Discleimer: Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Stephanie Meyer pero la historia si y queda completamente prohibida su distribución o reproducción total o parcial sin mi permiso y/o consentimiento.

Prologo

-¿Acaso no lo entiendes?-estaba un poco molesto pero la verdad no, no lo entendía.

-Contéstame Isabella¡-gritó, en situaciones asi era cuando prefería no salir de mi mundo y simplemente aislarme como siempre.

-Tú no puedes, no debes…-era cierto lo mejor era terminarlo todo o ambos saldríamos lastimados…yo más que el.

-¿Quién demonios lo dice? ¡-ahora su expresión era de dolor… ¿Qué demonios le pasaba a este hombre?

-Tu…estas casado…-era la verdad y aunque me costaba admitirlo era aun peor enfrentarlo.

-….-Ahora se quedaba callado genial y todos lo que estaban cerca de nosotros nos miraban con ojos curiosos…Malditas las personas que no se pueden meter en sus propios asuntos. Lo que más odiaba en el mundo…ser el maldito centro de atención.

Ya había pasado más de cinco minutos y no obtenía ni siquiera un sonido de sus labios… Aquellos que me habían hecho quedar siempre en vela cuando aun no los había probado y aquellos que me hacían soñar una vez que se unieron a los míos.

-Súbete… o llegaras tarde al trabajo…- eso fue lo último que dijo en todo el camino y he de agregar que mi trabajo no quedaba nada cerca del instituto que era donde nos encontrábamos. Como robot acate su orden y subí con un nudo en la garganta…. ¿Qué quería decir ese silencio?

Cuando al fin llegamos a la entrada de la oficina en la cual estaba trabajando, me baje de la moto y me quite el casco.

-Vendré a tu hora de almuerzo.-lo dijo de lo más tajante.

-¿para qué?... ¿para que este maldito silencio sea lo único que exista entre tú y yo?-estaba de verdad molesta… era cierto que tal vez eran solo rumores. Y la verdad por mis ojos no habían pasado las imágenes que me habían descrito pero simplemente necesitaba escucharlo de sus labios.

-Lo quieras o no entrare aquí y mas te vale que salgas o entrare por ti-era una amenaza y por un momento sentí sus celos emergiendo nuevamente… Por Dios este hombre me podía enloquecer en cuestión de segundos aunque me estuviera muriendo del enojo muy en lo hondo.

-Buena suerte con la garita de seguridad-contraataque.

-No me tientes Bella, solo tú sabes de lo que soy capaz de hacer…-de acuerdo había perdido.

-¿A qué hora estarás aquí?-pregunte con la cabeza gacha.

-A la una-era definitivo esto no estaba bien.

-De acuerdo-medio sonreí pero esa minúscula chispa de alegría no llegaba a mis ojos aunque lo deseara con toda el alma. Me di la vuelta ya dispuesta a entrar.

-Una cosa más….-dijo a mis espaldas y me voltee. Estaba como hipnotizada y más cuando caí en la cuenta de que se bajaba de la motocicleta y con su andar tan sexy se aproximaba hacia mí.

-¿ahora qué quieres?-intente sonar tajante.

-Esto¡-Bruscamente como lo recordaba desde el primer beso tomo la parte de atrás de mi cuello y lo atrajo a su cuerpo, sabía que aunque me resistiera ante el siempre terminaba cediendo. Pero aun asi me gustaba provocarlo.

Cuando sus labios estaban a escasos milímetros de los míos sentía como la electricidad volvía a mi cuerpo y mi corazón se aceleraba dentro de mí como una bomba de tiempo que en cualquier momento estallaría y con eso vendría uno de los mejores placeres del mundo….Entregarme en ese beso era lo mejor y lo más inteligente que podía hacer ya que cuando lo viera alejarse mi corazón se oprimiría y lo extrañaría mucho. Logre separarme de él… tal vez para él la necesidad de aire no era vital pero para mí sí y algunas veces el lo olvidaba pero aun asi me daba lo que siempre esperaba…. Su corazón.

-No estoy casado Bella… y hoy sabrás la verdad, de una vez y para siempre.-exclamo y en un pestañeo ya estaba subido en la moto. Sonreí como tonta.

-Una cosa más linda….-dijo y abrió mis ojos como platos para que entendiera que le ponía la mayor atención.

-No me hagas hacer una locura… Que nadie se te acerque, en especial Aro, Félix y Alec, ¿de acuerdo?-cuando dijo lo ultimo guiño un ojo y juro que tuve un orgasmo… (Bella que cosas dices ni siquiera has pasado de besos con Edward y ya…. No mejor ahí lo dejamos).

-Como tu digas ¡-conteste con una sonrisa.

-Siempre como yo lo diga-exclamo y encendió la moto, acelero un poco y desapareció de mi vista.

Entre a la oficina con los ojos más que felices y mi alma hecha una esponja de felicidad que podía absorber cualquiera que estuviera en el mismo estado de ánimo que yo.

Llegue a mi escritorio y lo ordene todo, unos cuantos papeles cayeron al suelo. Me agache para recogerlos y de nuevo la nota:

"No confíes en él, no es quien dice ser, puede que tenga familia, te lo advierto aléjate de él si quieres vivir."

¿Vivir?...hace tan solo unas semanas deseaba desaparecer del mundo y ahora me decían que podía morir. Cuando al fin había encontrado la felicidad estaba destinada a morir…

Bueno nueva historia espero les guste, espero rr para saber si continuo o mejor ahí la dejo… bueno un anuncio NOCHE DE LUNA LLENA aun continua la verdad les pido un poco de tiempo ya que empecé con un nuevo trabajo y esta absorbiendo mis energías y mi tiempo pero no se me impacienten sé que tengo mucho tiempo de ya no escribir pero les prometo que pronto actualizare de momento les dejo esto espero les guste bueno me despido

Vicky