Compartiendo dolor y oscuridad
Hola, me gustaría darles la bienvenida a mi primer fic, sè que aùn no tengo la experiencia para escribir historias, pero espero hacerlo lo mejor posible. Este fic nace desde una idea muy alocada que llegò a mi mientras leìa uno de los millones de dramiones que existen y hoy comienzo a hacerla realidad. Los invito a entrar en este mundo oscuro que naciò en mi cabeza y que hoy quiero compartir con usteds.
Espero lo disfruten
Disclaimer: los personajes, escenarios, hechizos,etc... pertenecen a J.K Rowling
Capitulo 1: Sin vuelta atrás
Siento como mi cabello golpea mi rostro, como el frió de la noche parece entumecer mi cuerpo y mi alma, como cada briza parece llevarse lo poco que queda de mi antigua yo, el frió invernal y la oscuridad parece volver más tenebroso el lugar, las ramas de los árboles despojadas de sus hojas formando escalofriantes formas antes le habrían causado escalofríos. Sonrió ante la idea, le parecía cliché que los lugares en donde ocurrían cosas oscuras o tenebrosas siempre se veían así, oscuros y fríos, como si la luz no pudiera ingresar y permitir brindar esperanza, pero la oscuridad ya no la asustaba, habían pasado tantas cosas que seria absurdo que sintiera miedo de algo tan simple cuando ella sabía que el verdadero terror podía ser desatado por el que desde hoy se convertiría en su amo.
Un sonido a su lado la sacó de sus pensamientos y se regañó a si misma por permitirse una distracción en estos momentos, necesitaba mostrarse entera y segura de sí misma, los días en que solía ser una impulsiva gryffindor que solía dejarse llevar por sus impulsos y habría dado su vida por otros habían quedado atrás, esa misma debilidad fue la que la llevó a cometer tantos errores, la que hizo que todo se destruyera en un abismo de dolor , lo que la llevó a esta situación.
Una risa maniática la hizo volver a la realidad, sabía que ella estaría ahí, observándola meticulosamente para detectar hasta el más mínimo ápice de duda en su rostro, esperando ver un deje de debilidad en ella. Fue cuanto sintió la intrusión en su mente.
- ¿Qué es lo que esperas ver Bella?- Preguntó con una frialdad sabiendo que la haría enfurecer con el apodo. Bellatrix la observó con odio por un momento, pero luego su expresión cambió a una malvada sonrisa que habría hecho temblar a cualquiera.
- Oh, solo me preguntaba en que momento correrías a esconderte con tu asqueroso amigo Potter- dijo con desprecio al decir el apellido del que una vez fue su mejor amigo mientras movía de manera distraída su varita entre sus manos.
- Ambas sabemos que no lo haré, déjame en paz, el lord nos espera- siguió caminando sin mirar a su "acompañante". Se encontraban cerca del lugar del encuentro, podía escuchar los murmullos de varias personas mientras se internaban más en el bosque, cuando entraron en el claro pudo ver que había una gran cantidad de gente, sin embargo, no pudo identificarlos, cada uno llevaba su túnica negra y máscara plateada puesta, contó alrededor de 30 personas. Deben ser sus seguidores más fieles pensó.
Al pasar cada uno de ellos se giró para intentar ver a quien traía Bellatrix. Pudo imaginarse la curiosidad en cada rostro de no ser por las máscaras. Al llegar al centro del claro todos se posicionaron alrededor de ella esperando la llegada de su señor.
No tuvo tiempo ni de pensar cuando vio como de entre un espeso humo negro aparecía Lord Voldemort, el hombre (si así podía llamarse) que aterrorizaba a toda la comunidad mágica y muggle, se veía más fuerte que nunca, su rostro parecía más humano, dejando de lado sus rasgos de serpiente por unos mas humanos, pero lo que más le sorprendió fueron sus ojos, los cuales eran de un negro absoluto con un halo rojo, una mirada que parecía solo transmitir odio y desprecio, que de no haber sido imposible habría jurado que podían matar.
Se acerco a ella con paso altivo mirando a su alrededor a todos sus seguidores, los cuales comenzaron a hacer una reverencia ante su señor y ella imitó el gesto inclinándose ante el que sería su señor.
-Mis leales súbditos se preguntarán para que los e citado el día de hoy, esta noche una nueva persona se une a nuestras filas, otra persona más que está dispuesta a cambiar este mundo y limpiarlo de la escoria que lo contamina mediante los medios que sean necesarios- dijo dirigiéndose a todos mientras avanzaba hasta quedar frente a mí, levante mi rostro para mirarlo a través de mi máscara sintiendo como un escalofrió recorría toda mi columna vertebral y como el vello se me erizaba, sabia que si mostraba debilidad muchas varitas se levantarían para darme una muy dolorosa muerte, el señor tenebroso continuó – Esta noche será la única en la que haré una excepción- muchos murmuraron entre ellos tratando de especular sobre que hablaba.– La persona que se encuentra hoy delante de nosotros no es una sangre pura, ni siquiera es una mestiza, es una sangre sucia la que se une hoy a nuestras filas- todo el claro quedó en silencio, Voldemort se regodeó viendo la reacción de todos, por su puesto que nadie se esperaba esa revelación, su misión era eliminar a todos los sangre sucia, no reclutarlos, sin embargo, nadie se atrevía ni siquiera a respirar. Luego de pasado el impacto uno de los mortifagos que no pude identificar se adelantó furioso.
-¡COMO QUE UNA SANGRE SU…..- no alcanzó a terminar la frase cuando yo había conjurado un poderoso cruciatus, lo veía retorcerse en el suelo y gritar de dolor, mantuve el hechizo y aumenté la intensidad hasta que sentí el chasquido de sus huesos al romperse, no podía dejar de pensar que debería sentirse muy culpable, pero el remordimiento no había llegado, cuando vio que brotaba sangre de la boca del hombre retiró su hechizo.
El señor tenebroso miraba la escena con diversión y admiración hasta que consideró que debía continuar – Esta más que claro que no e pedido la opinión de ninguno de ustedes- dijo mirando serio a cada uno desafiando a que alguno lo contradijera- Como pudimos apreciar nos encontramos ante una persona con un poder inusual en los de su clase y como muestra de mi grandeza le permitiré formar parte de nuestras filas- solo se escuchaba silencio- Descúbrete el brazo derecho- dijo mirándome fijamente.
Sin dudar me levanté la túnica dejando expuesto mi antebrazo ante el hombre que una vez quise destruir y vi como con una sonrisa apoyaba su varita en mi piel. Sentía dolor, el brazo me quemaba, sentía que por mis venas corría fuego y que miles de cuchillos rompían mi piel, tuve que morder mi lengua para no soltar un gemido de dolor y cerré mis ojos con fuerza para contener las lágrimas que amenazaban con salir, podía sentir como cada célula de mi cuerpo era quemada, pero me mantuve quieta y erguida, con la mascara de indiferencia que me había obligado a mi misma a usar. Luego de lo que pareció una eternidad el señor tenebroso quitó su varita y pude ver como la marca yacía enrojecida en mi brazo, la marca que antes le había causado tanto temor, esa marca formada por una serpiente saliendo de una calavera que antes solo podía significar muerte, ahora para ella significaba vida.
Me levante y mirándolo a los ojos dije -Mi lord, no lo decepcionaré- hice una reverencia sabiendo que a él le gustaría. Se giró y mirando a sus servidores dijo- Denle la bienvenida a la nueva integrante de nuestras filas, Hermione Granger-
