No soy dueña ni de los personajes ni de la trama (OJALA LO FUERA). Los personajes son de JK Rowling y la trama pertenece a Jamie McGuire (NADA ES MIO YO SOLO LO ADAPTO PARA MI DIVERSIÓN Y LA DE USTEDES)
Rated M: Contiene escenas de violencia, lenguaje grosero, y contenido adulto…
Harry
—Deja de ser un marica —dijo Draco, golpeándome en el brazo.
Fruncí el ceño y eché un vistazo alrededor para ver quién escuchó. La mayoría de mis compañeros de primer año estaban al alcance del oído, pasándonos con dirección a la cafetería de la Universidad Estatal del Este para orientación. Reconocí varios rostros de la secundaria, pero habían incluso más que no reconocí, como por ejemplo el de las dos chicas que iban caminando juntas: una vistiendo un chaleco de punto y una trenza castaña, la otra con cabello Negro ondulado y pantalones cortos. Echó un vistazo en mi dirección por medio segundo y luego continuó, como si fuera un objeto inerte.
Draco levantó sus manos, una gruesa pulsera de cuero en su muñeca izquierda. Quería arrancársela y golpearlo con ella.
—¡Lo lamento, Harry Potter! —gritó mi nombre mientras miraba a nuestro alrededor, pareciendo más como un robot o un muy mal actor. Inclinándose a mí, susurró: — Olvide que ya no tengo que llamarte así… al menos, no aquí en el campus.
—O en cualquier parte, imbécil. ¿Por qué siquiera viniste si vas a actuar como un idiota? —pregunté.
Con sus nudillos, Draco le dio un golpecito al borde inferior del ala de mi gorra de béisbol, casi botándola antes de agarrarla.
—Recuerdo la orientación de mi primer año. No puedo creer que ya pasó un año. Es tan raro, joder. —Sacando un encendedor de su bolsillo, prendió un cigarrillo y soltó una nube de humo gris.
Un par de chicas merodeando cerca suspiraron de amor, e intenté no vomitar.
—Joder, eres tan raro. Gracias por mostrarme el camino. Ahora vete de aquí.
—Hola, Draco —saludó una chica desde el otro lado de la acera.
Draco la miró, asintiendo, y luego me dio un fuerte codazo.
—Nos vemos, primo. Mientras tú escuchas mierda aburrida, yo voy a estar profundamente enterrado en esa morena.
Draco saludó a la chica, quien sea que fuera. La había visto en algunos sótanos de algunos campus el año pasado cuando fui con Draco a sus peleas en El Círculo, pero desconocía su nombre. Pude verla interactuar con Draco y supe todo lo necesario. Ya se encontraba dominada.
El total semanal de Draco Malfoy disminuyó un poco desde su primer año, pero no por mucho. Nunca lo confesó, pero podía darme cuenta que se sentía aburrido por la escasez de desafíos de parte del sexo opuesto. Esperaba conocer a alguna chica que Draco no hubiese recostado en nuestro sofá.
Las pesadas puertas necesitaron más que un simple tirón, y luego entré, sintiendo un alivio instantáneo por el aire acondicionado. Mesas rectangulares estaban juntan, desde un lado al otro, creando cinco hileras separadas estratégicamente en áreas para ir y venir, y para acceder a la línea de comida y al mostrador de ensaladas. Una solitaria mesa redonda se encontraba en una esquina, y allí se hallaba la pelinegra con su amiga y un extravagante tipo con pelo parado en las puntas, que parecía haberse estrellado en una pared en el nacimiento de su pelo.
Seamus Finnigan estaba sentado al final de las hileras de las mesas, bastante cerca de la mesa redonda, por lo que esperé a que él me viera. Una vez que miró en mi dirección, me hizo un gesto con la mano justo como esperé, y me le uní, sintiéndome muy avivado por el hecho de estar a menos de tres metros de la chica. No miré hacia atrás. Draco era un arrogante hijo de puta la mayoría del tiempo, pero estar a su alrededor significaba conseguir lecciones gratis sobre cómo conseguir la atención de una chica.
