Hi, hi minna~!

De nuevo su loca autora les trae una nueva historia~ ^^

Lavi: Deberías terminar las otras ¬¬

En eso trabajo, demo, ya no pude resistirme a subir esta T^T

Lavi: Deja de atrasarte o te quedarás sin seguidor s ¬¬

Buuu QAQ

Lavi: Les dejamos que continuen con la lectura -la amarra y amordaza y lleva lejos.

D . - m a n no me pertence, es propiedad de Hoshino Katsura-san... con quien estoy molesta por no sacar ningún capítulo en 2013 y por no dejarme ver a mi amado Usagi QAÓ


Capítulo I - Tentación

En un hermoso jardín de uno de los patios de la prestigiosa escuela Black Order se podía observar a dos jóvenes a la distancia.

-Bueno... Es que… yo... -intentaba hablar totalmente nerviosa.

-¿Si? -animándola a continuar.

-… ¡Me gusta mucho Walker-sempai! -hablando con rapidez, sonrojada y esforzándose en no desviar su mirada de la del chico frente a él.

-… Te agradezco tus sentimientos -con una sonrisa- pero me temo que no puedo aceptarlos.

-¿Walker-sempai? -confundida y triste.

-Lo siento mucho, es que hay alguien que me gusta -con una pequeña sonrisa al pensar en esa persona especial.

-Ah... Ya veo… -la joven con gafas y dos trenzas como peinado comenzó a derramar algunas lágrimas.

-Discúlpame. Estoy seguro que pronto encontrarás a alguien que reciba tu cariño -ofreciéndole un pañuelo.

-Gra-gracias sempai -sollozando.

-Así que se te declararon de nuevo ¿eh? -con burla.

-Ya basta -avergonzado- ¿y cómo es que lo sabes?

-Las noticias corren rápido -con voz cantarina.

-... -sonrojándose más.

-Quien hubiera pensado que mi Ototo sería todo un rompecorazones -abrazándolo, frotando su mejilla con la de Allen.

-Aniki, basta -intentando zafarse.

-¡Abrazo de oso! -grita con emoción mientras lo abraza con fuerza.

-Ah... A-aniki... aire... no-no puedo -intentaba hablar mientras su rostro se tornaba azul.

-¡Ah, sí! Lo siento -soltándolo de inmediato.

-Cof, cof, cof -intentando regular su respiración.

-Vamos Allen, inhala, exhala, inhala, exhala -dándole aire, agitando sus manos cerca de su rostro.

-No sé si deseas matarme o solo fastidiarme -con mirada de pocos amigos.

-¿Cómo puedes decir eso de tu hermano mayor? -con el ojo cristalizado y cubriendo su boca con su mano.

-Eso ya no funciona conmigo, deja de ser melodramático -caminando de nuevo.

-Como extraño al pequeño Allen que solo se preocupaba por mí y no le gustaba hacerme sufrir -limpiando unas lágrimas imaginarias con un pañuelo.

-Ya deja eso -sonrojado- ¿acaso no te da pena hacer semejante teatrito en la calle? No dejan de observarnos.

-Oh Allen, que aguafiestas te has vuelto -en tono juguetón.

-¿Y se supone que es el mayor? -con una gotita- en balde que tenga 3 años más que yo -abriendo la puerta- ¡abuelo! -elevando la voz- hemos llegado.

-¡Panda-jijiiii~! -gritando a todo pulmón.

Un ruido sordo se escucha: Lavi es lanzado contra el muro por una poderosa patada.

-Aniki... ¿Es que acaso nunca aprendes? -con una gotera y un ligero temblor.

-¡¿Cuántas veces te he dicho que no me llames así mocoso?! -gritando de igual manera.

-Itai -sobándose - eres muy malo.

-¡Cállate! -dándole un zarpazo en la cabeza.

-¡Deja de golpearme! -con lagrimones.

-¡Deja de ser tan insolente! -enfadado.

-Yo me voy -deslizándose con cautela a la cocina- ¿qué habrá hoy para comer? -revisando las enormes cazuelas en la estufa.

-¡Allen!

-¡Hiii! -sorprendiéndose y erizándose por el susto.

-¿¡Cuántas veces debo repetirlo!? No husmees en la cocina y pon la mesa. Cielos, no puedo descuidarme de ninguno de los dos -suspiraba con cansancio el hombre mayor.

-Lo siento -con un puchero, haciendo lo que le ordenaron.

Después de comer cada uno se dirigió a su habitación a realizar los deberes de la escuela.

-Que aburrido -con el mando de la televisión en la mano presionando el botón cada tres segundos- trescientos canales y nada digno de verse -resoplando.

