Discordia entre hermanos, final alternativo capítulos 16-17

Ruta elliot.

Llegue a mi destino, el día en que conocí a los hermanos nightray, me veo en frente de vincent Gilbert, siento la ira que tenía aquel día, más adelante me encuentro con elliot y de nuevo mis sentimientos me atacan, luego me veo en esa semana que pase con ellos, las tardes conversando con elliot sobre música, tocando guitarra, esas sonrisas que me brindaban, como me hacia reír y me reñía a mismo tiempo, lo infantil que se veía a veces, me siento extasiada, en esos momentos con el solo hay felicidad, pero luego llego al momento en el que Gilbert me hizo sonrojar por primera vez, cuando entra a mi cuarto y me pregunta por elliot, cuando le veo de manera atrevida y ese sentimiento de calor regresa a mi nuevamente, es ahí cuando empiezo a creer que lo que siento por elliot es amor y lo que siento por Gilbert el simple deseo, llego hasta donde elliot me trata mal por meterme en la pelea, luego cuando me voy y el intenta detenerme, me convenzo más de que elliot es al que amo, pero llego a la escena con vincent ensangrentado, y me siento tan confundida cuando veo que el único que me consuela es Gilbert, cuando ese sentimiento de protección regresa a mí, me confundo de nuevo, después llega la declaración de elliot frente al piano, y así avanza hasta la noche en el bar con Gilbert, vuelvo a creer que es deseo, por lo que paso aquel día, sus besos vuelven a estremecerme, y mientras todo avanza, la muerte de abyss, el como el me abrazo en ese momento en que perdí mi mundo, cuando me dio su gabardina, en lo feliz que me sentí de tenerla puesta por que me daba protección, y luego recuerdo mis sentimientos al oír que elliot había sido herido, y llego a una conclusión.

-¿estás bien?- pregunta leo mientras me sostiene contra su pecho.

-si…eso creo- dije tratando de ponerme en pié.

-¿segura? ¿Cómo te fue?- preguntó

-bien, ya se lo que en verdad siento.- le dije

- y… ¿Quién es?- pregunto, le sonreí y le di un beso en la mejilla, leo se puso rojo.

-pronto lo sabrás, gracias leo, por todo, por dejarme vivir aquí, por hacer feliz a Abyss, por estar a mi lado, y por esto, de verdad gracias- el me miro extrañado y aun sonrojado.

-de…de nada, somos familia y amigos, no te preocupes- dijo y me ayudo a poner de pié.

-eres el mejor- le dije y pálido chico de 16 se puso del color de la sangre.

Ala mañana siguiente le marque a Sharon.

-¿Qué pasa? ¿Cómo te fue ayer? ¿elliot está bien?- ella era bastante ansiosa.

-si está bien, gracias a Dios, Sharon necesito un favor.

-¿Qué necesitas?-pregunto ahora no ansiosa sino curiosa.

-que me pongas… ¿cómo se dice?... Ah sí, bonita- le dije esta soltó un grito.

-para…para… ¿para qué?- dijo recuperando el aliento.

-me voy a declarar al chico que me gusta- le dije con tranquilidad, aunque la verdad no me sentía así.

-¡¿Qué?!-grito.

-sí, me he decido por uno de los hermanos- le conteste.

-¿Quién es el afortunado?- dijo con alegría, estaba segura de que ella estaba dando brinquitos de felicidad.

-ya lo veras- dije- por ahora ponme guapa, no como tu…ya sabes tan "pastelito", sino a mi estilo, ya sabes.

-vale-dijo con duda- pero… ¿Cómo vas a rechazar al otro?

-ellos prometieron no odiarme, me encontrare con ellos en el hospital por que elliot sigue hospitalizado, allí seré sincera con ambos.

-vale- dijo-te veo dentro de una hora te pondré más hermosa que megan fox* ya verás- colgó.

Está exagerando, en fin, llame a Gilbert.

-hola, ¿Alice?-dijo el con pereza.

-te acabas de levantar ¿verdad?- dije con diversión, son las nueve es inusual que él duerma más de las ocho supongo que fue por todo el estrés de ayer.

