Konichiwa! Aquí os traigo un Asakiku más ^^~

Es un poco OOC y CORTITO pero creo que os podría gustar~

Nota mental: Hetalia no es mío, sino que es del GRANDIOSO Himaruya-sama -reverencia-

A divertirse ·w·


-Sin más dilación, el espectáculo va ha empezar. -decía el presentador, entusiasmado- Con todos ustedes, llegado desde el mismísimo Londres les presento al más grandioso y espectacular mago de todos los tiempos: el asombroso Arthur Kirkland.

De la nada salieron toda clase de humos y luces, que desapareciendo rápidamente de allí, dejando a un joven rubio en medio, con una gran capa a las espaldas y una varita mágica en su chistera le miraban asombrados, sin dejar de mirarlo ni un segundo. Acto seguido desapareció del escenario, haciendo sorprender más al público, intentando encontrarlo con la mirada.

-Buenas noches, damas y caballeros -se oyó al fondo de la sala-Es un honor teneros aquí esta noche.

El desconocido seguía caminando en dirección al escenario, tapando su cara con una gran capa. Al llegar allá, dejó descubrir su rostro, haciéndoles saber que era el mago que hacía unos instantes había hombres como mujeres empezaron a aplaudir energéticamente, aunque estas últimas también lanzaban algún piropo hacia él.

-¡Qué animado está el público! -siguió el rubio- Pues esto no ha hecho nada más que empezar, señoritas.

El inglés siguió con grandes trucos que, para las personas corrientes, resultaban imposibles de realizar.

-Y por último, para finalizar mi función, necesito la ayuda de un voluntario.

Muchas manos estaban alzadas, intentando que pudieran ser elegidas para poder colaborar con él.

-¿Podría subir, por favor? -dijo, apuntando a un joven de cabellos negros y ojos oscuros- Usted tendrá el gran honor de subir conmigo esta noche.

Mientras subía, gran parte del público tenía la vista en el, odiándole por haber tenido el puesto que deseaban.

-Lo primero que debe hacer es presentarse, señor-Honda, Kiku Honda.-Muy bien, señor Honda, ¿está usted casado o en alguna relación sentimental en este momento?-No.-Ya lo habéis oído chicas, este hombretón aún está libre. -anunció, mientras todos le reían la gracia, a excepción del pelinegro.-Está bien, señor Honda, ahora que le conocemos ya podemos pasar al truco, pero antes -le tendió su varita- ¿Podría sujetármela un momento, si no es mucha molestia?-Por supuesto -respondió el japonés, sosteniendo la varita.

El inglés se alejó pero, mientras se alejaba, la varita que tenía el oriental se le escurría de las manos haciendo reír al público. El mago llegó apresuradamente, volviendo a colocar la varita recta y regañando al ojimarrón mientras se volvía a dirigir a su maletín. Esto sucedió una y otra vez, haciendo enfadar al rubio, reír al público y sacar de quicio al japoné és sacó unos aros completamente juntos y se los entregó a su "ayudante".

-Ahora intente desunir estos dos aros, señor Honda.

Kiku tiró con todas sus fuerzas para que los aros se separaran, sin éxito alguno.

-Es imposible -respondió- Están hechas de acero y ninguna fuerza humana puede separarles.

-¿Y si, en lugar de fuerza humana, fuera fuerza mágica? -preguntó el mago.

-Bueno-

No tuvo tiempo para contestar ya que el inglés, adelantándose, tocó los aros con la varita e inmediatamente dijo.

-Inténtelo ahora, por favor.

El pelinegro, dudoso, intentó separar con desgana los aros cuando, evidentemente, eran imposibles de separar. Pero, para su sorpresa, consiguió desunirlos sin apenas fuerzas, haciendo aplaudir al público locamente.

-¿Lo ve, señor Honda? Nosotros, los magos, somos capaces de cosas que resultan imposibles.

El japonés no pudo aguantar más, su cara se puso de color rojo rabia y empezaban a apretar fuertemente sus puños.

-Esto es una farsa -exclamó- Todo, todo lo que hay aquí es mentira. La magia no existe, todo son invenciones de los magos. ¿Por qué no lo entendéis?

Todo el público se sobresaltó, mirando mal al oriental y comentando entre ellos. El rubio se sorprendió un poco, pero rápidamente recuperó la calma.

-¿Acaso no crees en la magia?

-Por supuesto que no. Todo esto es obra de burdas trampas que, durante siglos, nos han engañado como a niños.

-¿Y como explicas todos los trucos anteriores? No creo que puedas ser capaz de saltar a la comba con el pelo de tus cejas ni tele-transportarte hasta el fondo de la sala.

-Era todo un farsa. Tus "trucos" no son más que hechos gracias a la "magia" del espectáculo, intentando burlarnos de nosotros.

-¿Quieres comprobar que la magia realmente existe? -dijo el mago, con una sonrisa pícara.


Y aquí se acaba~.

Os he dicho que era muy cortito y no se si podré acabar el segundo capi pronto D: Pero lo intentaré xD

P.D. Esta historia fue fruto de mi fiebre Asakiku (sus causas son adorar a Arthur y a Kiku más, si se puede, de lo normal) por haber leido el final de "Honorable Samurai, Sucio Pirata" de GriisleChan.

Seguro que os encantará~~