Calaverita.

Deidara muy inseguro de su arte se preguntó:
"¿Por qué no tiene vida si a la arcilla encanto?"
Entonces, muy decidido a actuar, comenzó a maquinar.

Y sin solución alguna su esperanza se esfumó,
pues solo deseaba dar vida a su don.

Se rindió con pesar,
cuando vió detrás a una sombra pasar.
Con mucha malicia esta se acercó y le dijo al oído:
"Concedido. Le dare vida a tu arte vida si eres mi amigo."

Dudando de si aceptar o no, Deidara se dejo llevar.
Consiguiendo por fin ver a su arte volar.
Sonriente y feliz salto de emoción,
cuando escuchó una gran implosion.

La sombra burlona se dirigió hacia él,
tomando el premio que él le ofreció.

Convertido en títere Deidara quedó,
y Sasori su alma se llevó.