Primera historia que publico. Espero que les guste. Nota más larga al final del capítulo.

Ninguno de los Personajes me pertenecen, sólo los uso en mi imaginación y los plasmo a la PC.

Todos los personajes son invención de Stephenie Meyer, a excepción de John Smith.

SUMMARY:

"Bella es ex-agente de la CIA. Edward aún trabaja. Se conocieron años atrás cuando una desgracia hizo que Bella abandonara la agencia. Una peligrosa misión se acerca. ¿Podrá Edward convencer a Bella de volver a la CIA? Personajes OCC/ExB/ "

Capítulo 1

El momento a llegado.

EPOV

El café era negro y fuerte, como lo hacen en la agencia y, aunque estaba acostumbrado, el café matutino de Esme no tenía comparación.John Smith vino a sentarse detrás de su escritorio y me sonrió a la vez que un simple "Edward" salía de sus labios.

"John" dije imitando su expresión.

"¿Cómo está tu padre?" preguntó como si la reunión que se estaba dando en su casa un martes por la noche era entre dos amigos, y no entre jefe y empleado.

Bueno, convengamos que la relación lo era casi de esa manera. Llevaba más de ocho años trabajando bajo su ala, y lo conocía desde que era un niño. Conoció a mi padre, después de volver malherido de una misión, su última misión de hecho. Digamos que después de estar 2 años en rehabilitación por tres balazos alojados en los ligamentos, abandonó la acción y asumió el puesto de jefe de la unidad. Así fue como se convirtió en un tío para mí.

"Hablé con él la semana pasada, cuando volví de la misión de Lituania" contesté. "Trabajando como siempre, le ofrecieron un buen puesto en New York, pero parece que seguirá un tiempo más en Los Ángeles por el momento."

"¿Que me dices de mis hermanos? ¿Están en misión o ya tomaron sus vacaciones por adelantado como todos los años?"

Estabamos a un mes de Navidad pero ellos siempre se anticipaban a toda la agencia y pedían las licencias para poder disfrutar de unas largas vacaciones, a cambio trabajaban todo el año. Yo en cambio, no veía necesidad de tomar más vacaciones de las que se daban por las festividades, mi trabajo lo era todo. Además Alice y Emmett tenían a sus parejas y después de un año de trabajo, lo que más querían era pasar la mayor cantidad de horas posibles en compañía de su otra mitad.

Para resumir, todos trabajamos para la CIA, pero en diferentes especialidades. Emmett está en la parte del entrenamiento físico. Prepara a todos los aspirantes que quieran someterse a la prueba de XXX, una locura.

Alice se encuentra en la parte de vestuario y maquillajes, se encarga de crear la personalidad completa de una identidad, cuando armamos misiones encubiertas. Rosalie, prepara los autos, no hay otra mejor en todo el país. Y Jasper, hace misiones encubiertas como yo, pero la mayoría del tiempo es quien se encarga de inventar las identidades y de crear todas las tapaderas, para que no haya huecos.

John lanzó una carcajada. "No, aún los tengo trabajando, a ellos y a tus cuñados también. Van a ser de mucha ayuda para lo que se nos viene. Tendrán que tomar sus licencias después de las fiestas y no antes."

"Alice debe estar histerica" dije riéndome al mismo tiempo. "Cuando te metes con sus vacaciones la cosa se pone fea."

Él asintió. "Se acordó de todo mi árbol genealógico cuando le llegó la circular desde la Agencia. Y Emmett mencionó algo de más sufrimiento del normal para los aspirantes." lanzó un suspiro. "Mientras pasen el XXX, no habrá problemas."

Mis labios se curvaron en una sonrisa. Pero luego mi expresión cambió al constatar la última parte de la información."¿Que quieres decir con 'lo que se nos viene'?"

"Me refiero a que vamos necesitar a cada uno de ellos, para que tú puedas meterte en la mansión de LeFront. Sólo por eso, ninguno de ellos irá contigo..." dijo adivinando mis temores. Después de la pérdida de Jacob seis años atrás, decidí que todas las misiones que asumiera, las haría sólo, no quería lastimar a nadie ni que salieran lastimados.

