Los personajes son de Stephanie Meyer a excepción de algunos son míos.
La historia es mía y solo Mía, estoy en contra del plagio y no permito que mi historia sea adaptada.
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Sentía que apenas acababa de cerrar los ojos cuando escuche el molesto sonido del despertador.
Beep... Beep... Beep.
Calla, solo unos minutos mas.
Beep... Beep... Beep.
Gemi mientras hundía la cabeza en la almohada y estiraba el brazo para aventar el maldito aparato.
Avente las cobijas dispuesta a levantarme, si no lo hacia ahora daba por hecho que me quedaría dormida nuevamente, apenas y habia dormido un poco, y llegar tarde a la oficina no era algo que me permitía, yo era la señorita responsable y puntualidad, o al menos así me llamaba Emmett mi compañero y uno de mis mejores amigos.
Me levante e hice mi rutina diaria, tomar una ducha, ponerme mi uniforme y salir, directa a reunirme con mi amigo en una pequeña cafetería que estaba cerca de las oficinas.
Había conocido a Emmett hacía cinco años, debido al trabajo, un tipo enorme lleno de músculos que a simple vista intimidaba, pero cuando lo llegabas a conocer te dabas cuenta que no era mas que un osito de felpa, siempre sonriente y con esos hoyuelos que se lo formaban, haciéndole ver aun mas adorable, el era el "payaso" por así decirlo, del grupo. También estaba Rosalie Hale, novia de Emmett desde hace dos años, una rubia con un cuerpo de infarto, directa y sincera, eso era lo mejor de ella que no se andaba con dobles raseros, tal vez ya era gaje de su oficio pues era la mejor abogada de todo New York.
Y Alice Brandon, un duendecillo lleno de hiperactividad, pequeña de 1.56 mts, loca por la moda y desquiciada por las compras, y como era de suponer era dueña de una de las boutiques mas reconocidas a ella la conocía de toda la vida, habíamos pasado momentos muy importantes juntas, siempre estaba cuando la necesitaba y aunque era desquiciante y poseía la facilidad de sacarme de mis casillas la amaba mas que a una hermana.
-Aqui tiene su pedido, agente Swan.- agradeci, con un movimiento de cabeza a la cajera, y tome mi almuerzo.
Si, agente.
Tabajaba en el FBI en el departamento de policía del estado de Nueva York, mi padre Charlie Swan era el jefe de policía en mi pueblo natal, Forks Washington.
-¡Hasta que por fin llegas, Bella! Me estoy muriendo de hambre.- Reclamo Emmett, apenas puse mi trasero en la silla.
Rodee los ojos y mire mi reloj.
-Apenas son las nueve Emmett.- murmure, pero el ya ni me estaba oyendo, estaba muy ocupado devorando mis donas rellenas de chocolate. Negue con la cabeza fingiendome disgustada, pero la sonrisa en mis labios me delato, asi era Emmett como un pozo sin fondo.-¿Como sigue Rosalie?- pregunte un minuto después cuando vi que Emmett dejaba de comer para darle un sorbo a su café, aproveche para agarrar una dona, no me preocupaba por que no fuera un tan saludable el desayuno, por algo iba al gimnasio todos los días, merecía mi recompensa en forma de graosas y caloríficas donas.
-Igual.- contesto con el ceño fruncido.- Esta estresada y enojada, agradezco que su caso este a punto de terminar y al parecer lleva las de ganar.- cambio su expresión por una sonrisa picara .- lo mejor viene cuando celebramos en privado.
-Hey Emmett.- me queje haciendo una mueca de asco.
-Deberias darle una oportunidad a Newton, quizás te quite lo mojigata.- sugirio elevando sus cejas sugestivamente.
-¡Por Dios, cállate! no estoy tan desesperada como para caer tan bajo.
Emmett hizo una mueca extraña pero al final termino dándome la razón.
Terminamos de almorzar y siguiendo nuestra rutina nos dirigimos a nuestro trabajo, llegando siempre a tiempo, no tenia ni dos minutos de haber llegado a mi oficina cuando Sam Uley, mi jefe entro por la puerta.
-¿Sucede algo Sam?- pregunte al ver su ceño fruncido, deje de lado los papeles que estaba revisando para centrar en el toda mi atención.
-Si bueno...- suspiro ruidosamente sentándose en la silla frente a mi escritorio.- tenemos un caso.-Asenti seria, adoptando mi postura profesional.- Se llama Edward Cullen, tiene veintiocho años.- dijo entregandome una carpeta con varios papeles.
Abrí el archivo para leerlo, mientras Sam en voz alta me lo explicaba.
-Es un empresario reconocido a nivel internacional, su compañía se especializa en comprar acciones y empresas, es dueño de varios hoteles, restaurantes, bares y la lista sigue.- silbe por lo bajo, el tipo estaba forrado de dinero.
-Creo que he oído de el.- murmure mientras veía una foto del sujeto en cuestión, era alto y bien parecido, cabello cobrizo y ojos de un raro verde, entre esmeralda y jade diría yo, era una gran pena para las féminas que el tipo se encontrara en estos archivos.- ¿Cuando lo asesinaron?.- pregunte secamente levantando la vista parra mirarlo.
