Summay: - Se que es tarde, pero tengo que decírtelo…me gustas desde hace mucho tiempo y apenas hoy me arme de valor para decírtelo- susurre mirando su lapida.
Lagrimas.
Mire mi vestido y sonreí, aun cuando las lagrimas me eran traicioneras, tome con fuerzas mi pequeño ramo de flores blancas y me adentre al cementerio.
Me dolían los ojos de tanto llorar toda la noche, ayer era uno de esos días perfectos, en los cuales amaba, amaba los lunes y solo era el hecho de que luego del fin de semana lo vería. Lo vería de lejos y una sonrisa traicionera aparecería en mi rostro al verlo, mi corazón latería al ver su sonrisa o que él pasara a un lado de mí.
Cuando fui a la escuela ayer y vi que las chicas; sus seguidoras estaban vestidas de negro, me alarme, y al instante comencé a buscarlo por toda la escuela. Él no estaba.
Fui a la biblioteca como siempre a la misma hora, donde él debería de estar leyendo un libro y escondiéndose de sus admiradoras, pero cuando entre Shaoran no estaba sentado en la última mesa. Mis pensamientos y mi mente me decía que él debería de haber ido de campamento con su familia, eso era lo que quería creer.
Así que fui a la clase de Matemáticas una de las que compartía con él y en la cual Shaoran me dijo que me veía bien con el color rosa una vez que lleve una blusa de mangas largas a la escuela; la primera vez que me hablo.
Él tampoco no estaba en su lugar habitual, el profesor dio inicio a la asistencia y cuando dijeron su nombre, todo el salón callo en un silencio.
-Como muchos saben, el estudiante Shaoran Li, falleció el sábado en la mañana- aun las palabras del profesor resonaban en mi mente, las lagrimas comenzaron a rodar por mis mejillas nuevamente. –Falleció al tratar de ayudar a su hermana a salir del rio, se golpeo la cabeza con una piedra y perdió la razón, encontraron su cuerpo cuatro horas después–
Me sorbe la nariz, ahora comprendía porque mi padre había salido toda la mañana del sábado, cuando llego a casa en la noche me sonrió tristemente.
-¿Qué sucedió?- había dicho.
-Encontraron el cuerpo de un adolescente muerto- comento mi padre. -Como profesor de la escuela, me dijeron que fuera a reconocer el cuerpo, ya que tenía la insignia de la escuela en su bufanda.
Mis pies se movían solos a la única dirección que escuche de estudiantes, pronto encontré aquella lapida de piedra.
A la memoria de sus padres y hermanas.
Shaoran Li un hijo como ningún otro.
Solloce cuando observe su nombre en la lapida. Me deje caer al pasto húmedo y llore. -Te fuiste- dije entre lágrimas.
Cerré los ojos observando su silueta en la oscuridad. Su piel blanca, sus ojos cafés y brillantes, su cabello castaño y corto y aquella sonrisa que hacía que se viera perfecto.
El aire comenzó a soplar con mayor fuerza, abrí los ojos y mire el cielo gris al igual que mi estado de ánimo. Me levante del pasto y suspire.
-Te traje un ramo de flores- susurre con un nudo en la garganta.- Y aun que te parezca patética, me vestí con algo rosa, aun no puedo comprender porque falleciste… el viernes fue el ultimo día que te vi, y ya no mas volveré a verte- dije entrecortada.
Tome aire y lo solté- Extrañare tu sonrisa… tu voz, y la forma en la que mi corazón latía cuando pasabas a mi lado.
-Sé que es tarde, pero tengo que decírtelo…me gustas desde hace mucho tiempo y apenas hoy me arme de valor para decírtelo-susurre mirando su lapida.
-Sakura- escuche en susurro decir mi nombre, como una vez lo hizo.
Las lágrimas seguían rodando por mis mejillas.
Fin.
Nota de la escritora: Esta historia estaba adaptada en personajes de crepúsculo, pero luego que la retire por un tiempo de , quise subirla una vez mas pero con los personajes de Sakura un anime y magna que me gustan.
Espero que les haya gustado. ¿Merezco un comentario?
Ato. Ere
