Ya habían pasado mas de 400 años desde la lucha contra Naraku. Todos sus compañeros envejecieron y murieron, salvo Shippo que era un demonio. Su mujer Kagome tubo una vida larga y feliz, pero murió al igual que sus hijos y nietos. Su sangre se ha diluido en los humanos y el es el que queda. El es Inuyasha. Oyó hablar de una escuela para que los yokai aprendan a convivir con los humanos, la Academia Yokai.
En este mismo momento estaba ya dentro del Autobús. Llevaba colgada al cuello una magatama de su viejo rosario de kokodama imbuida con el poder de la luna nueva, y mientras lo llevaba permanecía en forma humana, aunque parte de su olfato permanecía, y valía por tres humanos. Ahora se hacia llamar Inuki Higurashi, ya que los nombres de Inuyasha y Seshomaru eran muy famosos en el mundo de los yokai.
- Ten cuidado en este sitio, chico- Dijo el conductor del autobús- Esta escuela es algo realmente terrorífico
-Khe- Contesto Inuki (Así me referiré a el a menos que este en su forma de hanyo)- Creeme viejo, he visto y oído cosas peores.
Y era cierto: Ciempiés gigantes, ríos de sangre, hordas de zombies y de demonios... En cuanto a lo de oír: Había oído a Kagome cantar en la ducha, momento en el que desafinaba mucho.
Mientras recordaba el pasado y caminaba por el bosque, un grito lo saco de su estupor.
-CUIDADO
Zas. En cuanto se giro, se encontró con que una bici le había dado en toda la frente haciéndole caer al suelo aturdido
- Lo siento.
Cuando Inuki abrió los ojos vio que encima suyo se encontraba una hermosa joven vestida con uniforme escolar y con ojos verdes y el pelo rosado.
- No te preocupes por eso, he recibido golpes peores
Como los zarpazos de Sesshomaru, el veneno de Naraku, los osuwari de Kagome... Pensó recordando el pasado.
- Lo siento, de verdad. Soy anémica, así que a veces me desmayo. Oh, estas sangrando.
Era verdad, un pequeño corte había aparecido en su mejilla y sangraba ligeramente. La chica trato de limpiar el corte pero al poco su vista se nublo y se acerco lentamente a Inuki y le dijo
- Lo siento... pero...soy ...un vampiro.
CHUUU...
La joven mordió a Inuki en el cuello y empezó a beber. Cuando se separo de el le dijo.
-Ahhh... Lo siento, es que no he podido resistirme.
-No te preocupes, he pasado por cosas peores-Decía Inuki rascándose la zona del mordisco, que ya se había curado-Así que eres un vampiro realmente?
-Si- Dijo ella alegremente para luego cambiar su expresión a una preocupada-Tu... odias a los vampiros?
-No veo porque debería- Contesto Inuki- Aunque ya me he topado con ellos en el pasado y tu no te pareces a uno.
-Oh, eso es por el rosario que llevo en el pecho, si me lo quito me convierto en un vampiro realmente terrorífico. Por cierto, me llamo Moka Akashiya
-Me llamo Inuki Higurashi, un placer.
- Como ya sabréis, esta academia es solo para monstruos. Aquí aprenderéis a convivir con los humanos.
Ese era el final del discurso dado por la profesora Nekonome.
- Pse. Oiga profesora, no seria mejor comernos a todos esos humanos? Y en el caso de las chicas divertirnos con ellas.
Esto lo dijo un chico castaño con pintas de delincuente. La clase se puso a murmurar:
- Mirad, es Saizo.
-Dicen que lo han traído aquí para reformarlo. Ha violado infinidad de chicas en el mundo humano.
Inuki al oír esto ardió de rabia. Este tipo era repugnante.
-Lo siento, llego tarde. Me he perdido.
-Oh, no es nada. Pasa.
En la clase entro una joven de ojos verde y pelo rosado. Era Moka.
-Yo Moka. Cuanto tiempo no?- Dijo Inuki.
- Oh, Inuki. Estas en mi clase. Es genial (Le abraza efusiva-mente)
En eso empiezan a caer miradas asesinas hacia Inuki que ni se inmutaba. Por otra parte, Saizo se relamía de forma sádica y pervertida.
(En el patio)
Mientras estaban en el jardín, bebiendo algo apareció Saizo.
-Eh, Moka.
Saizo agarro a Inuki por el cuello y lo empotro contra la pared.
-Que haces andando con este debilucho? Yo podría complacerte mejor.
-SUELTAME GUSANO REPUGNANTE.
Inuki se revolvió en la pared y derribó a Saizo de un puñetazo. Moka agarro a Inuki del brazo y se lo llevo a la azotea mientras decía:
-Lo siento, pero con el estoy bien servida.
Una vez en la azotea
- Eso fue muy valiente de tu parte, Inuki.
- Nada, me he enfrentado a bichos mas fuertes que el. Además no permito que nadie se meta con mis amigos.