- emmm… si, ¿Cómo estás?- cambio de tema.

-bien- contesté- Gilbert sobre lo que hablamos anoche, creo que ya sé cómo contestarles adecuadamente a los dos.

-¿a qué te refieres?- pregunto confundido.

-al fin he aclarado mis sentimientos, me gustaría hacérselos saber, como se debe, ya sabes, no quiero que ninguno de me odie así que seré sincera con los dos.- le conteste.

-no te odiaremos, ya te lo dije, me parece lo mejor a mí también, es lo justo, ¿nos vemos en el hospital?- dijo.

-sí, estaré allí a eso de las dos de la tarde, ¿vale?, espérame en el cuarto de elliot.- ordene.

-si…si quieres- contesto.

-nos vemos allí.

Después de eso me arregle y me fui a mi encuentro con Sharon.

-no me lo creo aun- dijo en cuanto me vio.

-ya se, ya sé, pero ayer pasaron muchas cosas, y me decidí que no les seguiría haciendo daño a los dos ni a mí misma- le dije con una sonrisa.

-y bueno, ya dime ¿Quién es el elegido?- me tomo de la manos suplicando por una respuesta.

-Sharon, no te lo diré, no hasta que ellos lo sepan- ella me soltó e hizo uno de sus típicos pucheros.

-eso no es de amigas- espeto.

-solo ayúdame a verme…presentable- decidí que si me iba a declarar formalmente al menos debía lucir bien y mis converse gastadas, mis jeans rotos y mi camiseta de Guns N' Roses, no me iban hacer ver atractiva.

-te pondré preciosa, a tu estilo pero hermosa, más que Megan fox*-dijo con orgullo jactándose de su don para la moda.

-de nuevo con Megan fox, no exageres- reí y ella me sonrío, ¿Qué haría yo sin Sharon?

-vale, vamos- después de casi dos horas en las tiendas rockeras* y victorianas* del centro comercial de la ciudad, Sharon al fin consiguió ponerme elegante, es más hasta yo me sorprendí con el cambio, en una de las tiendas victorianas encontró un vestido con volados simples y un corset un poco provocador pero no demasiado, de color negro con algunos detalles azules, el vestido llegaba casi hasta la rodilla y unas mallas negras con unos botines de tacon bajo con detalles azules a juego con los del vestido, Sharon arreglo mi cabello en una colecta de lado con sutiles rizos, me veía como una muñeca, me quede un momento frente al espejo tratando de aceptar que esa que estaba allí era yo hasta que mi móvil sonó, maldición es hora debo ir con ellos.

-Alice-era elliot- Gilbert me lo comento… ¿estas segura?, si te soy sincero me siento un poco nervioso- su voz se oía un poco temblorosa, ¿será por decir que estaba nervioso?

-voy…en camino… yo también me siento rara… ¿sabes?... nunca creí que esto terminaría así-le dije este rió.

-Ni yo, la verdad jamás creí que la chica "Halloween" se robaría mi corazón-dijo riendo, eso me puso un poco furiosa.

-¿Por qué no soy como las otras "barbies"?- le espete

-No, porque sencillamente no creí que esa imagen de príncipe idiota que tenía, me permitiría conocer chicas como tú, inteligentes, talentosas, porque cantas hermoso, y también chicas con gustos estupendos y sobre todo no creí encontrar alguien tan especial y única- dijo, me puse roja al instante, mi respiración se paró un segundo mientras me despedía de Sharon e iba camino al hospital de pandora, ya sé dónde quedaba, más arriba de Latowiged high.

-no… digas eso, idiota, nos vemos halla- con mis mejillas quemando, colgué y estaba a punto de llegar a mi destino.

Llegue hasta la entrada de la habitación de elliot, me prepare mentalmente para lo que iba hacer, abrí la puerta elliot y Gilbert estaban conversando, cuando me vieron en la puerta ambos abrieron sus ojos como plato y al instante se pusieron más rojo que un tomate, supongo fue por mi cambio de look, pero lo ignore, les salude y estos me devolvieron el saludo.

