTINTOS, DOCTOR GEISZLER?

Vanessa meneó un dedo frente a ambos.

—Hay una menor de edad presente. Háganme favor de discutir sus cosas en el otro cuarto, verdad bebé? Que no queremos oír a tu papi y a su novio pelear en casa?

—¡Newton no es mi novio, mujer!

—Lo que tu digas, Hermie. Newt, habla con él y ve si lo convences. Voy a bañar a Karla y cenamos en dos horas, si?—Y lo besó en la mejilla. Newton se inclinó sobre la bebé y le hizo un cariño y ésta trató de quitarle los lentes.

Hermann suspiró. Gott in Himmel…

¿De dónde había sacado que traerse a Newton a casa era una buena idea?

-0-

Estoy decidida a hacer esto y terminarlo bien. En cinco semanas, el asunto de las motocicletas habrá terminado definitivamente y, gracias al punto de quiebra con mi hermano, pasará a mi portafolio de cosas aprendidas, pero ya no más a ser una posibilidad seria, lo que me permite volver a escribir en forma…y hay mucho quehacer.

De modo que, para ponerme en forma y disciplinarme, he aquí esta pretensión de grandiosidad. La imagen de dioses bestiales y terribles, al tenemos en todas las mitologías, desde la Titanomaquia hasta los gigantes de hielo y los dioses prehispánicos de la América indígena.

Y es sabido que los locos tenemos alterados los ritmos theta del encefalograma…que viene siendo el mismo ritmo adjudicado a los telépatas.

Esta, pretende ser la historia de lo sucedido a Newton Geißler, después de la guerra; varios capítulos, uno por semana, espero. Culpad del beteo a Yakumo-kam.

Gracias, por leerme.

FA.

Dedicado en forma a la única persona que todavía cree en mí; mi hija Ani.