- JAJA...La verdad es que eres mi primer amigo. Antes iba a una escuela de humanos. Pero los humanos no creen en monstruos así que me discriminaban y acosaban. Les odio(Esto ultimo lo dice con gran rencor)
- Yo pase por algo similar. Y aunque no me fiaba del los humanos, no les odiaba. Además hace tiempo me enamore de una humana, que me enseño que el odio no es bueno.
-Que fue de ella?
- Murió hace tiempo.
-Oh.
Tras un silencio incomodo Inuki empezó a dirigirse a la puerta.
-Vamos?
-Si
(Horas mas tarde...)
Unas horas mas tarde, al atardecer, Moka había decidido salir a dar un paseo, y se encontró con Saizo. Eso era malo, ella no podía quitarse el rosario por si misma, y no tenia a Inuki a su lado para defenderla. Saizo sonrío de forma sádica y adopto su verdadera forma: Creció de tamaño y la piel paso a ser de color entre gris y marrón. Era algo así como un orco.
-Ahora no escaparas Moka, seras mía lo quieras o no.
- NNOOOOOOOOOO.
A una cierta distancia, Inuki la oyó gritar, así que corrió tan rápido como pudo, esperando que Moka estuviera bien hasta que el llegara. Cuando llego, Moka estaba llena de la baba de la lengua de Saizo, y el se aproximaba lentamente a ella.
-Saizo, esta prohibido revelar tu verdadera forma a menos que sea en defensa propia. Si se enteran de esto...
-No pasara nada si no se enteran. Y me encargare de que no digas nada.
Cuando Saizo iba a abalanzarse sobre ella, una sombra corrió a gran velocidad y le dio una patada en la cara. Era Inuki. Pero estaba en forma humana, así que el ataque no le hizo nada a Saizo, que le cogio la pierna y lo lanzo al suelo. En el proceso, Inuki cogió la cruz de Moka, y es esta se salio de la junta.
- No puede ser, el rosario...
Una gran explosión de energía demoniaca surgió de Moka, que se desarrolló un poco, su pelo se volvió plateado y sus ojos rojos y felinos. No había duda.
-No puede ser. Eres un monstruo de clase S. Un vampiro.
-Exacto. Y ahora. CONOCE TU LUGAR GUSANO.
Y en eso le pego una bestial patada en la cabeza a Saizo y lo incrusto en la pared de una gran montaña dejándolo KO.
- Y en cuanto a ti. La otra Moka y yo te debemos una por esto.
- Otra Moka?
- Mmmm...Bueno, el rosario suprime parte de mi mente así como mi poder. La Moka que conoces y la que ves ahora no tienen nada que ver.
Al cabo de unos días, Inuki se había escapado de Moka antes de que esta le chupara la sangre. Mientras caminaba, oyó un pequeño gemido, y después:
XXX: Ayudadme por favor, no puedo respirar.
Era una chica, probablemente de su edad, muy bien dotada y con el pelo azul. Cualquiera diría que era una belleza, pero Inuki podía olerlo. Era una succubo. Bueno, solo debía evitar mirarla a los ojos. Por su parte, la chica, llamada Kurumu Kuromo no podía creerlo: Como podía ese hombre deducir lo que era y resistirse así? Esto era supuestamente imposible. Tal era su sorpresa que se le olvido fingir.
- Ya te encuentras mejor?
- Eh? Ah si. Gracias por ayudarme. Me llamo Kurumu Kuromo, del grupo A.
-Inuki Higurashi. Grupo A. De nada Succubo.
-Que? Como...?
-Tengo mis métodos.
La joven decidió que a partir de entonces debería vigilarlo. Si podía determinar la raza de un monstruo pese a que este permaneciera en forma humana podía ser un peligro.
De repente, Inuki noto dos olores familiares, uno non grato y que hacia tiempo que no notaba. De entre los arboles surgió Moka, que iba acompañada de un joven, mas alto que Inuki, con rasgos aristocráticos y pelo largo y plateado. Pero había un rasgo que jamas olvidaría: Dos rayas como tatuadas en cada mejilla y cada dorso de las manos, así como la luna en su frente.
- Tenias razón Sesshomaru-sama. Gracias.
- Moka, alejate de el.
- Que? Porque? Si se ha ofrecido a ayudarme a encontrarte. Dice que te conoce.
- Moka, ALEJATE DE EL.
Moka acabó obedeciéndole y se puso detrás de el, pero el intruso dio un par de pasos hacia Inuki.
- Vaya, que sorpresa. Veo que tras tanto tiempo aun te acuerdas de mi.
-(Moka y Kurumu) De que le conoces, Inuki-kun?
- Que quieres conmigo?-Preguntó el aludido- Si no recuerdo mal, a tus ojos soy un engendro despreciable al que debías sacar de su desgracia.
- Algunas cosas cambian con el tiempo. Que nombre usas?
- Inuki Higurashi.
Y tras eso se fue. Moka y Kurumu estaban impresionadas. Se notaba que se conocían de algo, pero, de que? De que conocía Inuki al famoso Sesshomaru?. Kurumu ya lo tenia decidido. Inuki debía o ser suyo...o desaparecer.
(Un par de horas mas tarde, en los pasillos de la academia)