-Alice, estas…- elliot me miraba y trago saliva para terminar la frase- estas hermosa- dijo con su cara totalmente roja.

-gracias- dije con un mis mejillas quemando.

-elliot tiene razón te ves preciosa- dijo Gilbert- se puede saber el motivo, coneja

-es… que…tenía que estar a su altura hoy- ellos se miraron y luego a mí.

-a… ¿a nuestra altura?- preguntaron al unísono.

-sí, es que ustedes siempre son muy elegantes y… se visten muy… se ven…- empecé a tartamudear pero recobre el control de mí, con las mejillas rojas tome aire y al fin se los dije- ustedes siempre se ven muy guapos, quería que…me vieran guapa…un día.

-Alice tu…-comenzó elliot pero fue interrumpido.

-Jajaja- rio Gilbert- coneja estúpida, tu no lo has entendido ¿verdad? Para nosotros tú siempre estas hermosa.

-eso es cierto, Alice no necesitas cambiar, aunque te ves muy, muy hermosa- dijo elliot y me invito a sentarme en la cama al lado de Gilbert.

-idiotas- susurre con las mejillas quemándome.

-y bueno, ¿Qué era lo que tenías que decirnos?- elliot fue directo al punto, Gilbert solo miraba mi vestido como si deseara quitármelo.

-ayer hice algo muy malo, me sentí horrible- dije con sinceridad- desde hace tiempo, desde que ambos me dijeron sus sentimientos…yo he estado jugando con ambos, por así decirlo, fui incapaz de descifrar mis sentimientos y fui una cobarde al creer que podría seguir con ambos por siempre- estaba al borde las lágrimas cuando sentí que ambos me tomaban de las manos.

-no tienes por qué decir eso, fuimos nosotros quienes te confundimos, está bien sentimos celos, nos sentimos heridos, pero era nuestra culpa por comenzar esto, tú no te acercaste a nosotros con esa intención, eso lo sabemos- dijo elliot

-es cierto, ya te lo he dicho coneja, no te odiaremos, en lo personal yo te debo algo-comento Gilbert.

-lo lamento, yo no deseaba hacerles daño, ayer me di cuenta de que esto no podía seguir así les estaba haciendo daño y me lo estaba haciendo a mí misma, es por eso que al fin tuve el valor de organizar mis sentimientos- con la ayuda de leo y oz- al principio me fue muy difícil saber que sentía hacia cada uno, esta es la primera vez que me enamoro, pero ahora estoy segura de a quien realmente amo.

-bueno, eso me alegra- dijo Gilbert.

-y… ¿Quién es?- ambos soltaron mi mano y me miraron serios.

-antes de eso, elliot gracias por todo, por las tardes con la guitarra, me divertí muchísimo jamás creí conocerte de esa manera, para mí siempre fuiste el príncipe engreído que todos idolatraban.- dijo con una sonrisa, elliot rio.

-qué lindo- dijo divertido- al menos ya no me dices "princeso"

-jajaja, solo quería molestarte ates, lo siento- le dije.

-Gilbert, eres de lo peor, me pones apodos raros y me molestas, pero estuviste ahí para mí, fue divertido llamarte "cabeza de algas"- este me miro con esa sonrisa juguetona que tanto lo caracterizaba

-maldita coneja- dijo entre risas- no me digas así ¿Qué parte de mi cabeza parece un alga?

-toda- contesto elliot divertido.

-tú no te metas, mocoso- respondió fingiendo estar molesto.

-jajajajaja- reí- amo verlos pelear de manera tan infantil, ustedes sí que se quieren- se pusieron rojos y desviaron la mirada.

-en fin, gracias por todo, a ambos, con todo eso que pase con ustedes llegue a una conclusión, la persona de la que estoy enamorada es…-me puse roja mire a ambos y ellos me miraban curiosos, demonios no creí que declarármele a alguien sería tan vergonzoso, tome aire y trate de relajarme.