Sam negó con la cabeza.- El esta vivo, es por eso que estoy aquí.
-¿Cometio algun delito?- no era de extrañar que lo hubiera echo, personas tan ricas como el, hacían locuras para mantenerse en el poder, ya me había tocado ver y apresar a varios.
-No.
-¿Entonces?.- pregunte confundida.
-El hombre necesita protección Bella, es un testigo muy importante. Presencio cuando le disparaban a un hombre, y la platica posterior a esto, si llega para declarar en el juzgado podremos apresar...
-Sigo si entender Sam.- corte, mientras dejaba la carpeta sobre el escritorio.- Eso no me corresponde a mí, al menos que me requieras para la parte de "apresar" no se porque me lo dices, ve al departamento en que se encargaran de eso.
Mi jefe suspiro, mientras me miraba fijamente.
-Edward Cullen no presencio cualquier asesinato Bella.- respondio serio, logrando captar nuevamente toda mi atención.- la persona asesinada fue el juez Amun Lauper, y quien lo hizo... lo asesino Alec Vulturi.
Abrí los ojos sorprendida mientras tomaba nuevamente el archivo y rebuscaba furiosamente la información entre las hojas.
-¡Carajo!.- exclame mientras me dejaba caer en la silla. Años buscando al bastardo de Alec Vulturi para que viniera a aparecer en mi ciudad y cometiera un asesinato en mis narices.- ¿Tienen alguna pista de él?
Sam negó.- Ninguna, después de que el Señor Cullen viniera a decir lo que vio, no supimos mas.
Aventé el pisapapeles que estaba sobre mi escritorio furiosa y frustrada, pase mi mano por el rostro y mi cabello tratando de tranquilzarme.
-Aun asi.- murmure.- no se porque vienes a mi, mi trabajo es ir a buscar al bastardo de Alec.
-No, tu trabajo sera ocuparte de que el Sr. Cullen llegue con vida al juicio.- frunci el ceño
-Soy una agente entrenada no una niñera, ve con los de protección a testigos, yo tengo un criminal que atrapar.
-No hay punto de discucion Bella, es una orden.- lo mire sorprendida por el tono de voz que uso, si bien era cierto que Sam era mi jefe, jamas me habia dado una orden, nuestra relación era mas de colegas y la unica razón por la que yo no tenía su puesto era porque sencillamente no me interesaba y el lo sabía.- Hemos estado discutiendo esto y...
-¿Hemos? ¿Quienes?.- interrumpi. Sam retuvo el aire como si no se hubiera percatado de lo que había dicho hasta que fue demasiado tarde, le di "la mirada"esa que estaba destinada a los criminales cuando los estaba interrogando y podria jurar que lo vi estremecerse.
-Emmett y yo.- respondio tragando grueso.
¿Que? ¿El y... Emmett?
-¿Porque?.- pregunte unicamente incapaz de decir algo mas.
-Es lo mejor para ti Bella, te estas obsesionando demasiado, trabajas de mas y desde que te conozco jamas has tomado un descanso, esto no es saludable para ti.
-Eso no es de su incumbencia, si lo hago es porque mis razones tengo.- espete furiosamente. No podñia creer que Emmett hubiera estado de acuerdo en esto, me sentía traicionada.
-Como te lo dije anteriormente no hay punto de discusión, cuando el señor Cullen declare en el juzgado Alec sera apresado y te concedere el honor de ser tu quien le ponga las esposas, pero tu por el momento iras con Cullen. Eres mi mejor agente y te necesito con el.- Lo mire fijamente sin parpadear furiosa con el y con todos, pude ver como un musculo de su cara se contraia como cuando estaba tenso o nervioso... o ambos.
-Si usted lo ordena Jefe.- conteste de forma sardonica.
-No es tan malo como parece Bella, tomatelo como unas vacaciones.- murmuro mientras abría la puerta para salir.- seis meses de vacaciones.- dijo antes de que la puerta se cerrara tras de el, dejando las palabras flotando en el aire.
Tome el expediente nuevamente en mis manos y observe con mas detalle la foto del Señor Cullen nuevamente.
Seis meses...
-No se como vaya a salir esto.- murmure mientras salia de mi oficina para ir a donde tenian al susodicho para conocerlo en persona.- solo espero que este tan asustado que obedezca a todo lo que digo, si no habra problemas.
Y vaya que los hubo...
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Bueno aqui otra loca idea chicas, diganme que tal les parecio este primer capitulo y dejenme sus reviews porfavor, que son fuente de mi inspiración.
Un comentario que hacer, una -ahora- amiga de FF, que no mencionare para respetar su privacidad, me aviso sobre mi historia "lagrimas de amor" que la estaba publicando no solo en una si no en TRES paginas "conocidas" de Facebook sin mi autorización, quiero agradecerle publicamente, si lees esto ya sabes que es para ti, de igual manera quisiera que me avisaran si saben de otra pagina donde me esten plagiando.
Me senti enojada e indignada, pues el tiempo que inverti y mis ideas en esa historia sentia que no había valido de nada, incluso estuve a punto de quitar la historia de mi cuenta, pero no se me hace justo ni para mi ni para mis lectoras.
De antemano gracias.
Nos vemos en el siguiente
DenisseR_Cullen.