Disclaimer: Los personajes aquí presentados, no me pertenecen, son propiedad de Nikelodeon y Craig Bartlett. Excepto claro, los creados por mí, para narrar la historia.

Bienvenidos a esta historia, es un poco diferente a lo que he escrito, espero que disfruten.

¡Mas allá del paraíso!

Capitulo 1: Una vez en la jungla.

Hace algunos años…

– ¡Helga no llores me parte el corazón verte así! – Exclama un niño rubio, tratando de calmar a su amiga, un tanto ensordecido por el sonido de la cascada cercana.

– ¡¿Y mi corazón qué, no se esta partiendo al saber que te quedaras con tus padres aqui?! – Dice ella tratando de controlar las lagrimas.

– ¡Entiende Helga, recién los encontré y ellos no pueden solo irse y ya, tienen muchas cosas que hacer aquí!

– ¡Basta Arnoldo, basta! ¡No quiero saber nada mas… te odio, te odio! – Dice golpeandolo en el pecho.

El se abraza a ella. – ¡Me gustas Helga, de verdad, ahora lo sé, pero no puedo regresar contigo a Hillwood!

– ¡Te odio… te od… te amo, Arnold, no quiero perderte, ahora que tú sientes algo por mi… no quiero! – Dice ella sollozando y cayendo de rodillas al piso.

– Mis sentimientos no van a cambiar Helga, pasé lo que pasé, yo te quiero y te seguiré queriendo. – Dice él sintiendo, como ella se desmorona en sus brazos. El toca su rostro y limpia las lagrimas que salen de sus bellos ojos azules y la besa suavemente en los labios, con ternura. Ella abre sus ojos con asombro. Fueron solo unos segundos, pero pareció eterno.

– ¡Oigan ustedes dos, ¿donde estaban? el señor Simmons los… – Gerald se detiene, al notar de que se trata la escena. –… esta buscando!

Arnold voltea a verlo, mientras Helga se levanta y se limpia las lagrimas, volteando hacia otro lado.

– ¡Ya vamos, Gerald! – Dice Arnold.

– ¡Ya, ya cabeza de cepillo, que exageración, solo veíamos el paisaje! – Dice Helga pasando junto a él.

Arnold la mira y suspira.

– ¿Que fue todo eso viejo? – Pregunta Gerald.

– ¿Gerald, puedes hacerme un favor?

– ¿Cual hermano?

– Cuida de Helga mientras yo no estoy.

– ¿¿¿QUE??? ¿Cuidar de Helga? ¡De que hablas… ella se puede cuidar sola! – Replica extrañado Gerald.

Arnold mueve la cabeza en señal de negación. – No Gerald, ella es mas frágil de lo que aparenta, va necesitar alguien que la apoye, sé que no te cae muy bien, pero es tu amiga, ¿no es cierto?

– ¡Pues si algo así, ¿pero por que el interés Arni?!

Arnold se sonroja. – Lo que viste hace un momento, no fue producto de tu imaginación. – Expresa sincero.

– ¡Cielos viejo ¿Helga te gusta?!

– No solo me gusta, amigo, yo la quiero.

Gerald lo mira asombrado.

– ¿Entonces la cuidaras por mi? – Vuelve a preguntar Arnold.

Gerald, no sabe que decir, así que le da la mano a Arnold y hacen su saludo especial. – ¡Claro viejo, te lo prometo! – Arnold sonríe y luego regresan al campamento, para que el se despida de todos sus compañeros.

Helga y él se dan un ultimo abrazo, se sonríen y luego el la ve partir en la avioneta que consiguió Eduardo, solo diciendo adiós con la mano. Prometieron escribirse, y esa es una promesa que el piensa cumplir.

Cinco años mas tarde. Arnold baja de un avión junto a sus padres, al verlo sus abuelos casi no pueden creer lo mucho que ha crecido, es un adolescente ya, tiene 15 años ahora, él los abraza jubiloso, ha sido mucho tiempo sin verlos, solo las cartas han mantenido el contacto, después abraza a cada uno de los inquilinos de Sunset Arms, que han ido a esperarlo al aeropuerto.

Una vez en su casa él entra a su cuarto, sigue intacto, todo lo que dejo esta en perfecto estado, limpio y en su lugar, sonríe al ver que sus abuelos lo hayan mantenido así.

– ¿Como se ve tu recamara hombre pequeño? – Dice Phil, mirando con cariño a su nieto.

– ¡Todo se ve muy bien abuelo! Gracias. – Responde Arnold amablemente.

Su abuelo sonríe. – Bueno algunos de tus amigos, nos ayudan de vez en cuando Arnold.

– ¿De verdad? Es que, como deje de tener contacto con ellos, no pensé…

– Si chico, algunos todavía vienen y preguntan por ti. – Le explica el anciano.

– ¿Y Gerald viene? – Pregunta Arnold intrigado.

Phil, hace una mueca de extrañeza. – No Arnold, él ya no viene. – Le dice el abuelo algo triste. – Pero seguro ahora que regreses a tus estudios y a la escuela, lo vas a volver a ver… a él y a todos.

