Disclaimer :Naruto es de kishimoto

Este fanfic participa en el reto: Universos alternos

De : La aldea oculta entre las hojas


Miedo sentí al ver que la chica más gótica de mi salón me que iría besar. No cualquiera era besado por ella, de curvas muy provocativas, ojos color marrón y con muchas pecas cubriéndole el rostro

—Usted si que está muy rico papi

El rubor creció en mis mejillas

—Vea Hanabi no estoy... Dispuesto a besarla

Su boca roja como un cereza se curvaron en una sonrisa traviesa. Sentí las palmas de mis manos sudar un montón mientras que ella recorría mi mejilla con su dedo

—Debe aprovechar. Que quiero besarlo Aburame, no se haga el imbécil

¿No hacerme el imbécil? Si la besara, ella sería mi primer beso.. No quiero que mi primer beso sea tan desastroso y todavía más con una chica como ella. Delgada y con un escote algo respetuoso se acercó más y pegó su pecho, que es pequeño a mi costado. Yo obviamente me alejé más rápido que inmediato, no quiero besar por que... Tengo los dientes feos

Lo se, para algunas personas, esto es relativamente estúpido, pero para mi es muy importante. A todas las chicas les gustan esos tipos de telenovela, de ojos bonitos, altos y ¡Dientes bonitos!

Yo se que no los tengo

Su cabeza me llega al pecho, bajita y espero escaparme...

—¡No quiero!—manifesté una vez más

Siento que mi camisa se va a romper cuando Hanabi me coge del cuello de esta y me derriba literalmente al suelo. Eran como las 4 de la tarde, el sol estaba bajando su intensidad y el suelo no estaba tan caliente como me lo esperaba, así que el choque no fue tan duro

Quise esquivarla, pero la enana esta, de una manera muy sorpresiva junto su boca con la mía mientras que yo traté de quitármela de encima. En un solo segundo, en el cual iba a gritarle, metió su lengua dentro de mi boca y puso una de sus manos atrás en mi espalda mientras que la otra, en mi nuca para profundizar el beso

Cerré los ojos aunque después los abrí totalmente horrorizado cuando su lengua tocó todos mis dientes delanteros. Se separó un poco, con una mueca de disgusto

—Bueno... Supongo que nadie es perfecto

El besaso que nos pegamos fue tan largo, enrolló sus piernas con las mías, me jaloneó muchas veces el cabello y en un momento adecuado hasta dijo mi nombre en suspiros, cuando le acariciaba el largo cabello castaño y bajaba mis manos hasta la cintura donde me detenía obviamente. Hanabi con sus pequeñas manos recorría mis hombros, mi cabello, hasta se atrevió a pasarme la mano por debajo de mi camisa, para rasguñarme la espalda, algo que le reclamé alarmado

—Besas muy rico— dijo jadeante como respuesta

A lo que le dije sin pensarlo dos veces

—Tu igual

Solté un suspiro, parecía agotada al máximo de tanto besuqueo entre nosotros, descansó su rostro en mi pecho por un momento y minutos después entrelazó sus manos con las mías. Vaya, es la primera vez que me besé con una chica y todavía más, la más gótica del salón