EN ESTA OCASIÓN QUISE HACER UN FANFIC CON PERSONAJES CREADOS POR MÍ, Y AL MISMO TIEMPO CONTAR UNA HISTORIA ALTERNA DEL LIBRO
"EL HEROE PERDIDO" ESPERO QUE DISFRUTEN ESTA HISTORIA.
RICARDO ARANTES Y EL LEGADO DE URANO.
CAPITULO I
Nunca pensé que me encontraría a mí mismo escribiendo un diario, pero mi vida se ha vuelto tan peligrosa que creí necesario dar un testimonio de las cosas que he vivido. Espero seguir con vida y contar esta historia por mis propios labios, pero si no es así, quisiera que mi familia y mis amigos sepan que fue lo que me ocurrió. Me llamo Ricardo Arantes, tengo 14 años y esta es mi historia.
Recuerdo que aquella tarde era clara y muy soleada como cualquier otra en la Ciudad de México. Yo corría apresuradamente hacia la parada de autobús. Como de costumbre se me hacía tarde para ir a la escuela. Todo parecía indicar que sería un día común y corriente, pero ignoraba, que ese día no solo sería diferente, si no que sería uno que jamás olvidaría.
Esperaba nervioso en la parada de autobús mientras me reprochaba mi impuntualidad. Se me había hecho tarde ese día porque me demoré haciendo el quehacer. Verán yo sufro un trastorno obsesivo-compulsivo, y por ese motivo tiendo a exagerar en cuanto a la perfección. Debe haber un orden exacto en mi habitación, si hay algo fuera de lugar, siento como si fuera un caos. Y hago la limpieza hasta que esté satisfecho con los resultados. ¿Creen que eso es problemático? Bueno déjenme decirles que también sufro de dislexia y de THDA (Trastorno de hiperactividad con déficit de atención) Por lo que mis calificaciones en la escuela no son del todo buenas.
En fin, seguí esperando el autobús cuando de pronto algo hizo que mi cuerpo se estremeciera. Sentí un hormigueo por todo mi cuerpo y mis sentidos se pusieron alerta como si algo malo estuviera por ocurrir. Observe a mi alrededor, pero no logré detectar ninguna amenaza. Esto me sucedía con frecuencia, era capaz de sentir el peligro, como cuando un perro intentaba morderme en la calle o cuando mi tío Beto usaba alguna receta de la abuela para la cena, la cual siempre resultaba en una mezcla incomible, casi venenosa.
Sin embargo, esta vez, la amenaza que se cernía sobre mí era muy grande. Comenzaba a tener miedo, pero no sabía ni de qué, ya que no lograba identificar ninguna fuente de peligro. Por un momento creí que se trataba de una falsa alarma, hasta que vi a un hombre al otro lado de la calle que estaba observándome fijamente. Era muy alto y fornido, tenía el cabello muy largo y oscuro que le cubría parte del rostro, el cual parecía estar deforme. Llevaba ropa harapienta y estaba descalzo. Vi como aquel desconocido cruzaba la calle lentamente sin quitarme los ojos de encima, mientras se acercaba humedecía sus labios con su lengua, la cual al parecer era tan larga como la de aquel guitarrista de la banda "Kiss". En esos momentos tuve tanto miedo que no pude moverme, quede paralizado. No tenía miedo de que aquel hombre fuera a asaltarme, o a secuestrarme. Sentía perfectamente sus intenciones. Él iba a matarme.
Pensé que tal vez ese sería mi fin, hasta que escuche una voz que hablaba directamente a mi mente. Era la voz de una mujer. "¡Corre rápido y huye!" decía. No se cómo pero mis pies reaccionaron esta vez como si hubieran sido hechizados y siguieran las órdenes de la voz que acababa de escuchar. Corrí lo más rápido que pude hasta que vi una tienda de electrónica y decidí esconderme ahí. El encargado de la tienda, que era un hombre calvo y regordete me saludo.
-¡Buen día jovencito! ¿En qué puedo ayudarte?
-¡Ayúdeme por favor! - dije aun un poco agitado - Llame a la policía, un hombre me persigue y quiere hacerme daño.
El encargado no tuvo tiempo de decir nada, porque en ese momento mi perseguidor entró por el aparador de la tienda destruyendo muchos aparatos caros, incluyendo un Play Station 4 "¡Menudo desperdicio!" pensé.
El señor calvo vio al enorme hombre que había entrado a la tienda y salió corriendo a toda velocidad. Entonces vi que el gigante se aproximaba hacia mí, parecía mucho más alto de lo que lo recordaba y al tenerlo cerca pude verlo con más detalle.
Era realmente horrendo, tenía cicatrices en el rostro, en sus brazos y pies. Sus dientes eran afilados y amarillentos y también emanaba un nauseabundo olor. Pero lo que más me asombro fue su ojo. Tenía un solo ojo, y no me refiero a que fuera tuerto. Él tenía un solo y grande ojo por encima de su deforme nariz. Entonces supe lo que era aquel "hombre." Quería decirlo, pero no podía, eso iba contra toda lógica. Sin embargo el nombre salió de mi boca como vómito verbal.
