ODIAME O AMAME.
CAPITULO 1
Soy una chica afortunada, tengo una beca deportiva completa en la universidad de Tokio, estudió Química y planeo llegar a trabajar en las farmacéuticas Searrs ese es mi objetivo, ahora solo estoy buscando un apartamento de precio accesible y que por lo menos esté libre de ratas. Mis padres siempre están de viaje y es por ello que crecí en casa de mi prima Mai Tokiha, ella también estudiará en Tokio el único problema es que ella vivirá con su novia de toda la vida Nina Wong, y claro como es rica no es cualquier apartamento es un penthouses en una zona exclusiva y a pesar de que ellas me habían hecho la invitación formal de vivir ahí la rechacé, y no fue por espacio ya que su hogar es enorme tres recamaras, dos baños completos, comedor, sala de estar, etc,etc.
La verdad es que quiero evitar ser un mal tercio en su vida de casadas (bueno vivir con alguien es como estar ya casado para mi), mis padres van a apoyarme con cierto capital y yo debo de asegurarme que sea el suficiente para la renta y comidas de mi persona, incluso he pensado en trabajar pero mi beca no se mantendrá si no practico diariamente, alcance la medalla de bronce a mi corta edad en los juegos olímpicos pero realmente mi meta no es volver a participar y llevarme el Oro, esto solo es el medio por el cual mi sueño de ser Química será alcanzado.
Después de varios periódicos y sitios tachados una pelirroja se acerca por la espalda.
-Aun puedes vivir con nosotras Nat- hablándome al oído.
-¡Ah! ¡No te acerques así podría darme un infarto!-yo recuperándome.
-Solo digo que no tienes porque andar pasando trabajos si puedes vivir conmigo.
-Mira Mai no quiero estar de mal tercio ni mucho menos andar escuchando tus aventuras salvajes.
-Mira eso ni vas a notarlo, bueno Nina a veces es muy intensa pero no es siempre.
-Mai vivíamos juntas y siempre me iba a ver televisión al máximo volumen a la sala para no escucharlas en tu habitación.
-¿Acaso es por la vez nos viste en la cama?-mirada picara.
-¡Hey idiota no sabia que estaban en casa! Se suponía que estaban de excursión además eso fue cuando teníamos 16 años, y si es un trauma para mi.
-Bueno todo fue por que te lastimaste el brazo y regresaste antes a casa.
-Además es mi oportunidad de probar que me puedo valer por mi misma-tono orgulloso.
-Aja, no sabes ni cocinar una Maruchan sin quemarla- risa incontrolable.
-Puedo hacerlo-sonrojada- ya lo veras.
-De cuerdo esperare con ansias.
-Mira aquí esta uno, es un poco costoso pero esta cerca de escuela –dije señalando un anuncio en el periódico- si logro administrarlo será Pan comido.
-Podemos ir a verlo ahora esta dentro del horario y además te lo pueden ganar.
Salimos de prisa del apartamento de Mai, subimos a su coche y en media hora llegamos al lugar, era un edificio de seis plantas, sencillo y limpio, justo lo que habia estado esperando, al llegar a la recepción me indicaron que solo quedaba una habitación pero esta era aun mas costosa, como no habia elevador subimos los seis pisos por las escaleras y claro Mai estaba mas que cansada, esa mujer no tiene condición.
-¡Vamos son solo cuatro escalones mas!-dije riendo.
-¡Rayos! Yo no estoy acostumbrada a andar haciendo ejercicio como tú.
-Es como las rutinas que haces con Nina-chan-reí- pero menos intensas.
-¡Cállate Nat!, mira parece que esta abierta la puerta.
Al entrar estaba asombrada el lugar era enorme, fui a ver la recamara y había una segunda habitación, un baño en cada una pero solo la segunda tenia bañera, pronto se escucho una voz.
-¿Qué le parece joven?-se trataba de un señor de edad avanzada.
-Es increíble, quiero tomarla-dije
-De acuerdo aun que esta diseñada para dos personas, ¿no será demasiado para usted sola?-dijo el anciano.
-Ara Ara, es verdad ambas podríamos compartirlo- dijo una mujer castaña que nunca vi llegar- aun que no se si para la señorita haya inconveniente.
-La verdad preferiría estar sola-mai me codeo en ese momento.
-Nat tienes que pensar que es muy costoso para ti sola y además ella es muy hermosa-dijo lo ultimo guiñando el ojo.
-Esta bien lo compartiré con usted-dije mientras le daba la mano.
-Fujino Shizuru-dijo-¿y usted es?
-Kuga Natsuki-respondí.