-después de todo lo que paso con Abyss, ambos estuvieron ahí para mí y se los agradezco, pero me di cuenta de que sentía realmente por cada uno, hubo una persona que con la que jamás me imagine algún día, es un caballero y la manera en la que se mostró ante mí, como nunca antes lo había hecho con nadie, el hecho que me dejara ver quien era en verdad y que compartiera conmigo su verdadero yo me hizo sentir muy feliz- lo mire y el ladeo su cabeza como si estuviese confundido, baje mi mirada porque no quería perderme en esos preciosos ojos y terminar en otro mundo, mis mejillas quemaban, me sentía como una niña ¿Cuántas chicas se le habrán declarado ya?, muchas imagino, espero que esta confesión no se le haga idiota o infantil, porque si se burla me muero- esa persona eres tu Elliot- dije con las mejillas tan rojas como la sangre sin mirarlo me decidí a confesarme debidamente.

-Elliot…tu…tu…me gustas- el silencio que vino después de mis palabras me aterro, acaso estuvo mal decírselo o ¿Qué?, levante la mirada y lo vi rojo como un tomate.

-¿estuvo mal?- pregunte temblorosa, él se puso más rojo y empezó a balbucear cosas.

-No…es…es…solo… que es la primera vez que alguien se me confianza de ese modo- dijo y bajo la mirada un instante me miro y después pronuncio- Tu…también…me gustas.

-¿quieren que les deje solos?- pregunto Gilbert desviando su mirada hacia la ventana, sentí que le había vuelto a lastimar.

-Gilbert…yo…lo lamento es no era mi…-trate de hablarle pero se levantó y tomo su chaqueta y me interrumpió.

-No te disculpes, coneja, yo ya lo sabía realmente-dijo con una media sonrisa- pero quería oírlo de tus labios.

-hermano-susurro Elliot.

-No te preocupes, entiendo, ayer lo entendí muy bien, cuando me dijiste que ibas al baño, realmente viniste aquí ¿verdad, Alice?, no me siento mal, cuando te dije que me alegra de que elliot hubiera encontrado alguien que lo hiciera feliz, lo, dije enserio, me alegra que ambos sean felices ese es mi deseo, pero Elliot ni te atrevas a hacerla llorar por que si lo haces no solo enfrentaras a B-Rabbit si no que tendrás que vértelas con Raven y esa cadenita tuya no servirá de mucho- dijo con esa sonrisa juguetona y le revolvió el cabello a elliot, este se puso rojo.

-¡No lo hare!, además creo que prefiero que el conejo me corte en dos antes de tener que enfrentar las pesadillas que provoca Raven- dijo en un puchero.

-jajajaja- rio Gilbert y volvió a revolverle el cabello de un manotazo y con una manera muy infantil de protestar elliot le quito la mano de su cabeza.

- y ahí están de nuevo ustedes sí que tienen una forma extraña de demostrarse cuanto se quieren- dije con timidez, ellos rieron.

-Bueno me voy, tengo clase y un parcial y no he estudiado nada, así que te dejo en las manos de Alice, te traeré tus videojuegos luego no saldrás de aquí jovencito hasta el próximo sábado-después de eso Gilbert abrió la puerta y me miro como diciendo "cuídalo mucho", le sonreí y me puse roja otra vez.

-que no se te olvide traerme Silent hill* y God of war*, moriré de aburrimiento aquí- dijo elliot

-con Alice lo dudo- Gilbert esbozo una sonrisa de complicidad hacia elliot y este se puso rojo- nos vemos- y salió.

Sentí que me jalaban y cuando me di cuenta elliot se había sentado en la cama y me había traído hacia él, me abrazo por la cintura y yo me puse roja, luego me acaricio suavemente la espalda y un choque eléctrico recorrió mi cuerpo.

-¿Qué haces?-pregunte roja.

- ayer me prometiste que repetirías el beso cuando estuviera mejor, bueno ya lo estoy- dijo y me jalo hasta hacerme sentar sobre su regazo me sentí nerviosa, pero igual quería besarlo así que no me molesto, cruce mis brazos alrededor de su cuello y me acerque a su rostro, el esbozo una sonrisa y después de eso nuestros labios se juntaron, los besos con elliot era diferentes a lo de Gilbert, los de Gilbert eran acalorados, demandantes y profundos, pero con Elliot eran más tiernos y también apasionados, tuvimos que separarnos por falta de aire.

