Disclaimer: Harry Potter no me pertenece ni ninguno de sus personajes, sino a la mente de J.K Rowling. Este es un fic sin fines de lucro, solo para entretener.
Este Fic participa en el reto "El Sombrero Seleccionador" del foro "Las cuatro casas"
Título: Sin importar el color.
Numero de palabras: 571
Summary: Y Rose Weasley sabía, que sin importar a que casa fuera enviada, ella triunfaría.
En el momento en que al fin poso su mirada en aquel feo sombrero, se dio cuenta de algo muy importante. Sin importar en que casa estuviera, Hufflepuff, Revenclaw, Gryffindor o Slytherine, ella triunfaría, lograría todos sus propósitos, nada ni nadie podría impedir que Rose Weasley lograra salir de Hogwarts sin tener excito. Tendría amigos, pasaría tiempo con sus primos, en especial con Albus, porque él era su mejor amigo.
Bueno, admitía que estaba un poco nerviosa, porque tendría que caminar frente a todos los residentes de Hogwarts para el momento decisivo con el sombrero seleccionador. Ni siquiera ella era inmune a los nervios que a uno le entraban cuando eras observada por todos a tu alrededor.
Observo de reojo a su primo Albus, el cual hablaba con algo de nerviosismo con Scorpius, a su parecer, ellos serían buenos amigos en el futuro, y a ella no le molestaría ser amiga de aquel chico hijo de Draco Malfoy, si, iba en contra de lo que le había dicho su padre, pero no le importaba, si quería tener excito en su futuro, necesitaría tener todos los amigos que pudiera, irrelevantemente de sus casas, todos debían de ser una buena manera de tener contactos, tener amigos, tener una buena relación.
—Potter, Albus Severus Potter—el llamado de su primo hizo que prestara atención.
En verdad que Albus se veía nervioso, y se notaba en su andar y al momento de sentarse para que le pusieran el sombrero. Calculo que la espera fue de unos cinco minutos, todos estaban expectantes por saber a qué casa iría, algunos susurraban que estaría en Gryffindor como todos los Potter hasta ahora, pero ella no estaba segura, bueno, algo así.
— ¡Slytherine! —después de escuchar aquella palabra, el silencio fue sepulcrar, nadie esperaba eso, bueno, cuando miro a James de reojo desde la mesa de Gryffindor, pudo notar que él igual estaba sorprendido, pero a la vez no tanto, fue como si creyera que fuera una broma. Raro.
Pero luego se escuchó el grito de las serpientes, más que felices de tener a un Potter con ellos, y lo recibieron con halagos y felicitaciones por estar en esa maravillosa casa.
—Weasley, Roseabud Weasley —el hecho de que la llamaran por su nombre completo fue lo que la saco de sus pensamientos. Y sin nervios ni vasilaciones, fue en dirección al sombrero.
—Veo que vuelve a asistir una mujer Weasley —la voz del sombrero comenzó a sonar en su cabeza, mas no se inmuto— A pesar de ello, tienes todas las cualidades de tu madre, no te importa a cual casa vallas, sabes que en cualquiera de las casas la que seas enviada podrás triunfar y destacar.
—He tenido eso en cuenta desde que escuche las pláticas de mi tío Harry y analice que mi madre pudo haberse destacado en Revenclaw—la respuesta de Rose hizo que el sombrero riera un poco, algo muy inusual.
—No tengo que escuchar más, te enviare al lugar en el que tu madre pudo estar—fue lo último que escucho del sombrero en su mente antes de escuchar el fuerte grito de la casa a la que había sido seleccionada— ¡Revenclaw!
Y sin esperar más, Rose camino a su mesa, con su casa, su nueva familia. Y mientras caminaba hacia todos los de Revenclaw, pudo divisar como Albus le sonreía como felicitándola por la casa a la que había sido enviada.
Definitivamente, ella triunfaría.