Esta historia se toma en los años de 1920 en Estados Unidos, y esta historia será en primera persona. Se preguntara de qué persona pues pronto se darán cuenta de quién es.
Siento mis ojos arder por no dormir, mierda y este maldito asiento de tren no ayuda a dormir—dejo de ver por la ventana y miro a Mabel. como Mabel puede dormir así. Bueno, solo tengo que aguantar un poco, ya casi llegamos.
Veo que Mabel se movía un poco, me quede observando la, empezó a llorar. Me pongo de pie, empiezo a mover a Mabel para despertarla y diciéndole.
—Mabel, Mabel. —Veo que ella abre sus ojos.
—Dipper, ya llegamos —me decía Mabelcon una voz triste. Le doy una sonrisa y le digo
—falta poco, será mejor que te levante. —dio un pequeño quejido y tallándose los ojos.
—Dipper mira. —Mabel señalaba la ventana con alegría, mire por la ventana del tren y podía ver la nueva ciudad en donde viviremos —como decía que se llamaba. —decía Mabel.
—enserio no lo recuerdas, es Gravity Fall.
Cuando llegamos a la estación, Mabel empezó a dar de brincos diciendo que era hora de salir. agarre el equipaje de Mabel y el mío sacándolo del tren, esperaba afuera de las estación con el equipaje buscando un auto que no llevara, cuando logre detener un taxi le pedí que me llevara a la orilla del bosque. Me ayudo el conductor a poner el equipaje atrás mientras que Mabel estaba adentro del auto diciendo me que diera prisa. me dio risa por pensar que ellas ayer no era tan feliz. Creo que tome la mejor decisión por venir aquí. cuando terminamos de subir las cosa nos dirigimos a la cabaña de nuestro tío, cuando llegamos a la cabaña. El conductor nos ayudó a llevar el equipaje, le parque junto con una buena propina por ayuda a traer el equipaje, toque la puerta esperando que abriera nuestro tío. Escuche a mi tío diciendo.
—quien es. —pregunto Stan con fuerza
—somos nosotros Dipper y yo, Mabel. —contestando Mabel.
—niños. —contestaba Stan. Abrió la puerta dejando verlo. Lo único que ha cambiado en estos años que no lo hemos visto es que ahora utiliza tirantes y solo lleva un pantalón con una camisa en la frontera de café y blanco.
—niños, cuanto tiempo. —lo decía con burla robando las palabras a Stan.
—por fin eres un adulto. —lo decía Stan riendo, y salió del lumbral de la puerta para ayudarnos a llevar nuestro equipaje, Mabel fue la primera en entrar dejándonos a Stan y a mí con el equipaje. Stan se acercó a mi oído y susurrando me decía
—ahora, que vas hacer. —le respondió con el mismo volumen
—por eso vine, para trabajar para los noroeste. —Stan dio un suspiro y contesto
—deja ver qué puedo hacer, pero estas seguro. —hablaba con una voz triste.
—no tengo otra elección. —de pues de que termine de hablar con Stan, lleve las maletas a la habitación de Mabel y a mi nueva habitación.
Stan se quedó quieto en su pensamiento mientras que yo me iba hacia el ático para dejar las maletas de Mabel.
—Dipper. —decía Mabel abrazándome.
—hola, Mabel. —contestaba feliz, si dejar caer las maletas. En ese momento me reía pero en mi mente pensaba en lo que me obligaría hacer los noroestes para aceptarme como de su familia.
El día transcurrió normalmente como hace tantos años, Mabel obligaba a bailar a todos en la cabaña, unas horas después llego Soos y entro con alegría
—niños, cuando llegaron. —Mabel se dirijio a Soos y le dio una abrazo, mientras que Soos levantaba a Mabel del piso. Soos bajaba a Mabel y preguntándome. —cuanto tiempo se quedarán.
por qué tuviste que preguntar eso —no lo sé... Tal vez unas 2 meses —lo decía con incomodidad y rascándome la nuca.
Las horas pasaron, hablando con Soos con Mabel. Me mostraba feliz pero en mi mente solo pensaba si podré vivir así desde ahora. A las 11 de la mañana Mabel subió a su habitación y yo me dirigió a mi cuarto nuevo, cuando estaba acostado solo me quede mirando el techo esperando a que Stan me llamara, para presentarme a los noroeste.
—Dipper. —escuchaba la voz de Stan hablándome, creo que me quede dormí, mis ojos me pesan. Sabía que tenía que haber dormido en el tren como Mabel. —Niño despierta, tu querías esto recuerda. —abría los ojos y mirando a Stan con ropa diferente de lugar de su camisa desgastada tenía un traje negro, una camisa blanca y una corbata negra con las iniciales N y W.
Me levante de la cama, utilizando de contrapeso pis piernas para poderme sentarme en el borde de la cama y ponerme de pie. Cuando me pare y estire toda mi ropa, Stan empezó a camina hacia la puerta de mi habitación, lo seguía por todo el camino y subiendo a su auto del año, en el auto Stan no decía nada solo mantenía sus ojos en el camino y respiraba un poco agitado, después de unos 20 minutos veía a la distancia una mansión dándome a entender que ya no hay vuelta atrás.
Bien una nueva historia si se alguno pregunta que si es la historia que hablaba la respuesta es que no esta historia invente viendo la imagen de portada.