Suspiré de alivio, pero mis sentidos me decían que había una parte de la información que me estaba perdiendo. Fruncí mi ceño y miré a John directo a los ojos. Supe que no pude aplazar más la espera, y lancé mi pregunta.

"¿Que sabes de Bella?"

"Continúa trabajando para la agencia, como tu bien sabes. Ha terminado de darle los últimos retoques al nuevo sistema de micrófonos indetectables. Es una verdadera genio con la tecnología. Vive en el mismo lugar que la agencia le dió. En el estado de Washington. En Forks, para ser más exactos. Pero todo eso tu ya lo sabes..." dijo levantando una ceja.

Yo sólo asentí y guardé silencio.

Él se dio por vencido y continúo, sabiendo que sólo perdería el tiempo si esperaba que yo hiciera un comentario al respecto.

"Ha dicho que No."

Volví a asentir. Sabía que la única manera que ella aceptara trabajar en esta misión, era hacerla entrar en razón. Decirle porque era importante y que ella era la única que conocía el nuevo sistema. Y aún así no estaba seguro de conseguir convencerla. Seguramente seguía siendo tan cabezota como cuando la conocí hace seis años.

Flashback.

"Jake, sabes que esto es muy peligroso, no es una simulación. Nunca tienes la seguridad de salir con vida de una misión." le dije, pero no fue él quién respondió.

"Creo que ya soy lo suficientemente grande como para tomar mis propias decisiones, llevo un par de años menos que tú en la compañía, pero se que puedo hacerlo." dijo la chica de grandes ojos marrones que permanecía al lado de uno de mis compañeros, que aún no se había presentado, más que con el título de 'Prometida de Jake'.

"Además es la primera vez que Jake y yo podemos disfrutar de una misión juntos. No seas aguafiestas." dijo con un tono, que se asemejaba al de Esme cuando me regañaba.

"Esto no es una fiesta. Y pueden salir heridos. Pero allá ustedes." me giré y salí de la sala de conferencia dando un portazo.

Detrás mío oí abrirse la puerta y Jake me llamó.

"¡Hey Antonhy!" dijo alcanzándome en dos grandes pasos, era grande y más musculoso que yo, pero aún así era un niño para mi. "No creas que no he pensado en el peligro...,"dijo mirándose los pies, como con miedo a enfrentar mis ojos "... pero es que Bells es tan cabezota. A veces ni yo se como hacerla cambiar de opinión, a no ser que … " su mente voló a otro lado, y no era uno donde quisiera estar, puso la típica cara de enamorado y supe que no quería saberlo.

"Como sea" le dije al mismo momento que me di vuelta para llegar a mi oficina. Pero Jake volvió a hablar. No me giré pero me paré para oír lo que tenía que decir.

"La dejo ir porque sé que no estará en el campo, ella es todo para mí, si supiera que corre el mínimo riesgo, no la llevaría, aún si para lograr eso tenga que meterla en una celda" dijo con un suspiro. "Pero es más fuerte que yo, a veces es mucho más fuerte que yo. Además ha hecho muchos progresos con las antenas inalámbricas y los micrófonos. Es brillante. Y el Sr. Smith cree que está en condiciones de ir. Es como un diamante en bruto. Eso ha dicho."

Me giré y lo miré directo a los ojos, tratando de demostrarle toda la rabia que tenía dentro. "Para que sepas el mínimo riesgo está, pero ese es tú problema, no el mío."

Si hubiera sido él, jamás la habría dejado ir, y así jamás la hubiera conocido y yo no lo hubiera odiado tanto y no me hubiera odiado tanto.

Fin del Flashback.

"Mañana salgo para Forks, entonces" dije al mismo momento que tomaba los papeles que me alcanzaba John.

"¿Crees que dirá que si?" preguntó, y yo levanté mis hombros en señal de desconocimiento.