- ¡Cíclope!- Grite finalmente.
-Veo que no me equivoque contigo - dijo el monstruo - Si has podido discernir y verme a través de la niebla, es porque eres uno de "ellos". Tu olor no es muy fuerte, pero espero que tu sabor sea suculento.
-Mira quién habla de olores fuertes - contesté.
El cíclope molesto se abalanzó contra mí, pero afortunadamente pude esquivarlo.
- Eres rápido pequeñín-dijo el monstruo.
Corrí al extremo opuesto de donde me encontraba y comencé a lanzarle todo lo que tenía a la mano: baterías de celular, bocinas, teléfonos y cuando vi que ni siquiera un microondas había surtido efecto comencé a preocuparme.
El monstruo corrió nuevamente hacia mi. Parecía que estaba perdido, pero entonces vi una puerta a mi lado que tenía un letrero que decía "solo empleados", me dirigí a ella esquivando al mismo tiempo la embestida del Cíclope quien destrozó la pared con su cabeza y quedo atorado de momento. Yo entré por la puerta y me encontré con una oficina vacía y ninguna otra salida, estaba atrapado. En esos momentos volví a escuchar aquella voz hablándome directamente a mi mente "Usa tus dones" me dijo.
Yo no pensaba tener algún don en especial, de hecho creía tener más defectos que virtudes como mi dislexia y mi THDA, y al parecer tendría que agregar "esquizofrenia" a la lista ya que escuchaba voces en mi cabeza.
"Usa tus habilidades" me dijo la voz. En ese momento vi unos dardos clavados en la pared, de aquellos que se usan para jugar tiro al blanco. Eso me hizo fabricar un plan. Tomé los dardos de la pared y me aleje de la puerta y esperé. El monstruo entró, destruyó la puerta y parte de las paredes.
- ¡Te tengo! -grito triunfal el monstruo.
- No, yo te tengo a ti - Contesté mientras lancé uno de los dardos directamente a su ojo.
- ¡Aghhhhhh! - Rugió el Cíclope.
Quizás sí era bueno en algo después de todo. Yo tenía muy buena puntería. Tenía los records más altos en las máquinas de videojuegos, aunque nunca pensé que eso me salvaría algún día la vida.
Aproveche la distracción para escapar, me agache y pase entré las piernas del cíclope. Corrí y me dirigía a la salida, pero otro Cíclope más grande y horrendo me cerró el paso. Este monstruo no tenía cicatrices, pero era igual o más aterrador que el otro. Estaba vestido solamente con un taparrabo y llevaba un collar hecho con huesos de distintos tamaños y formas.
Le lancé dos dardos, pero pudo eludirlos con sus manos. Después se acercó a mí y me atrapó. Me apretó con sus enormes manos, tan fuerte que creí que me asfixiaría. Pero en lugar de eso me lanzó contra una pared con tal furia que me disloqué el hombro derecho. Estaba acabado. Pero en ese momento cuando todo parecía perdido apareció una chica por la puerta de la tienda. Al parecer tenía mi edad, 14 años, quizás ía el cabello negro que casi llegaba a la altura de sus hombros. Tenía unos ojos azules tan brillantes y profundos que podía verlos relucir aun de lejos. Inspiraban temor y admiración al mismo tiempo. Vestía como una guerrera y usaba una tiara plateada además de estar armada con un arco y un carjac.
- ¡Corre! - Le grité, pero ella continuó inmóvil.
-¡Esto es perfecto! Ya llego el postre - dijo el monstruo.
- Cierra la boca esperpento - replicó la joven
La chica había hablado en inglés, no tuve problema en entenderla ya que aunque tenía dislexia y se me dificultaba leer, era bueno aprendiendo otros idiomas, sobre todo era muy bueno hablando latín.
Al parecer el Cíclope también sabía inglés, porque se molestó tanto que se olvidó de mí y centró su atención en la joven arquera. El monstruo corrió hacia ella, pero la muchacha rápidamente disparó una flecha que se incrusto en la garganta del monstruo. Mientras este se retorcía del dolor, la chica sacó una daga de su cinturón y se lanzó hacia el monstruo atravesando su corazón. El cíclope exploto quedando solamente polvo. Parecía haber acabado todo, pero entonces el primer ciclope que herí en el ojo salió de la oficina rugiendo. La chica tomo su arco rápidamente y le lanzó dos flechas, una atravesó el corazón del monstruo y la otra su cabeza. El cíclope acabó igual que su compañero, quedando solo polvo. Yo seguía malherido en el suelo. Logré ver cuando la chica se acercaba hacia mí, pero las fuerzas me abandonaron y me desmayé.
ESPERO LES HAYA GUSTADO EL PRIMER CAPÍTULO. IRÉ SUBIENDO MÁS CONTINUAMENTE. Y SI PUEDEN COMPARTIR SU OPINIÓN EN LOS REVIEWS SE LOS AGRADECERÍA.
