Nota de autora:Me inspiré *-* es solo que no sé, lo que más me gusta en alguien suelen ser sus ojos y por eso pensé en algo así. Luego, admito que tengo que subir un fic sobre el cumpleaños de Kaoru, lo iba a subir ayer que fue mi cumpleaños pero me dio flojerita terminarlo así que buano xD En fin, espero que les guste el fic, aunque es el One-shot más corto que he hecho y no sé cómo me quedó así que por favor denme su opinión y si tienen sugerencias agradecería que me lo dijeran :)

Disclaimer:PPGZ y sus personajes no me pertenecen, el fic sí.

Aclaración: También me inspiré por algunos fics que he leído sobre los verdecitos, así que les agradezco a las maravillosas escritoras que me han inspirado *-*


Profundos, oscuros y misteriosos.

Para Kaoru, los ojos de Butch eran perfectos.

Momoko amaba los ojos de Brick. Miyako suspiraba con tan solo echarle una mirada a los ojos de Boomer. Pero a ella no les importaba en lo más mínimo, le interesaba los ojos verde oscuro, que a su opinión, volvía al muy codiciado azabache más atractivo, lo volvía… diferente. Aunque claro, su estupidez y mente pervertida arruinaba completamente lo lindo que era, y claro, en este caso no era tan diferente de los demás chicos que la rodeaban.

Y a pesar de todo, esos misteriosos ojos poseían una simple desventaja, o al menos uno de estos, pues nada más y nada menos que el flequillo del chico le cubría uno de estas maravillas que el rostro del chico presumía.

Una lástima.

Solo que como todas las cosas, existía un lado positivo en cuanto a lo que le provocaba un tipo de obsesión a la morena. La mirada de, según ella, el chico más guapo que alguna vez había visto, se posaba todo el día en ella. No importaba que estuviese haciendo. Su mirada se encontraba fija en ella, y claro, la suya en la de él. Y entonces, una sonrisa se formaría en los labios de él y ella no podría evitar devolverle la acción.

La volvía loca, y él lo sabía perfectamente.

Solo que ella desconocía por completo, es que él también sufría una fascinación por las esmeraldas que siempre se encontraban fijas en él.

Podría ser un maldito mujeriego, machista, pervertido, entre otras cosas; pero como todos los hombres, tenía su lado romántico. Y ese lado era Kaoru.

Digo, ¿Dónde llegaría a encontrar un par de ojos color esmeralda como los de ella? La respuesta era simple, nunca. Nunca hallaría un par de maravillas como sus ojos.

El problema, es que era orgulloso. Y mucho. Y no permitiría que nadie se enterase de esto. Mucho menos sus hermanos o las fieles amigas de ella. No permitiría esa "humillación" frente a ellos. Aunque quizá, de alguna forma, deseaba en lo más profundo que ella se enterase de lo que sentía.

Pero, aunque les costase aceptarlo a ambos, se amaban, solo que a pesar de que esas miradas influían mucho en su enamoramiento, no solo por eso se amaban. Solo había que esperar que lo admitiesen.