"Es mi última jugada." dije con un suspiro.

John se limitó a guardar silencio y tomar otro sorbo de su café.

Abrí la carpeta y me mantuve en silencio por unos momentos mientras leía la información.

"Las pruebas del laboratorio confirman que los químicos utilizados son los mismos que los del explosivo RDX, pero falta algo. El tema acá es como lograron pasarlo e instalarlo dentro del avión. No tiene un dispositivo de acción, ¿como es eso posible?" dije dejando los papeles sobre el escritorio de John. Había muchas similitudes, teníamos al posible fabricante, pero la gran pregunta era como había pasado todos los controles y logrado explotar un avión en mil pedazos.

John tomó otro gran sorbo de su taza y respondió. "Según los expertos, se trata de un nuevo producto con los mismos químicos que el RDX , como obviamente lo demuestran los estudios, pero sospechamos que se trata de un producto nuevo que no se activa, sino que se va degradando hasta llegar a la parte del BOOM. Como si fuera algo automático."

Mis ojos se abrieron un poco más, por qué existía gente que podía crear semejantes armas mientras que aún hay enfermedades en el mundo que no tienen cura y matan a miles al día. Por tipos como estos es por quienes me reniego a instalarme en una oficina y trabajar frente a un ordenador.

Las actividades de campo eran mis favoritas, y no sólo por la adrenalina, sino porque podía, en la mayoría de los casos, enfrentarme a estos traficantes y asesinos, verlos a los ojos y verlos caer. Hay gente que sólo por vestir ropa bonita le pagan o por tener un rostro bello le pagan, son trabajos. Pero hay otro tipo de personas como yo o como John, cuando no era jefe, que tenemos que encargarnos de la parte fea, alguien tiene que encargarse de sacar la basura del planeta.

Ante mi falta de respuesta Smith continuó. "El principal sospechoso es James LeFront, y según la red, el explosivo se llama RXD-a, la semana que viene vas a recibir un correo con la cuenta de e-mail, para que bajo tu nueva identidad, empieces a hacer los arreglos, vas a mostrarte interesado en comprar una gran cantidad de RDX-a. Si todo sale bien, estarás en Francia dentro de 3 semanas, si Bella acepta estará en Francia una semana antes y para el 20 de diciembre estarás de vacaciones. Al igual que tu familia."

Moví mi cabeza de arriba a abajo grabando cada una de las instrucciones en mi memoria.

"Entonces..." dije sacando los cálculos "Tendré dos semanas para convencer y entrenar a Bella para esto, ¿no?"

Él asintió y agregó. "Si dice que Sí... una vez que acepte, se le dará una licencia extraordinaria en su oficina, pero no queremos que se vea un gran cambio en su rutina, por las dudas que alguien más esté vigilando. Así que limítate a entrenarla en los horarios en que debería estar en la oficina. Tendrás a tu disposición una casa en las afueras del pueblo para que vivas y la cual está equipada para que la pongas en forma." dijo guiñándome un ojo al final.

Odiaba cuando John quería hacer de celestina conmigo. Nunca había dicho nada, pero sospecho que el hecho de pedirle custodia para ella, y un informe semanal de sus actividades no dejaba mucho a la imaginación. Gracias a Dios es una de esas personas que no tienen que decir todo lo que piensan. Y me conoce tanto como mi padre.

John cambió de tema para dar por finalizada la reunión.

"¿Has evaluado la posibilidad de aceptar mi puesto cuando mi jubilación sea un hecho? Sabes que estas mucho mejor preparado que cuando yo asumí este puesto..." dijo Smith, sacando a colación un tema que ya habíamos discutido en más de una ocasión. Pero creo que todavía no era momento de abandonar el campo de acción, por lo menos por ahora.

Yo negué con la cabeza, a la vez que una sonrisa escapaba de mis labios, "creo que aún me faltan unos años, soy muy joven para sentar cabeza..." dijo mientras me levantaba de mi lugar.

