Secuela de "Recuerdos: LJNT"

Capitulo 1: Mi segunda cosecha.

La noche anterior a mi cosecha, antes de que Hazel se fuera, la llamé para que habláramos, Posy y Benji se quedaron en el salón viendo televisión y Gis se quedo con ellos vigilándolos, las dos fuimos a la cocina:

-¿Pasa algo, Katniss? –me pregunto.

-Ya sabes que mañana me elegirán para los juegos Hazel, y es muy poco probable que no vuelva con vida…-

-No digas eso… -

-Por favor, déjame terminar –digo tomando aire –Benji no tiene a nadie mas, exceptuándome, con Haymitch hemos hablado y hemos ideado un plan… si muero, deje bastante de mi dinero en su casa, dinero que será tuyo si ayudas a cuidarlo… no dejes que vaya a un orfanato, por favor –dije casi suplicando.

-Katniss… claro que les ayudare, yo los quiero mucho, a los dos… si no fuera por ti tal vez no hubiese logrado mantener a mi familia con vida –me dijo.

-Muchas gracias, Hazel –dije abrazándola.

Volvimos al salón y Hazel se fue con Posy. Lleve a Benji a la cama y en pocos minutos se durmió.

Subí a mi habitación y me tumbe en mi cama aun con la ropa puesta:

-¿Qué piensas? –me pregunto Gis.

-No se en que debería estar pensando realmente –respondo.

-Intenta dormir un poco, lo necesitaras –me dijo.

Asentí, aunque dudaba de poder dormir bien, me puse un camisón y me acosté en medio de la gigante cama.

Desperté ahogando un grito contra mi almohada, por la ventana no había luz así que aun era de noche, me incorpore en la cama recuperándome de la pesadilla, era una de los usuales: Mis padres y Prim explotando en la mina, una y otra vez.

Abandone las esperanzas de seguir durmiendo y me levante con cuidado de no hacer ruido para no despertar a Gis que dormitaba en una de las almohadas convertido en un cachorro.

Termine de vestir a Benji y comenzamos a desayunar cuando sonó el teléfono:

-¿Hola? –dije.

-¿Cómo estas? –dijo Finnick.

-Bien… creo –respondí.

-Esto es una mierda –

-Dime algo que no sepa ¿Has hablado con Johanna? –pregunte intentando cambiar de tema.

-Si, si se le puede decir hablar, esta pasando por una crisis nerviosa con tu cosecha y tener que volver a ser mentora –respondió.

-Lo imagino, bueno, tengo que ir a vestirme ¿Quieres hablar con Benji? –pregunte.

-Claro, pásamelo –respondió, Benji se me acerco y comenzó a hablar con el. Fui arriba a vestirme, me puse la ropa que me había dejado Cinna la semana pasada que me había visitado.

Media hora antes de que comenzara la cosecha Benji y yo salimos de mi casa, la mire una última vez ya que probablemente no volvería a verla, ni Benji tampoco.

Fuimos a la casa de Haymitch, el y Peeta estaban en la cocina:

-¿Ya estas listo? –pregunte entrando.

-Aquí huele mal –dijo Benji arrugando la nariz.

-Eso es una ofensa para el chico –dijo Haymitch señalando a Peeta –Por algo le pago para que asee –

-Haymitch, yo le pago, no tu –digo sonriendo.

Salimos de la Aldea de los Vencedores, Benji fue donde Hazel y Haymitch fue al estrado donde ya estaban los demás; sentí todas las miradas sobre mi mientras caminaba hacia el área donde tenia que registrarme.

Era la única mujer, obviamente, era la única vencedora del distrito 12.

Effie se acerco al podio luciendo una peluca rosa, pusieron el video mandado del Capitolio y entonces Effie comenzó a hablar:

-Bienvenidos, a la Septuagésima cuarta edición de los juegos del hambre, este año el distrito 12 tendrá el deber de cumplir con la regla impuesta hace 12 años que estipula que cada año un distrito tendría que presentar a su tributo elegido de entre sus vencedores, alternando entre masculino y femenino; este año el distrito 12 presentara al tributo femenino de entre sus vencedores… -se le corto la voz, levante la vista y vi que tenia los ojos humedecidos, tomo un respiro y siguió hablando: -Como siempre… las damas primero –dijo yendo hacia la urna donde se encontraba una única papeleta, con mi nombre escrito en ella –Katniss Everdeen –sentí como las garras de Gis se clavaban un poco fuerte

Camine hacia el estrado y me situé junto a Effie, ella fue hacia la otra urna:

-¡Peeta Mellark! –

Puedo oír un pitido en mis oídos, igual que la ultima vez, veo a Peeta subir y situarse al otro lado de Effie.

El alcalde habla y después estrecho mi mano con la de Peeta.