Disclaimer ON
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0.o.0.o…O…o.0.o.0…Dulce…0.o.0.o…O…o.0.o.0
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En silencio aquel hogar, estaba descansando un arduo trabajo de liderar a un montón de psicópatas asesinos que le renegaban por todo. Arto de todo aquello se había dispuesto a descansar acostado en una de las camas de allí, inhalaba y exhalaba el oxigeno de manera calmada, observaba el techo como si fuese lo más importante que existiese. Cerró sus anillados ojos un momento y entonces cayó en cuenta que no estaba solo.
Estaba ella, sentada en algún otro lugar de la habitación, llevaba algo en la boca; un palito que se movía constantemente y ella tenía rostro de disfrutar de aquello. Llego a la conclusión que ella comía una paleta, pero le impresionaba ese hecho, a ella no le gustaban los dulces. O bueno…al menos eso creía él.
Ella, concentrada en su acción, saco la paleta de su boca y la lamió. Pein levantó una ceja extrañado por aquella acción. Konan volvió a meter la paleta a su boca provocando algunos ruiditos con dicha acción.
Era la segunda vez en su vida que la veía comer dulces. Curioso, se acercó a ella y le miró con su típica mirada imponente. Ella desvió su vista hacía él y con la mirada de una niña confundida le miró.
Como aquel cariño y amistad que no necesita palabras, ella sacó la paleta de su boca y se la ofreció. Se pensaría que era un asco comer la paleta ya lamida por otra persona, pero para ellos…hasta tomar del mismo vaso era normal, puesto que ambos compartían mucho más que simples cosas materiales.
Pein le miró indiferente pero por dentro le causaba amor aquella mirada de niña tierna en los ojos melancólicos de su bella Konan que podrían destruir hasta la más imponente orden. Apenas una visible sonrisa se logro percibir en los labios del hombre. La peliazulada insistió en que él probara de su paleta, haciéndole ver que ella comía de esa paleta por que era sumamente rica.
De nuevo, una pequeña sonrisa se asomo en el rostro de Pein, pero esta vez iba cargada de malicia. Hizo la paleta a un lado y sorprendió a la mujer chocando sus labios con los de ella en un beso. Puro y casto a la vista de los demás, pero para él tenía otro objetivo; probar la dichosa paleta.
Los labios de Konan estaban impregnados del sabor de aquella paleta y él parecía disfrutar de aquel suave sabor. Adentró su lengua a la cavidad de ella y pudo probar demás aquel sabor. Ella cerró sus ojos aún con la impresión de haber recibido ese repentino beso.
El beso culminó y Pein sonrió, ella comprendió que él quería otra cosa, que, exactamente no era paleta.
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0.o.0.o…O…o.0.o.0…¡Fin! …0.o.0.o…O…o.0.o.0
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¡Hola! Después de tanto tiempo, he aquí otra locura mía que nació mientras que de regreso a casa comía una paleta…pensaba en tantas cosas que al final, cuando (gracias a Dios, yo no sabía por donde caminaba) llegue a casa, me senté en la computadora y me puse a escribir. De aquel arranque de dedos nació esto.
¿Merezco un review…?