"Tendrás 22 años, pero para la CIA ya eres todo un veterano." dijo John mientras reía.

"Tal vez espere un par de años más, si es que una bala no me alcanza primero", dije levantando mis cejas. John se puso serio.

"Si no es porque tu nombre es Edward Cullen, te diría que no juegues con eso" dijo apuntándome con el índice. Ambos reímos.

-*-

Dos horas después me hallaba en mi departamento haciendo mis valijas, mientras chequeaba mi boleto de avión, vía on-line. Esa noche, no pude pegar el ojo en anticipación. Todo podía cambiar a partir de mañana.

Viajé en primera clase y bajo mi antiguo nombre Anthony Masen, para evitar sospechas. Pero se que iba a durar poco con ese nombre en Forks. Si ibamos a empezar algo nuevo, quería empezar de verdad, no quería que esto sea una misión más para mi. Era la misión, y no tenía nada que ver con la agencia, aunque en los próximos días seguramente eso era lo que iba a hacerle creer a Bella. No podía llegar y declararle todo, debía ir despacio y ganarme su confianza. La asustaría hasta la locura que yo cayera y le dijera que la amo desde el primer momento en que la ví.

Había llegado la hora. Y no podía soportarlo más, no podía seguir tan lejos de ella. Hace seis años cuando al conocí, supe que sería mi peor pesadilla y mi sueño más dulce durante toda la vida. Sabía todo de ella. Que estudiaba, que hacía, si tenía citas, cual era su bar favorito, que compraba, todo. Había dejado pasar seis años, seis malditos años, para que ella encontrara a quien amar, se asentara, se casara, y entonces estuviera a salvo de mí. Pero no, ella seguía sola y todo el trabajo que fui haciendo para olvidarla, se vino abajo el día que John dijo que quería volver a ponerla en acción. Y así fue como mi cabeza empezó a funcionar a diez mil, el sólo hecho de volver a verla, hacía que el corazón saltara de mi pecho.

El miércoles por la tarde el avión aterrizó en Seattle, donde me esperaba un Volvo plateado, elegido y acondicionado especialmente por Rosalie. A veces me asustaba la forma en que me conocían no sólo mis hermanos sino también mis cuñados. El auto era fantástico y la mejor parte era que las calles se veían desiertas, según mi GPS instalado, distaba a una hora y media de la casa que quedaba en las afueras de Forks, y el lugar donde pasaría mis últimas dos semanas.

El clima era frío, más que en California, por la humedad que se percibía en el ambiente, eso sin contar que estábamos en pleno invierno. Subí al auto y conduje por aproximadamente cuarenta y cinco minutos mientras la lluvia pegaba incesantemente en mi parabrisas, luego el GPS indicó que debía tomar un camino secundario hacia mi izquierda. Minutos más tardes una enorme casa se apareció ante mí. Era enorme para que viviera una sola persona, pero lo suficientemente grande y aislada para las prácticas que se vendrían.

Estacioné mi Volvo en el garaje, y bajé mi pequeño bolso con objetos personales. Según John, cualquier otra cosa que llegara a necesitar, se encontraría en esta casa. Mi celular vibró en mi bolsillo. Lo saqué y abrí a la tapa a la par que caminaba hacia el frente de la casa, y abría la puerta principal. Era un mensaje de Alice.

Espero que hayas tenido un buen viaje. Tu cuarto está en el 3º piso y en el 2º tienes un estudio. Diviértete y espero conocerla pronto. - A

Maldición, como es que ella lo sabía todo. Odiaba que sea tan buena con eso, y a la vez la adoraba, porque después de todo es mi hermana menor, y no puedo no amarla.

La sala del living se presentó ante mí con un gran sofá de tres cuerpos, una mesa ratona, y dos sofás más chicos a los costados. Un gran plasma colgaba de la pared al lado de un gran ventanal que no sólo ocupaba gran parte de una pared, dando una perfecta vista al camino que había recorrido hacia instantes, sino que también ocupaba la mitad de la pared perpendicular. Podía ver el parque exterior trasero, y un gran granero, el cual seguramente estaba equipado bien equipado.

