konichiwaa! watashi no namae itzel desu, este es mi primer fic espero agrade! atte fenixentrecuerdas

Los personajes no me pertenecen le pertenecen a Hajime Izayama solo la historia es mia.


Donde las mariposas nunca mueren

Eren tomaba clases en la facultad de estudios artísticos de trost, ya que después de terminar la guerra y de haber erradicado a los titanes se llegó a un nuevo orden político sin eliminar la corona y nació una nueva orden real donde se estipulaba que cualquier persona carente de estudios debería cursar al menos un año de especialidad, tuviera la edad que fuera, por ese motivo era común encontrar gente de treinta o treinta cinco años entre muchachos de diecisiete.

Los profesores asignados a la sección de eren eran los mejores y los más preparados ya que con el fin de la guerra se crearon centros educativos y dentro de ellos un grupo para los miembros de la legión de reconocimiento pues al ser gente destacada por sus habilidades y valor, merecían un trato especial por haber demostrado su excelencia en el campo de batalla, yace ahí también el motivo de porque sus compañeros de clase eran los mismos que en la guerra, destacándose entre ellos su eterno amor y capitán de la tropa elite de la legión, el sargento Levi.

El ojiverde llevaba más de tres años enamorado de su superior, desde aquella trágica vez cuando lo salvo de ser cristalizado junto con el cuerpo de su ex compañera annie; le encantaba la forma en que su cabello caía sobre sus ojos plateados mientras tomaba notas acerca de técnicas con óleo, adoraba cuando por accidente se dormía en clase, ya que cada vez que sucedía el exsargento optaba por una postura casi idéntica a cuando tomaba el té en el cuartel de la legión, posaba su mano derecha en el relieve de la silla mientras cruzaba su pierna izquierda, con la excepción de que cuando dormitaba su cabeza colgaba hacia abajo y los cabellos largos y azabaches rozaban el borde de su nariz.

Exactamente esa era la postura que sostenía el mayor, ahora que tomaban clase de fotografía, el menor, embobado por la fantástica complexión de su superior no escucho a su profesor hasta que las palabras "proyecto final" llegaron a sus oídos, fue ahí cuando, a regañadientes, tuvo que apartar la vista de su platónico y prestar verdadera atención a lo dicho en clase.

Al finalizar la clase dos horas después el castaño, como era su costumbre, siguió a su enamorado a la biblioteca y lo observo leer por un largo rato hasta que sintió que su manía acosadora había sido completamente satisfecha y se dirigió a su habitación en el antiguo cuartel de la legión, el cual había sido adaptado para funcionar como dormitorios a los estudiantes , su cuarto estaba en el segundo piso, ya no dormía en el sótano desde que había aprendido a canalizar completamente su poder de titán, y hanji le había ofrecido la oportunidad de elegir un cuarto de todos los disponibles así que ,como era de esperarse, escogió el continuo al del sargento Levi, comportamiento que no pasó desapercibido para la mujer de coleta alta, a quien precisamente eren había encontrado en el pasillo cuando regresaba a su pieza.

-¡eren!-

-hanji-san-

-¿apenas regresas de tus clases?-

-sí, estaba en la biblioteca-luego de decir estas palabras eren lamento muchísimo la oportunidad que le había otorgado a la castaña para poder comentarle acerca de su obsesión con Levi.

-espiando de nuevo, ¿o me equivoco?-

-ehh…yo…-

-eso es un sí, dime entonces ¿ahora qué leía?-

-a bradbury de nuevo-

-ese pequeñín, seguro era el mismo libro de siempre-

-sí, lo era-

-está obsesionado con ese texto casi tanto como tú con el-

-¡hanji-san! Por favor no diga cosas tan penosas-

-sabes que es verdad, pues me retiro, Erwin me necesita-

-claro, hasta luego-

-adiós-

Cuando eren acabo su conversación tan penosa se apartó para dejarle el paso libre a la mujer y se encamino a su alcoba, la habitación del castaño era simple, con un armario que contenía su no muy variada ropa y su antiguo uniforme de la legión, un librero unido a un escritorio de madera y una mesa de noche a un costado de la cama, sin embargo del lado izquierdo se encontraba la puerta del baño que, a propósito, compartía con el mayor, el cual siempre lo mantenía impecable y donde eren pasaba noches enteras observando al azabache por la rendija en la puerta del mismo.

Eren, cansado de haber pasado casi cuatro horas viendo a Levi leer con esa gracia suya tan particular, decidió dormir un poco para poder pensar como haría su proyecto final, o más bien "quien" seria, ya que el proyecto consistía en tomar una o varias fotografías de un modelo voluntario y aquella que plasmara por completo los sentimientos que el autor quisiera proyectar seria la merecedora a acreditar con la máxima calificación; el castaño conocía muy bien a quien quería usar como modelo, pero no se atrevería a pedírselo a menos que ganara una batalla interna con su coraje, mientras dormitaba y se retorcía por todos estos sentimientos e inseguridades pudo oír el sonido inconfundible de la puerta de su compañero, pues el otro había por fin regresado al lugar.

Mientras tanto el azabache decidía si tomar un baño o directamente dormir, ya que estaba muy cansado, pero naturalmente su higiene siempre sería fundamental pues había estado en contacto con todos los gérmenes en el exterior y le repugnaba esa sensación, por fin eligió el baño y mientras hundía su pequeño pero claramente bien trabajado cuerpo en la deliciosa agua caliente que escurría un poco fuera de la tina analizaba la oportunidad de elegir una víctima para ese estúpido trabajo final, también decidía que tipo de retrato lograría plasmar, aunque aún más importante se cuestionaba si tendría el valor de preguntarle a ese molesto castaño que diario lo seguía a la biblioteca con sigilo, aunque no lo suficiente ya que el sargento lo había notado desde la primera vez que lo hizo; y si la respuesta le agradaría o no, le parecía realmente estúpido que siendo el soldado más fuerte de la humanidad no pudiera simplemente atravesar la puerta situada a la derecha de la tina y ordenarle que posara como él quería, cuando quería y como lo quería, aunque admitía la posibilidad de que en el momento que lo tuviera completamente a su merced procediera a enseñarle al mocoso cosas más "adultas", porque esos ojos verdes que cambiaban de tonalidad tan espontáneamente eran la razón de porque el corporal aun no había mandado al carajo al menor, pues muy a su pesar el joven estaba más que obsesionado con él.

Aun así el capitán sabía lo que desea y no era conocido por su paciencia así que tomo la decisión que cambiaría la vida de ambos para siempre, al siguiente día le preguntaría, o en todo caso lo obligaría, a aceptar ser su modelo.

Porque lo que el sargento quería, lo conseguía, costase lo que costase.


que les parecioooo!? porfavor dejen reviews para yo saber si la historia les gusto o no, tengo la intencion de separarla en capitulos pero aun no se si sea buena idea, ustedes que opinan?