Disclaimer: Nada mencionado de series conocidas es mío, pertenece a sus respectivos creadores. Yo sólo desvarío.
NOTA: Fic que se hace como un reto, basado en la última frase de diálogo que se menciona en el texto, citado de 'The Sandman';
LEAN: NO TE PERDONO, el fic de Zusaku Kaze para este reto ^^.
Perpetuo
El ruido de sus botas hizo eco en la gran y vacía catedral. Escuchó cada uno de sus pasos acercarse sin inmutarse, justo en la base del altar donde le esperaba; mirando fijamente el gran ventanal que se iluminaba majestuoso con la puesta del sol justo tras del vitral.
Los pasos se detuvieron a unos cuantos de distancia, pero podía sentir su inconfundible presencia inundar toda la catedral, todo a su alrededor. Torció los labios en media sonrisa. Tanto tiempo y seguía igual...
Cuando despertó en esta nueva vida, supo que era un Dragón de la Tierra, como lo había sido en la anterior, en la previa a esa y en muchas más; como lo fue desde que se creó su alma. Cuando despertó en esta nueva vida, todos los recuerdos de su larga existencia también regresaron. Sabía desde que inhaló el primer jalón de aire, que estaba condenado a repetir la historia, porque mientras no dejara de sentir, no podría romper el circulo vicioso en el que se encontraba desde -hacía ya- demasiado tiempo.
¡Y maldecido que era, todavía sentía...!
El momento en que los Dragones del Cielo (comandados por Él) y los Dragones de la Tierra (a los que él servía) se enfrentaran de nuevo por el destino del mundo que compartían estaba por llegar. Y como en cada vida, desde que su camino se vio frente a la encrucijada, Él venía a buscarlo para tratar de convencerlo de dejar la contienda, de olvidar el pasado, de regresar a su lado.
Pero ninguna de esas opciones eran siquiera considerables; a pesar de todo el tiempo transcurrido nada había cambiado. El pasado, nunca puede ser cambiado.
-Itachi - Susurró su nombre con melancolía y el escucharle llamarle, con esa voz masculina y única, le erizó la piel, pero no logró hacerle voltear la mirada, ni girar el rostro para enfrentarlo. El otro, suspiró. - ¿Es que acaso ya no me amas?
Ese maldito órgano en el centro de su pecho se apretujó con fuerza al escucharlo y la sangre le hirvió en las venas por las desconsideradas palabras y su oculta petición en ellas. Se tomó un par de segundos antes de girar y enfrentarlo, con el mismo porte frío con el que se revistió aquella vez, cuando todo comenzó, cuando lo dejó solo a pesar de haberle jurado estar a su lado siempre. Ambos habían arriesgado mucho al renegar de su condición de Dragones; pero Él lo dejó de lado, renunció a ellos por seguir con el egoísta dictado de su humanitario corazón.
-Han pasado mil años Minato, SI todavía te amo -replicó con los ojos ardiendo en fuego negro- pero todavía no te he perdonado.
Los ojos de Minato se cubrieron con resignado dolor. Una vida más en la que tendrían que pelear. Una vida más, en la que aquel no le perdonaba el haber elegido pelear por la vida de tantos inocentes y no sólo por él...
Asintió una vez ,luego de mirarle con inalcanzable añoranza, e Itachi volvió a darle la espalda.
Escuchó sus pasos alejarse entre el eco de la catedral. Ahora, no había más que silencio y oscuridad en su lugar.
fin
Los Dragones del Cielo / Tierra, son del manga-anime X/1999