-que lastima que estés tan guapa y yo no pueda aprovecharlo para tener la primera cita contigo- dijo con tristeza.

-No puedes lucirme como lo hacías con Alison-espete

-no quiero lucirte, quiero tener una cita contigo, salir a comer o a ver una película, te encanta el cine ¿verdad?, desde que me di cuenta de lo que sentía quise hacerlo, también me gustaría ir a un concierto contigo esas cosas jamás las pude hacer con Alison, con ella no eran citas, no era nada especial, solo salir y llevarla de compras eso era todo- me miro suplicante

-yo también quiero salir contigo elliot, pero ahora importa es tu salud, por favor tendremos tiempo para eso- dije tratando de animarlo.

-si tienes razón- dijo con una sonrisa- además vendrás al baile conmigo ¿verdad?

-pero Alison se va a poner furiosa y me hará aún más la vida imposible- le dije.

-No me importa que diga Alison, si se atreve hacerte algo se las verá conmigo, no dejare que te hagan daño eso jamás- dijo con seriedad.

-vale, entonces si iré- dije y su rostro se relajó y me volvió a besar.

Dos semanas después…

-hola- dijo elliot abrazándome por la espalda-¿Cómo estas, Halloween?

-elliot estamos en público y ya deja de llamarme "HALLOWEEN"- trate de zafarme.

-no me importa que estemos en público además solo están Sharon y Ada-dijo mirándolas con complicidad

-eso es cierto Alice, debes lucir a tu novio- dijo Sharon y Ada rió.

-Idiotas-les espete.

-Alice, ¿a qué horas te recojo?- pregunto elliot al fin soltándome.

-A las ocho.- le dije.

-¿estas segura de que Leo no me lanzara el Jabberwocky?- pregunto en broma, el y Leo se habían vuelto muy buenos amigos, que irónico.

-no seas tonto, te espero a las ocho.- dije con una sonrisa bobalicona.

Esa noche elliot y yo tuvimos nuestra tercera cita, el día que salió del hospital tuvimos una, hace dos días fuimos a comer y hoy iríamos al cine, aunque era plena semana, elliot se aburría por que por su accidente aun no podía jugar futbol y Gilbert y vincent salieron de intercambio por un mes de su universidad, así que estaba solo.

-la película estaba genial, la mejor peli de zombies de los últimos años- dijo mientras conducía, hacia su casa.

-si estaba buena, me gustó mucho los actores, megan fox es la mejor- dije.

-cierto- dijo y llegamos a su casa- ¿quieres comer?

-¿pedirás algo?-pregunte

-no, cocinare, lo he hecho esta semana y no es aburrido- dijo mientras subíamos al ascensor.

-¿cocinaste?- pregunte divertida.

-ya te había dicho que si sabía cocinar, tonta, ven, porque no hacemos algo los dos- dijo

-por mi estaría genial- le respondí.

Terminamos haciendo una pizza italiana, deliciosa, pasaron las 12 y era hora de ir a casa.

-Adiós- dije

-¿ya te vas?- me tomo el brazo y no me quiso dejar ir.

-es tarde elliot- le dije y me abrazo.

-entiendo…pero crees que Leo te regañe si te quedas aquí hoy, esta casa está muy vacía estoy comenzando a creer en fantasma- dijo suplicante.

-que tonto eres elliot- me planto un pequeño beso- está bien…solo si tienes miedo- dije en tono de broma.

-no tengo miedo tonta-me acerco y me beso más, me sentó en el sofá. El beso se profundizo, entendí sus intenciones, pero no lo detuve, no estaba del todo segura de eso, pero Abyss había dicho que era normal estar con la persona que amaras, al final, sus besos llegaron hasta mi cuello, no sé a qué horas la ropa estorbo, simplemente paso, la cordura abandono mi mente y nos dejamos llevar, fue una noche mágica.

A la mañana siguiente…

Sentí que alguien acariciaba mis cabellos, suavemente y de pronto sentí un cálido beso.