Sus ojos me miraron de una forma muy extraña, su mirada rojiza, escudriñaba la mía. Firmamos los papeles y estaba hecho compartiría el departamento con esa chica que tenia una extraña mirada, cuando hicimos la mudanza peleamos por la recamara con la bañera.
-Kuga-san debería de haber una forma de decidir ¿Quién se quedara con la bañera?
-Yo lo dije primero-dije molesta-.
-Esta bien, ¿que te parece si te quedas con ella pero me das total libertad de usarla cuando quiera?
-No creo que eso funcione-dije.
-Lo hará porque soy estudiante de medicina así que no estaré la mayor parte del tiempo, veras ya estoy en practicas y eso me mantiene en el Hospital.
-¿Entonces para que quieres vivir aquí?
-Porque en mis tiempos libres me gustaría llegar a dormir en una habitación que sea mía y no en el Hospital.
-De acuerdo me quedaré con la bañera y a cambio podrás usarla cuando quieras.
-Solo espero a Kuga-san no se le ocurra espiarme.
-¿Qué? ¡Yo no soy homosexual no tengo razón para andar espiando!-dije molesta.
-Espero no seas Homofóbica.
-No lo soy, solo digo que no tienes que preocuparte por ello.
-¿Entonces no tienes nada contra las personas homosexuales?
-Ya te lo dije, no, no tengo problema con ello cada quien decide lo que hace.
-Entonces será estupendo porque yo si lo soy-dijo sonriendo.
Yo no pude decir nada más, me parecía que ella lo tramaba desde el principio pero ya había dado mi palabra ahora no me podía echar para atrás. Cuando por fin nos instalamos Mai vino a verme y Fujino fue quien la recibió.
-Buenos días soy Tokiha Mai, vengo a ver a Natsuki.
-Buenos días Tokiha-san, adelante yo ya voy de salida.
-Por favor llámame Mai
-Claro entonces llámame Shizuru, ¿de acuerdo Mai-san?
-De acuerdo Shizuru-san.
Mai llego a mi habitación como colegiala enamorada.
-Es increíble que vivas con una chica tan sensual como Shizuru-san
-No inventes ¿Por qué se supone debería alegrarme?
-Nat esa mujer se cae de buena y tú la ignoras.
-No soy Gay como tú, así que no me importa en lo mas mínimo.
-¿segura que nunca has resbalado con una mujer?
-Nao no cuenta solo era para experimentar y vi que no me gusto así que no sigas.
-No mientas que si no seguiste saliendo con ella fue porque vinimos a Tokio.
-Hokkaido no está al otro lado del mundo, así que no es por la distancia que no la veo.
-Entonces ¿Por qué no vamos a estrenar tu bañera ahora mismo?
-¡No lo haré!
-¿Te pongo nerviosa?
-¡Ni madres! Solo que ya no estamos en jardín de niños.
-Pero si nos bañábamos juntas hace tres años
-¡Cállate!
-Nat entonces acepta cobarde.
-¡No soy cobarde!
-Si lo eres.
-De acuerdo vamos para allá.
Nos desvestimos e introdujimos en la bañera.
-Ah, nada como un buen baño, esta bañera es bastante amplia ¿verdad?
-Si, se nota si hay suficiente espacio para tus enormes pechos.
-¡Oye! No son tan grandes
-Claro que si, realmente debes tener cuidado de no llegar a ahogar a Nina-chan.
-¡Que tarada eres Nat!-dijo riendo- ella así me ama.
-¿Qué mujer gay o hombre no amaría unas tetas enormes como las tuyas?
-¡Ya es suficiente! Deja de burlarte Nat
-Esta bien, no diré nada más.
-Me das envidia
-¿Por qué?
-Pues tu cuerpo esta en excelente forma.
-Es el deporte, tengo que ir a correr a la pista a las 5 AM e ir a natación después de clases.
-Pero siempre has estado en forma a pesar de lo que comes.
-oye me prometiste guardar el secreto de mis comidas
-Lo se, pero aun que lo contara nadie me creería que tienes esas curvas comiendo pizza, hamburguesas, papas fritas, soda y cerveza.
-Solo cuando tengo competencias dejo de beber por un mes.
-A veces pienso que eres alcohólica.
-Pues no lo soy.
-¿Recuerdas que cuando éramos pequeñas siempre hablábamos en la bañera?
-Si, supongo lo había olvidado, ¿oye realmente piensas seguir con Nina-chan?
-Claro que si, a pesar de las bromas que digo ella es en serio, lo he pensado bien y ya hablamos en algunas ocasiones de ello, es la persona correcta para mi.
-¿Y eso cómo lo sabes?
-Cuando el sentimiento es más fuerte que el orgullo, si me enojo mi orgullo se parte solo por estar bien con ella y no es un sacrificio sino algo mas, no se de que manera podría explicarlo.
