Disclaimer: los personajes no me pertenecen… son creados por stephanie meyer

CSAPITULO 1

BELLA POV

Estaba terminando de arreglarme para mi presentación, mi traje consistía en un corpiño negro de encaje, que dejaba caer un velo alrededor de mi abdomen y unas bragas que hacían juego. Estaba ansiosa era mi segunda semana en este trabajo y realmente me iba bien, todos los que veían mi baile me daban una buena recompensa.

"aquí viene nuestra mas reciente adquisición, isabella swan", escuche como me llamaban y no me hice esperar, Salí meneando mis caderas coquetamente mientras todos se quedaban mirándome, me acerque al tubo y empecé a deslizarme por el al ritmo de la música. No podía quejarme, ganaba lo suficiente en una noche como para mantenerme un mes sin hacer absolutamente nada.

Cuando baje del escenario empecé a quitarme los billetes de las bragas y me dirigí a cambiarme para salir a atender a los clientes pero cuando iba caminando mi jefe me detuvo.

- Hola bella – me saludo con esa sonrisa suya llena de buenas noticias

- Hola jake, ¿Por qué tan alegre?- definitivamente se traía algo entre manos.

Jacob Black, el dueño del burdel y encargado de todo lo que aquí pasaba; gracias a él ahora podía pagar mis estudios de literatura en la universidad y darme los lujos que siempre quise.

- Necesito verte cambiada dentro de cinco minutos en mi oficina, tengo un cliente esperándote con una excelente propuesta y sé que te encantara - aseguro como si me conociera de toda la vida – te espero – me dio una nalgada y se fue con esa sonrisa pintada en la cara.

Una vez estuve lista me dirigí a la oficina de jacke, toque la puerta y entre.

- Ya estoy aquí jacke – justo frente a el había un joven de cabello cobrizo que estaba mirándome fijamente – hola, mucho gusto mi nombre es isabella swan, pero llámame bella – me presente, si ese era el cliente tenía que ser cortes desde el principio.

- El gusto es todo mío – dijo el joven – mi nombre es Edward masen – lo examine rápidamente con la mirada, tenía unos ojos verdes hermosos, su cuerpo no era una escultura pero debajo de su camisa podían verse sus bien formados músculos, Jacob me llamo así que tuve que mirarle.

- Bueno, vamos al grano. Bella, Edward vino a proponerme un negocio muy… como decirlo, poco común – estaba nerviosa y no sé porque – tendrás que irte con Edward 2 semanas y complacerlo en todo lo que a él le pegue en gana, se que saliste de vacaciones bells y no tendrás inconveniente alguno en quedarte todo este tiempo en el apartamento de Edward y por otra parte Edward no trabajara durante este lapso de tiempo así que depende de lo que tu digas muñeca – me quede pasmada mirando a Jacob ¿de veras piensa que yo puedo soportar tanto? – Edward te pagara 1.000 dólares.

- de acuerdo, por mi no hay problema – para que negarme, era mi empleo y no podía hacer nada más.

- te espero mañana al medio día en mi departamento – definitivamente Edward tenía la voz más maravillosa que había escuchado en mi vida. Se acerco a mí y me susurro al oído para que solo yo le escuchara – no lleves mucha ropa, no creo que la vayas a utilizar – y dicho esto salió de la habitación.