Este fic ha sido creado para los "Desafíos" del foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black".
La escoba volaba apenas a un metro del suelo. Era la escoba que Sirius le había regalado a su ahijado el día que cumplió un año. Desde aquel entonces, muchas cosas habían cambiado. Primero habían muerto los padres del niño, su mejor amigo y para él un hermano y segundo, como padrino que era de Harry, actualmente tenía la custodia y por supuesto, vivía con él.
Por una vez en la vida, Sirius no hizo nada imprudente y no fue en busca de Peter Pettegrew, el culpable de todas las cosas que habían cambiado en esos dos meses que habían transcurrido desde la muerte de James y Lily Potter.
Gracias al no realizar esta imprudencia ahora Peter estaba en la cárcel pagando por su traición y él estaba al cuidado de Harry y no con los Dursley como quería mandarle Dumbledore. Por esto, en la ruinas de la casa de los Potter, cuando se había encontrado con Hagrid primero le había pedido que le diera a Harry y el semigigante no quiso, no obstante, finalmente, a Sirius se le agotó la paciencia y le exigió que le diera el bebé que como tutor suyo él era el responsable de todo lo referente a él y que ni Dumbledore ni nadie podía decidir nada.
Así que después de enfrentarse a Hagrid se llevó al niño de los restos de la vivienda y volaron al pequeño apartamento que tenía en el Callejón Diagon.
Y ahora, dos meses después, allí se encontraban ambos, uno jugando con su escobita y el otro aun lamentándose por haber confiado en la persona incorrecta y haber dejado que su mejor amigo muriera de aquella manera.
Solo se tenían el uno al otro. Harry a Sirius y Sirius a Harry.
Y solo teniéndose ambos fueron pasando los años hasta que Harry entró en Hogwarts y Sirius se quedó, durante la temporada de clase, solo de nuevo.