-Espero algún día tener a alguien que me haga sentir de esa manera.
Mai se fue por la tarde, pronto anocheció y yo solo perdía tiempo en la laptop chateando con amigos mientras tomaba una copa de vino, tal vez Mai tenia razón y soy alcohólica, de pronto escuche la puerta abrirse, me asome un poco y vi a Shizuru besándose con una chica de cabello negro corto, me sonroje un poco pero no dejaba de verlas, las manos de Shizuru subían y bajaban en el cuerpo de la chica, hasta que Shizuru miró hacia mi habitación no sabía si me había visto pero me acosté en la cama, boca abajo y cubriéndome hasta la cabeza con la cobija, ¿Qué rayos estaba haciendo? No había hecho nada malo era ella la que no tenía vergüenza pues no tenia porque traer a esa chica a casa, escuche murmullos y después el cierre de la puerta principal enseguida se escuchó la puerta de la habitación de Shizuru y luego alguien entro en mi habitación, yo sentía mi corazón latir mas fuerte, por alguna razón estaba avergonzada, pronto escuche el sonido del agua correr, supongo se iba a duchar ese era el trato, entrada libre a mi habitación cuando quisiera.
Después de media hora escuche sus pasos del baño a mi cama, sentí su peso posarse sobre el colchón, ella estaba sentada a mi lado, sus manos se enredaban en mis cabellos, y al bajar hacia mi cuello no lo resistí más y me levanté de golpe.
-¡Que diablos estas haciendo!-¿esta que piensa?
-Solo estaba tocando tu cabello.
-¡Pues no lo hagas! El trato era solo la bañera no mi cama.
-¿Estás sugiriendo que podría entrar a tu cama también?
-Yo no dije eso en ningún momento, ahora déjame sola por favor-intentando ser educada-.
-No lo creo Kuga-san, has interrumpido mi cita.
-yo no hice nada, además se supone no debemos traer personas aquí.
-ni darse baños con ellas-dijo.
-¿Me viste con Mai?-¿a que hora esta idiota nos vio?
-Solo las escuche reír.
-Eso no significa nada Mai es mi prima
-Nunca has escuchado eso de que a la prima-le tape la boca
-No lo digas, de verdad disculpa si eso te molesto debí haber preguntado antes pero no es la misma situación ella es mi prima, Fujino.
-Natsuki mi cita se fue por ti, tendrás que pagar por eso.
-Fujino yo no tuve la culpa de ello y ahora sal de mi habitación no estoy jugando.
-¿Quién dijo que esto es un juego? Además llámame Shizuru.
-No lo haré y déjate de tonterías.
Pero me derribó en la cama, no podía moverme pero no era solamente por su cuerpo sobre mi, era esa mirada que fijamente mantenía en mis pupilas. Resoplo en mis oídos, y eso era algo que me erizaba la piel no podía soportarlo.
-Déjame en paz, ya te lo dije no soy Gay.
-Eso ya lo veremos, porque tu cuerpo no piensa igual.
Beso lentamente mi cuello, el lóbulo de mi oreja lo mordió despacio, ella parecía entender las reacciones de mi cuerpo y yo no podía detenerla, odiaba esa sensación de debilidad, no podía escapar, ahora venia el golpe final, con una mano sujeto mis manos por encima de mi cabeza, mientras con la otra me tomo por el rostro y hundió su boca en la mía, podía sentir su lengua moverse, estaba muy asustada porque aquello estaba excitándome, no lo entendía, después su mano se deslizo por debajo de mis jeans, esto era demasiado estaba tocándome de una manera desconocida para mi y para mi suerte logro hacerme terminar en un orgasmo estruendoso .
-Shizuru…basta- dije jadeando.
-Mira que me has dicho por mi nombre es todo un logro-dijo llevándose la mano con la que me había tocado a la boca, lamiéndose los dedos.
-¿Por qué lo hiciste?-dije
-Porque me hiciste perder mi cita además lo has disfrutado tal vez quieras reconsiderar si eres heterosexual.
-¡Te odio maldita cabrona!
-¿Qué harás demandarme? ¿Irte del apartamento? ¿a caso seguirás diciendo palabrotas?, no lo harás porque te ha gustado lo que paso.
-Solo lárgate-dije.
Esa maldita había destrozado una parte de mi en un momento, y tenia razón me sentía tan avergonzada que no podría contarle a nadie de ello, ni siquiera a Mai, mucho menos irme del apartamento pues con ello solo comprobaría que no estaba lista, tenía que adaptarme y pronto, y esa cabrona de Fujino me la iba a pagar muy caro, aun no sabia como pero me vengaría.
Y lo peor era que apenas había comenzado la escuela, era el inicio de una pesadilla.
Continuará…
