Disclaimer: Hetalia no me pertenece "llora", es propiedad única y exclusiva de Hidekazu Himaruya
Notas: Este fic…es una parida muy grande. Está inspirado en experiencias personales…(madre mía). Por cierto, al principio el fic se iba a llamar "Gilbert y sus tres pollos" pero... como que sonaba un poco mal...xD
Advertencias: Humor negro, muerte y sangre de pollos. Ah, y una gallina caníbal xD
(Aunque en este primer capítulo no hay nada de eso, será mas adelante)
Si estás de acuerdo con todo lo de arriba…es que tienes una mente muy perversa. Por lo tanto… bienvenido xD
Cap 1. El reparto
Gilbert se aburría notablemente, sabía que Antonio estaba por ahí coqueteando con el enano italiano, y Francis… bueno… no lo sabía con certeza, pero lo más probable es que estuviera "repartiendo amor" por el mundo ¡Y no es que los necesitara para divertirse! Él se bastaba solo, eso es… pero en cualquier caso, se aburría, así que, finalmente decidió darse una vuelta por la feria, a ver si así se entretenía un poco.
Una vez llegó, le llamó la atención un pequeño puesto donde había un cartel con un pollo gigante.
-¡Tres por uno!- oyó que decía el vendedor del puesto-¡Tres pollitos al precio de uno!
-¡¿Tres pollitos al precio de uno?! ¡Qué ganga tan impresionante, sólo es digna de mí! - exclamó el prusiano acercándose al puesto rápidamente.
-Buenas noches señor ¿Le interesa nuestra oferta?-dijo el hombre-Tres pollos al precio de uno, en total seis eurillos de nada ¡Es una oportunidad única!
"Pues sí que es caro un pollo… Pero no puedo dejar que otro se lleve una oferta así" se lo pensó detenidamente…- ¡Me los llevo! - exclamó exaltado mientras sacaba un billete del bolsillo.
-Maravilloso ¡muchas gracias! - El vendedor le dio la vuelta del billete y le entregó la caja con los pollitos.
-Kesesesese…Soy tan increíble que me sorprendo a mí mismo - Y dicho esto se fue, sin darse cuenta de que en una esquina del puesto, había un cartel tachado donde ponía "Un pollo por 2 euros"…
Ya en casa, se acomodó, abrió la caja donde estaban los pollitos y los puso en una mesa. Había un pollito rubio, otro negro y el último pelirrojo.
-Guau, cada uno es de un color… ¿Qué nombre os voy a poner? - preguntó pensativo. Miró detenidamente al pollito pelirrojo - Tú eres el que más masmola de los tres, así que te voy a llamar…¡Gil! - Intentó acariciarlo, pero el pollo le dio un picotazo - ¡Ah! ¡Hijo de…!- Volvió a intentar tocarlo y recibió otro picotazo - ¡La gallina que te parió pollo!-Enfadado metió al pollo en la caja y se giró hacia los otros. El pollito negro estaba a punto de saltar de la mesa…
-¡Idiotaaa! ¡Que te vas a matar! - gritó Gilbert mientras lo cogía antes de que cayera - Bueno…al menos eres manso - murmuró al ver que éste no le picoteaba - A ti te voy a llamar…An, y tú, rubito - señaló al pollo rubio -¡Serás Fra!
-Oye, Gilbert - escuchó una voz a su espalda, era Ludwig - Antes me…¿Eh? ¿Y esos pollos? ¿Son nuevos?
-¡Ey West! ¡Mira, te presento a mis nuevos pollos! Estos dos son Fra y An, y el que falta - sacó con cuidado al pollo pelirrojo de la caja- Es Gil ¿Qué te parecen?
-Si tan solo te sientes, llama a tus amigos, hombre…
-¡No es eso idiota!
-Bueno…si tú lo dices…Oye, antes me encontré con Antonio mientras paseaba a mi perro y me dijo que si mañana no tienes nada que hacer, te fueras para su casa a pasar el rato.
-Kesesesese, este hombre no puede ni pasar un día sin mí-comentó el prusiano de buen humor-¡No me extraña! Pasando día y noche con el enano italiano, el pobre necesita de mi awesominidad.
-Esa palabra que has dicho no existe…En cualquier caso, me dijo que si ibas le avisaras antes por teléfono.
-Weee…quizás le presento a mis pollos nuevos, seguro que le parecen tan monos que se los quiere trincar…
-…Prefiero no saber que hacéis en vuestros ratos libres…
-¡Idiota! ¡Era un dicho, una broma! ¡¿Cómo quieres que nos trinquemos a un pollo?!
Ante el silencio del rubio, el prusiano decidió ignorar el comentario y cogió el teléfono.
~o~o~o~o~o~o~o~o~o~o~o~
"Al día siguiente"
-¡¿Me quieres abrir la puta puerta, estúpido español?!
Llevaba media hora contada llamando al timbre de la casa de Antonio, y el muy imbécil que no abría.
"Que te apuestas a que está durmiendo el muy…" pensó enfadado - ¡A tomar por saco! ¡Te voy a romper la ventana, ala!- dicho y hecho, cogió un pedrusco que había en el suelo y lo lanzó con todas las ganas hacia la ventana que daba al dormitorio, al cabo de unos minutos, se asomó el idiota español con una sonrisa radiante.
-¡Buenos días! - saludó - ¡Sí que llegas temprano!
-¿¡Qué temprano ni que leches!? ¡Que son la una, pedazo de idiota!
-Ah, claro…- contestó y desapareció de la ventana, al cabo de un rato, le abrió la puerta.
-Porque estoy de buen humor, que si no...te arrancaba la cabeza…
-Yo también me alegro de verte, Gilbo. Por cierto, Francis también viene, lo que no sé cuando…
-Ah…pues mejor, quiero enseñaros algo.
Una vez llegó Francis a la casa del español, Gilbert les enseñó la caja donde tenía a los pollos.
-¡Mirad que preciosidad! ¿No son perfectos, hermosos… grandiosos?
-Son pollos…- respondió Francis
-¡Exacto!
-…
-¡Mira, este seguro que te gusta! kesesesese….- le señaló el pollito rubio- ¡se llama Fra!
El francés se dedico a observar al pequeño pollito y a tocarle de vez en cuando.
-Pues es mono y todo…- susurró con una pequeña sonrisa que se iba haciendo cada vez más grande.
-Umm… ¡Como veo que te has encariñado con él te lo dejaré un día entero!
-Vaya, gracias mon ami…el tito Francis te lo agradecerá un día de estos… con mucho amor.
Ante la cara de perversión que estaba poniendo el francés, Antonio intentó cambiar de tema.
-¿No hay pollo para mí?- preguntó con cara de cordero degollado.
-Ah pues…te puedes quedar con An…- respondió mirando al pollo negro. Por un momento pensó en dejarle a Gil el picoteador...¡pero su pelo era rojo, eso era una puta pasada! Y lo que era una pasada estaba vinculado a él...
Así, después de repartir a los pollos se pasaron todo el día jugando con ellos hasta que cayó la noche.
-Dios, esto de los pollos...es adictivo - declaró Francis viendo por la ventana como anochecía.
-Creo que mejor nos volvemos a casa...ya jugaremos en otra ocasión...
Finalmente, al acabar el día, cada cual volvió a casa con su pollito y todos felices.
Al menos...por ahora...
Continuará... xD
(este fic es la cosa más crack jamás existida)