– ¿Has visto a Helga? – Indaga relajadamente.

Phil, esta a punto de decir algo, pero se detiene y cambia de idea. – ¡No este día, Arni! – Dice bromista. – Pero vamos, vamos abajo, los huéspedes prepararon algo especial para ti y tus papás.

Arnold solo asiente y baja con su abuelo, dejando la libreta que sostenía en sus manos, sobre su escritorio, la ventana esta entre abierta y una de viento mueve las hojas, hasta dejarla abierta en un dibujo, un dibujo de Helga.

La semana se le ha ido rapidísimo, no ha tenido tiempo ni de salir a buscar a sus amigos o llamar por teléfono, solo ha visto a Iggy, y eso solo porque se encontraron en la carnicería, y hasta con eso que su amigo en un principio ni lo reconoció, y como no, si Arnold traía el cabello larguísimo y el tono de su piel es mas moreno por el sol, pero bueno al final le dijo que le daba mucho gusto que ya hubiera regresado y que se verían en la escuela.

Y así llego el lunes que iniciaba el inicio de clases, y Arnold subió al bus que lo llevaría a su nueva escuela. Nadie que conociera, iba en él, tenia la esperanza de encontrar a alguien, pero nada.

La llegada a la institución no vario en nada, seguía viendo mucha gente desconocida, así comenzó a pasear por los pasillos, buscando su salón, se sentía vacío, como si algo le hiciera falta. El sabia bien que era, la había estado buscando, pero no, ella no se hallaba para nada cerca de él.

– ¿Arnold? – Escucha una suave voz a su espalda.

Cuando él voltea la ve, sonríe, hacia mucho que no la veía. – ¡Phoebe!

– ¡Wow, Arnold si eres tú, que sorpresa! – Dice la joven oriental que tiene el cabello mas largo, y se ve mas alta que antes.

– ¡Muy bien y tú, ¿como estas? No sabes la alegría que me da encontrar a alguien conocido.

– Ji ji, si esta escuela es muy grande, pero no te preocupes, entre clases vas a ver a casi todos. La verdad es que no esperaba verte, ¿cuando llegaste?

– Apenas el martes de la semana pasada, solo que no tuve tiempo de buscar a nadie.

Phoebe le sonrie sinceramente. – ¿Que clase te toca ahora? – Le pregunta ella.

Arnold lee su horario. – ¡Matematicas!

– ¡Que bien nos toca juntos la primera clase! – Expresa contenta.

Al entrar en el aula el se queda petrificado, la ve, por fin esta frente a él, metida en su lectura, sus ojos no pueden dejar de mirarla, se ve diferente a como la recuerda, para empezar su rostro se ve afable, tiene dos cejas en lugar de una, sus ojos azules se ven mas expresivos, y su cabello rubio cae gracilmente, sobre su rostro. Es cuando el joven que estaba sentado junto a ella se da la vuelta, pues se encontraba hablando con unos compañeros, y la toca, ella voltea a verlo y le sonríe, este aprovecha y le da un beso tierno en los labios. Arnold no puede creerlo, conoce bien a ese muchacho de tez negra y cabello rizado, es Gerald su mejor amigo.

Phoebe que a visto su reacción toca su hombro. – ¿Arnold? – Dice lentamente, como si al pronunciar su nombre fuera a lastimarlo.

En ese momento aquellos que el miraba, voltean a verlo al escuchar su nombre, Helga se levanta de su asiento, sin poder creer lo que ven sus ojos, Gerald solo abre la boca para decir algo, luego frunce el ceño y toma de la mano a Helga para que se siente. Ella lo obedece pero sin dejar de ver a Arnold que voltea a ver a Phoebe y le sonríe. Para luego acercarse a esas dos personas.

– ¡Hola chicos, cuanto tiempo sin vernos! – Dice extendiendole la mano a Gerald que lo mira incrédulo.

Continuara…

Je, je apuesto a que no se lo esperaban, pues si, esto va a ser un verdadero enfrentamiento, por lo pronto, aviso esto ya tenia mucho tiempo cociendose en mi cabecita, pero luego leí el fic de BKpets , CDUAO y sentí que se parecía un poco, (Nada que ver) pero ya después fui refinando la idea, y aquí me tienen con esta nueva historia, se que es una propuesta curiosa, pero verán que todos tienen sus razones para actuar como lo hacen, sobre todo por parte de Gerald y Helga, y si mi Arni va a sufrir y de hecho todos, esta es un poco mas dramática, así que esperen lagrimas, aunque también espero hacer reír a algunos con unas partes geniales, bueno me retiro y seguimos leyendonos, a mis amigos que quieren dibujos les voy a mandar mensajes privados para ponernos de acuerdo así que revisen su Inbox, sin mas por el momento, gracias espero reviews, tomatazos y regaños, bay!!!

Atte. Rei Hikaru Chiba. Love Love Arnold y Helga.