-vas a seguir durmiendo.- pregunto cerca mi oído, con voz suave y seductora.

Me revuelvo incomoda y me acurruco más.

-oye despierta, tenemos clase hoy, recuerdas- insistió y esta vez mordió me oreja.

-oye eso duele- grite y di un salto cuando me volví para míralo, me puse roja como un tomate, elliot sin camisa o mejor dicho desnudo! Solo la sabana tapaba un poco, me di cuenta como estaba yo poco después mientras recordaba lo que había pasado, me cubrí de inmediato y el rio y me abrazo.

-¡estás loco!- intente zafarme-esto está mal, no me mires,-elliot había quitado la sabana ágilmente sin que me diera cuenta y me tenía apresada entre sus brazos completamente desnuda.

-pero si te ves hermosa, Alice- dijo y empozo a acariciarme de nuevo, no me resistí y le seguí el juego, de alguna manera era maravilloso estar así con él.

-debemos ir a clase- intente pararlo.

-emmm No vayamos- dijo infantilmente.

-Idiota, tenemos examen de física, ven hay que arreglarnos, llévame a casa por ropa, aún tenemos dos horas- me levante y trate de taparme con la sabana.

-está bien, pero solo si te bañas conmigo- dijo juguetón.

-¡estás loco!-le dije tan roja como podía.

-no, eso es lo que quiero, Alice podría levantarme así todo los días, esto es lo mejor-dijo con una sonrisa y me trajo hacia él.

-te amo-susurro en mi oído.

-y yo a ti- le bese y al final terminamos bañándonos juntos.

Cuatro años después.

Elliot me abrazaba como a un oso de peluche, no podía quitarlo de encima, después de todo era mi prometido, así que debía dejarlo ser caprichoso; al menos eso dijo su madre cuando se enteró de nuestro compromiso, elliot me propuso matrimonio el día que nos graduamos del instituto, él y yo estábamos ahora en la universidad, pero su padres nos compraron un apartamento, porque al parecer el solo hecho de que él se quisiera casarse era motivo para hacer fiesta en su familia.

-despierta dormilón- le digo al oído con tono sensual.

-No quiero- protesto y me apretó más.

-tienes clase jovencito- le dije y le mordí la oreja.

-oye- se levantó y yo no podía de la risa.

-maldita- se tiro encima de mí, o no esto va ser malo- me las pagaras- sentencio con tono seductor.

-déjame- empezamos a jugar, y eso me recordó la cara que hizo mi padre cuando le dije que me casaría, lo recuerdo muy bien.

Flashback:

-No dejare de te lleves a mi Alice- grito levi.

-pero señor…enserio queremos casarnos- protesto elliot.

-papa deja de llorar- grite

-no lo hare, este idiota quiere alejarte de mi, piensa en tu madre Alice- dijo y señalo a lacie.

-mama ¿no quieres que me case?- pregunte.

-por supuesto que sí, estoy feliz, levi deja de hacer drama, pendejo, tu igual oswald, dejen de llorar nuestra niña encontró el amor- mi tío y levi no paraban de llorar y de mirar a elliot de manera asesina.

-y tu ¿Qué opinas Leo?- le pregunto levi- ¿verdad que no debe casarse con este vago?

-No soy un vago –grito elliot.

-A mí me da igual, mientras Alice sonría, ese era el deseo de Abyss, además ¿podrían parar de llorar?- los miro con frialdad y yo abrace a mi querido primo por apoyarme siempre.

-wiii hay boda- canturrio Sharon, mientras el payaso de break reía al ver la vergüenza de hombres que había en mi familia.

Fin del flashback

-¿Qué te pasa?- elliot me saco de mis recuerdos.

-nada, solo recordé lo feliz que me hiciste el día que me propusiste matrimonio- se puso rojo.

-ya veo- dijo con pena.

-vamos a bañarnos, mi amor- le dije y el me sonrio.

-te amo- susurro

- ¿aunque sea la discordia?- le pregunte.

-Gracias a Dios que causaste esta Discordia entre hermanos, gracias a ti Gilbert y yo somo amigos de nuevo, me alegra haberte conocido.

Fin.