Veneno Adictivo

By: Miyu

Miyu: No puedo evitarlo, la pobre Kagero me hace sentir tanta pena... Quería dedicarle este drabble, en honor a ella.

Advertencia: Un toque lime tal vez.

Summary: Parece que un jutsu con un antídoto te vuelve inmune al veneno por diez minutos. Kagero lo sabe y se lo da a beber a Gennosuke...

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- ¡Por favor, Gennosuke-Sama! -rogaba la hermosa mujer

En la habitación solo estaban ellos dos. ella se veía exuberante como siempre mientras él se veía extrañado. En el piso, una botella en el piso vacía.

El cabello de ella se posaba sobre su hermoso kimono blanco; mientras caminaba lentamente hacía él. Gennosuke no sabía como actuar. Kagero tan solo se tiró a los brazos del ninja.

- Kagero... Yo...- vacilaba la voz de Gennosuke

-Por favor, Gennosuke-Sama... Tan solo tenemos diez minutos...-

Ella se acercó hasta sus labios y lo besó desesperadamente; tomando por sorpresa. Sentía como el veneno estaba allí; más no lo había matado... El antídoto si funcionaba. Al separarse ella lo miró a los ojos; esa mirada de tristeza y alegría...

El ninja entendió y tomó a aquella mujer por los brazos; posandola en la cama. Sabía que lo que hacía estaba mal... pero no podía dejar destruida a Kagero.

Comenzó a besarla por todo su cuerpo; ella derramó unas lágrimas de felicidad mientras ambos se despojaban de la ropa. Ambos cuerpos desnudos disfrutando de las caricias y los deseos pasionales. Todo el cuarto se comenzaba a llenar del veneno de aquella mujer; más aún Gennosuke no sentía nada, solo más deseo de estar con aquella mujer.

Acarició el hermoso cuerpo que tenía; no dejando escapar ningún rincón por donde no besar. Su cuello, sus pechos, su vientre. Todo. Ella sonrió con lujuria mientras acariciaba todo lo que podía de él. Cada roce era un placer tras otro. Nunca había sido más feliz.

Así pasaron los diez minutos. Gennosuke inmediatamente sintió reaccionar el efecto del veneno y se separó de aquella mujer. Kagero por su parte se cubrió lo más que pudo; evitando así dañar a su amante. Este último tocio un poco mientras abría las ventanas, necesitaba aire.

Ambos comenzaron a vestirse al final aquel acto deseado. Kagero sonrió con tristeza mientras miraba a Gennosuke; éste le dedico una sonrisa de dolor. Se acercó para besarle, pero este la detuvo en un abrazo acomodando su cabeza en su pecho; mientras acariciaba su cabello.

- Esta bien así, Kagero...-

- Te amo... Lo siento... Gracias- susurró la voz débil esa mujer

"Se que jamás seré como esa maldita de Oboro, pero te estoy profundamente agradecida por no pensar en ella..." pensó mientras de afirmaba a la ropa de Gennosuke; y caía profundamente dormida.

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En honor a Kagero. Porque a veces un don es en realidad una maldición; y creo que ella lo sabe muy bien.

Saludos,

Akatsuki Miyu