Lección número uno: Persigue, pero no corras.
Seamus saludó a la gente de la mesa redonda.
Le hice un gesto.
— ¿Los conoces?
Sacudió su cabeza. —Solo a Neville Longbottom. Lo conocí ayer cuando me mudé a la residencia. Es graciosísimo.
— ¿Y a las chicas?
—No, pero son sexys. Ambas.
—Necesito presentarme con la del pelo negro.
—Neville parece ser amigo de ella. Han estado hablando desde que se sentaron. Veré que puedo hacer.
Coloqué firmemente mi mano en su hombro, dando un vistazo hacia atrás. Ella encontró mi mirada, sonrió, y la alejó.
Mantén la calma, Harry. No lo arruines.
Esperar que algo tan extremadamente aburrido como orientación terminara fue incluso peor, debido a la anticipación de conocer a esa chica. De vez en cuando, podía escucharla reírse. Me prometí que no miraría, pero fallé varias veces. Era preciosa, con unos ojos verdes y largo cabello ondulado, como si acabase de estar en la playa y dejó que se secara al natural. Cuanto más me esforzaba por escuchar su voz, más ridículo me sentía, pero había algo en ella, incluso desde el primer vistazo, me tenía planeando formas para impresionarla o hacerla reír. Haría lo que sea para que me prestara atención, inclusive por cinco minutos.
Una vez que nos dieron nuestros paquetes, y el plano del campus, menús y reglas fueron explicados hasta el cansancio, el decano de estudiantes, el Sr. Johnson, nos permitió irnos.
—Espera a que salgamos —dije.
Seamus asintió.
—Tranquilo. Yo me encargo. Al igual que en los viejos tiempos.
—En los viejos tiempos perseguíamos a chicas de secundarias. Ella, sin duda, no es una chica de secundaria. Probablemente ni siquiera lo fue cuando asistía a la secundaria —dije, siguiendo a Seamus —. Es confiada. También parece experimentada.
—Nah, hermano. A mí me parece una buena chica.
—No hablaba de ese tipo de experiencia —gruñí.
Seamus soltó una carcajada.
—Cálmate. Ni siquiera la has conocido. Tienes que ser cauteloso. ¿Recuerdas a Anya? Terminaste todo involucrado con ella, y pensamos que ibas a morir.
—Hola, cabrón —dijo Travis desde debajo de un árbol con sombra, casi a noventa metros de distancia de la entrada. Soltó la última nube de humo y lo arrojó al suelo, pisándolo con su bota. Tenía la sonrisa satisfecha de un hombre luego de un orgasmo.
—¿Cómo? —dije, escéptico.
—Su residencia es la de allá —dijo, asintiendo hacia Morgan Hall.
—Seamus va a presentarme con una chica —dije—.Tan solo… quédate callado.
Draco enarcó una ceja y luego asintió.
—Por supuesto, cariño.
—Lo digo en serio —dije, observándolo. Metí mis manos en los bolsillos de mis vaqueros, e inhalé profundamente, observando a Seamus conversar con Neville.
La morena ya se había ido, pero gracias a Dios, su amiga parecía interesada en quedarse.
—Deja de moverte —dijo Draco—. Luces como si fueras a mearte en los pantalones.
—Cállate —siseé.
Seamus apuntó en mi dirección, y Neville y la pelinegra nos miraron a Draco y a mí.
—Mierda —dije, mirando a mi primo—. Háblame. Parecemos acosadores.
—Eres tan adorable —dijo Draco—. Será amor a primera vista.
—¿Están…están viniendo hacia acá?—pregunté. Mi corazón se sentía como si fuera arañar mi caja torácica, y sentí una repentina urgencia de golpear el trasero de Draco por ser tan poco serio.
Draco ojeó por su visión periférica.
—Sí.
—¿En serio? —dije, intentando contener mi sonrisa. Una hilera de sudor se escapó del nacimiento de mi cabello, y lo sequé con rapidez.