Pasé la escalera que seguramente llegaba hasta mi habitación e ingresé directamente a la cocina. Parecía todo recién instalado, la cocina lucía como esas casas después de los Extrame Makeovers que mira mi madre. Me dirigí a la heladera para asegurarme que no tenía que salir a hacer compras, cuando el celular que estaba en mi mano volvió a vibrar.

Las alacenas y la heladera están llenas. Al igual que tu ropero. En tu estudio, Jaz dejó una PC para que nos mantengas al tanto. Te quiero. - A

Desistí de abrirlas. No valía la pena perder el tiempo. Si mi hermana, Jaz y hasta Rose estaban detrás de todo, no tenía de que preocuparme. No tengo la menor duda que si corriera hasta el granero, tenga allí aparatos como para abrir mi propio gimnasio en el pueblo, gracias a Emmett.

Pasé el resto del día ultimando detalles y repasando todos los eventos. Cené algo parecido a una sopa congelada y me acosté a dormir.

A las 4.00 am. Mi alarma de la mesa de noche sonó y la apague de un golpe mientras me llevaba la mano izquierda a los ojos. El ventanal revelaba una tenue claridad que indicaba que faltaba largo rato para que el sol apareciera. Me deshice de mis sábanas para tomar mi ducha matutina.

Una ducha tibia, un desayuno liviano y treinta minutos depués, me dirigía a toda velocidad por la carretera y hacia el pueblo de Forks.

Eran las 4.45 cuando pasé por adelante de la casa de Bella y una luz se veía encendida. En teoría faltaban todavía unos 15 minutos para que saliera aún. Evalué mis posibilidades y decidí hacer un recorrido por el porque donde suele salir a correr. No me gustaba manejarme en terrenos desconocidos, y sería mucho más practico por cualquier cosa que sucediera. Constantemente constataba si había alguna presencia en mi periferia, pero nunca vi nada. Después de todo se trataba de un pueblo tranquilo y con no más de 3,120 habitantes, tal vez podría bajar un poco la guardia. Pero me resultaba muy difícil. Ya es parte de mi naturaleza.

A las 4.55 am. Estacioné mi auto en la esquina de la cuadra de la casa de Bella y me dispuse a esperar que saliera. Encendí mi iPod y me coloqué los auriculares sin dejar de mirar hacia la puerta de la casa. La música empezó a sonar y lo programé en modo aleatorio, preparado para correr en cuanto sea apropiado.

Mis manos sudaban y pasaba mis dedos por mi pelo una y otra vez, tratando de sacar todo rastro de humedad y luchando contra la rebeldía de mis cabellos a la vez.

A las cinco en punto una morena de aproximadamente un metro sesenta y con unos joggins y un buzo canguro salieron de la casa que vigilaba y dobló en dirección contraria al lugar donde yo estaba parado.

Su pelo estaba atado en una cola alta en su cabeza y caía en ondas hasta sus hombros. Mi corazón se aceleró y por un momento creí sentir su aroma. Como Fresas y Frambuesa. Pero eso es casi imposible, creo.

Lo que si se, es que después de seis largos años, allí estaba Bella, a menos de 50 metros de mí.

El momento había llegado.


¿Y? Gustó, no gusto... es mi primer FF. Agradecería que lo recomendaran :)

Bueeeno... espero sus Reviews, sean los que sean...

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La voy escribiendo de a poco, tengo hasta elñ capítulo cuatro hecho, me entusiasmó mucho la historia, tengo otra más que recién empecé pero no quiero subir 5 historias a la vez y despues hacerlas esperar eternidad.

Sólo digamne su opinión, ya saben ... cuanto más Reviews, más me esmero =)

El capítulo 2 es BPOV, y les prometo que es mejor. =)

Besos, no las leo y ya las estoy adorando

Silvis*