-¿Qué haces Aniki? -se acerca el menor curioso.

-Aburriéndome -mirando a Allen.

-Ja ja ja ja que cara tan graciosa.

-Me alegra que te diviertas conmigo -sin expresión alguna.

-No seas sensible Aniki -tomando asiento junto a él.

-Mj -con una mediana sonrisa.

-¿Qué tal si vemos una película?

-¿No crees que ya es algo tarde? -consultando su reloj.

-Aaaanda -acercándose más a él- ¿sí? -poniendo ojos de cachorro.

-Tu… -intentando resistirse.

-El abuelo salió y hace mucho que no vemos una, por favor -rogándole con la mirada.

-… -suspira- está bien -dándose por vencido ya que jamás se ha podido resistir a sus peticiones.

-¡Yay~! -saltando de felicidad.

Minutos más tarde.

-Que buena estuvo -estirándose-

-…

-¿Allen? -extrañado de que no le respondiese.

El albino se había quedado dormido abrazando el gran bowl de palomitas.

-Me pregunto cómo es que puedes comer tanto y no engordar ni un poco -sonriendo de medio lado.

El pelirrojo retira con sumo cuidado el recipiente y se detiene para contemplar al menor.

-Desearía saber quién es la afortunada que ha cautivado tu corazón- acariciando con suavidad su mejilla - seguramente es Lena, ¿no es así? Pero con Komui como hermano debes tener miedo de confesarte -con cierto tono de tristeza- si tan solo… -pasando su pulgar sobre los finos labios.

El pequeño se removió, provocando un respingo en Lavi. Se quedó quieto unos instantes y después suspiró con alivio.

-Allen -removiendo al pequeño con suavidad de un hombro- vamos, despierta. Debes ir a tu alcoba.

-No quiero -aún adormilado.

-¿Cómo de que no? anda, ya es tarde.

-Llévame -estirando sus brazos.

-¡¿Cómo?!

-Por favor -con los ojos cerrados y la voz cansina.

-Niño malcriado -refunfuñando pero termina cargándole al estilo princesa para llevarle a su alcoba.

-¿Ya preparaste todo para mañana? -recostándole con cuidado.

-Sí…

-Hasta mañana -yendo hacía la puerta.

-Hasta mañana -balbuceando y quedándose dormido sobre las cobijas.

-Demonios… ¬¬ -quedándose quieto en la puerta.

-Allen, Allen -intentando despertarlo sin éxito.

-¿Por qué a mí? -quitándole los zapatos- vamos Allen, despierta -llorando.

Con mucho esfuerzo desvistió al albino hasta que lo dejó en ropa interior, estaba a punto de arroparlo cuando…

-Vaya, no me había dado cuenta… -observando el níveo cuerpo, sintiéndose hipnotizado. Incapaz de desviar la vista. Deseaba tocar esa piel, conocer cada curva… y así lo hizo, sus dedos se desplazaban con sumo cuidado.

El albino suspiró una par de veces pero no dio indicios de que estaba despertando.

-Allen -susurró su nombre. Sin saber en qué momento sucedió Lavi se encontraba sobre el albino. Estaba en cuatro: las rodillas apoyadas a los costados de la cintura y sus manos a los lados de su cabeza- solo un poco… -miraba con deseo los labios entreabiertos del pequeño, acercándose a ellos con lentitud.

La puerta se abrió y la silueta de Bookman se iluminó con la luz del pasillo.

-Mocosos malcriados, mira que dejar el tiradero y yéndose a dormir como si nada -acercándose a Allen y acomodando la cobija para que lo cubra un poco más del cuello.

Se dirige a la habitación de Lavi que está enfrente de la de Allen y abre la puerta con precaución.

-Le he dicho que se quite el parche cuando se acueste pero no entiende -mirando al pelirrojo descansar tranquilamente. Sonríe y se retira sin hacer ruido.

-Eso… estuvo cerca -acostándose boca arriba, suspirando y cubriendo sus ojos con el antebrazo izquierdo- soy un idiota -obligándose a dormir, con el corazón latiendo a mil por hora y el sonido de la puerta principal siendo cerrada, volviéndolo a la realidad… a unos milímetros de besar a su propio hermano menor.


Qué les pareció? Espero no les haya decepcionado unu

Bueno para continuar este fic tengo una única condición: 3 Reviews, en el momento en que tengas los tres pondré la continuación, ya que estoy algo insegura con esta historia y no sé si sea de su interés.

Muchas gracias por haber leído y les veré en otra ocasión.

Bye, bye~

=°w°=

Por favor jitomatazos no, mejor pastelazos y si son de chocolate mejor je je je.