Draco sacudió su cabeza.
—Voy a golpearte en las pelotas. Ya estás enloqueciendo por esta chica, y ni siquiera la has conocido.
—Hola —saludó Seamus.
Giré y me di cuenta de la mano que me tendió para chocar las cinco y saludarnos.
—Él es Neville —informó Seamus—. Vive al lado de mi cuarto.
—Hola —saludó Neville, sacudiendo mi mano con una sonrisa coqueta.
—Me llamo Pansy —dijo la chica, tendiéndome su mano—. La orientación fue horrible. Menos mal somos de primer año una vez.
Era incluso más hermosa de cerca. Sus ojos brillaban, su cabello resplandecía bajo el sol, y sus largas piernas parecían el paraíso en aquellos pantalones cortos blancos y deshilachados. Era casi igual de alta que yo, incluso usando sandalias, y la forma de su boca cuando hablaba, con sus labios carnosos, era demasiado sexy.
Tomé su mano y la sacudí una vez.
— ¿Pansy?
Sonrió.
—Vale, anda. Haz un chiste pervertido. Los he escuchado todos.
— ¿Has escuchado el que dice: "Me gustaría follarte por la naturaleza*"? — preguntó Draco.
Le di un codazo, intentando mantener la seriedad.
Pansy notó mi gesto.
—De hecho, sí.
—Así que…¿aceptarás mi oferta?—bromeó Draco.
—No —respondió Pansy sin dudar.
Sí. Es perfecta.
—¿Y qué hay de mi primo? —preguntó Draco, empujándome tan fuerte que me tambaleé.
—Venga —dije, casi rogando—. Discúlpalo —le dije a Pansy—. No lo sacamos mucho a pasear.
—Ya veo por qué. ¿De verdad es tu primo?
—Trato de no contárselo a la gente, pero sí.
Le dio un vistazo a Draco, y luego regresó su atención a mí. —Entonces, ¿vas a decirme cómo te llamas?
—Harry. Potter —agregué por si acaso.
—¿Qué harás más tarde, Harry?
—¿Qué haré yo más tarde? —pregunté.
Draco me dio un empujoncito con su brazo.
Lo aparté de mí.
—¡No me jodas más!
Pansy soltó una risita.
—Sí, tú. Sin duda no le pediré una cita a tu primo.
—¿Por qué no? —preguntó Draco, simulando estar insultado.
—Porque no salgo con niños de dos años.
Seamus soltó una carcajada y Draco sonrió, sin imputarse. Se comportaba como un imbécil a propósito para hacerme lucir como un príncipe encantador. El perfecto compañero.
—¿Tienes auto? —preguntó.
—Sí —respondí.
—Recógeme frente a Morgan Hall a las seis.
—Sí… sí, eso haré. Nos vemos —dije.
Ya se encontraba despidiéndose con Neville y alejándose.
—Mierda —suspiré—. Creo que estoy enamorado.
Draco suspiró, y con una palmada, agarró mi nuca.
—Por supuesto que lo estás. Vámonos.
* La línea realmente dice: ¿Has escuchado el que dice: "Me gustaría follarte por la Libertad"? puesto que el nombre del personaje es América ya que en esta adaptación se está cambiando por Pansy y Pansy es el nombre de una flor lo cambie por naturaleza- lo sé, lo sé no tiene sentido alguno sin embargo iba a quitar toda la línea pero ese mal chiste de Draco/Travis fue el punto decisivo del enamoramiento de Harry/Shepley puesto que Pansy/América rechaza la oferta Draco/Travis.
Para los amantes de Hansy espero que disfruten esta adaptación. *La imagen la encontre en google*
Los capítulos están narrados uno Harry y uno Pansy.
Nuevamente: No soy dueña ni de los personajes ni de la trama (OJALA LO FUERA). Los personajes son de JK Rowling y la trama pertenece a Jamie McGuire (NADA ES MIO YO SOLO LO ADAPTO PARA MI DIVERSIÓN Y LA DE USTEDES)
Besos.
