AmatSuki: ohayo que tal estan¿? como pueden comprovar no estoy muerta.

Suki: Ya me gustaria a mi.

Amat: Que mala que eres, bueno primero nos presentremos yo soy Amat la parte blanca y ella es Suki la parte negra. Suki nacio... Etto como naciste?

Suki: soy tu parte/personalidad oscura, pesimista, aunque tu de por si misma ya lo eres, que se ha ido formando a través de los fics que has ido escribiendo o traduciendo.

Amat: pues aqueí tienen su presentación les dejo con el fic.

Declaimer: paso de ponerlo.

Amat: Suki no me quites el trabajo!

SuKI: Allen y Kanda són enviados a Edo para aydar en su recontrucción y su protección por un tiempo. Pero cual será la sorpresa de Kanda al ver a su familia y todavia más al ver como todos se intentan ligar a Allen. Yullen evidentemente y puede ser k Luky más adelante.

Amat: (depresioba) me han quitado el trebajo sniff T.T

Saki: clla y a escribir.

Había sido una mañana perfecta, hasta el momento; se había levantado antes del amanecer, había estada entrenando sin ninguna perturbación, había almorzado su apreciada soba y tempura y no había visto al conejo idiota ni la loca fan-girl en toda la mañana. Pero claro, siempre tenia que haber algo, o en este momento mejor dicho alguien, que lo tenia que echar todo a perder y ese tubo que ser Allen Walker, a.k.a. Moyashi. Bueno, de echo, no es que fuera su culpa, sino más bien, del estúpido buscador que lo estaba acosando, eso según Kanda , porque lo único que hacia era hablar con Allen.

Se terminaba de deshacer de uno y venía otro a continuación y eso le irritaba mucho.

" ¡¿Es que nunca se acaban?!" pensaba un furioso samurai mientras desprendía una densa aura negra con un gran instinto asesino, que izo que el buscador al verle se le helara la sangre y saliera corriendo temiendo que ese fuera el fin de su vida. Ya era sabido en todo la Orden, aunque algunos eran lo suficientemente idiotas como para no entenderlo, de que Allen era exclusivamente propiedad de Kanda y cualquiera que lo tocase o mirase más de lo debido sufriría la ira del samurai. Bueno...toda excepto el mismo peliblanco, que se estaba preguntando porque el pobre buscados había salido corriendo, ya que estaba de espaldas al japonés y no lo había visto.

-Hey, Moyashi- dijo Kanda para captar su atención- apártate del camino, estorbas- estepó colérico. ¿Es que acaso el Moyashi no se daba cuenta de lo celoso que se ponía cuando le hablaba a alguien con esa encantadora sonrisa que le dirigía a todos excepto a él? El peliblanco se giró y le miró.

-¡Es Allen! ¿Que te ocurre ahora BaKanda? Con la cara que tienes parece que bayas estreñido, ¿Estoy en lo cierto?- se burló el peliblanco, si el samurai quería guerra él se la daría, no se dejaría pisotear ante ese apuesto japonés que siempre le estaba quitando el aliento, no señor, (No de la forma que están pensando pervertidas, aunque no estaría nada mal ¬ Suki: concuerdo con la pervertida esta ¬) una cosa era que estuviera enamorado de él y otra cosa muy distinta era que pudiese hacer lo que le diera la gana.

Pensamiento que rápidamente se arrepintió de haber pensado al ver como la aura negra del samurai se incrementaba y su instinto le decía que saliera de allí corriendo si quería que su cabeza todavía atada a su cuerpo. Y así que cuando vio como la mano del samurai se dirigía a Mugen se dio la vuelta para empezar a correr para salvar su cuello. Pero antes de poder ni siquiera dar un paso, la voz del mismísimo diablo lo paró, aquella voz que le había causado tantos traumas, deudas y, por su culpa, casi alguna que otra violación lo estaba llamando, y no parecía precisamente muy alegre que digamos.

-¡¡Baka Deshi!!- se escuchó decir a Cross Maria al final del pasillo (aquí Cross no está muerto, lo he resucitado JAJAJA(risa diabólica con rallos al fondo por parte de la autora) Suki: y a mi me llaman la personalidad oscura ¬.¬)- ¡¡Venid aquí inmediatamente tu y tu trasero, tienes que hacer unas cosas por mi !! – gritó mientras se le aparecía un resplandor y una sonrisa diabólica en los labios y los ojos, que izo que Allen le diera un escalofrió por todo el cuerpo y empezara a temblar. Fuera lo que fuera que su maestro le iba a pedir seguro que su integridad física iba a correr grabe peligro.

-¡¡ NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!- gritó el peliblanco desesperado viendo como su maestro levantaba su amado martillo y se dirigía hacia él. Kanda, que se había mantenido a un lado observando toda la escena, se estaba preguntando que demonios le había echo hacer ese pervertido a SU Allen para que le tuviera tanto miedo. Ese Cross encabezaba con la segunda posición su lista mental de venganzas, después de Road claro, por haberle robado su primer beso al Moyashi, porque ese beso debería haber sido único y exclusivamente suyo, igual que sus labios.

Tranquilo no te dolerá mucho- dijo Cross, que ya estaba delante del peliblanco alzando el martillo para poder noquearlo, con voz de ultra tumba. Pero antes de que pudiera tocarlo, ni siquiera rozarlo, el pequeño salió disparado como alma que lleva al diablo hacia Dios sabe donde.

El General intentó ir tras él, pero fue parado, terminando con la cara contra el suelo, por una zancadilla cortesía de nuestro querido samurai, que le estaba dirigiendo una de sus famosas miradas de rayitos. No iba a permitir de que ese pervertido se aprovechara más de su Moyashi.

-Ohy, ¿ Te das cuenta de lo que acabas de hacer, chico?- dijo Cross con un el flequillo tapándole los ojos y con una aura, más negra que se le ponía a Kanda cuando se enteraba de que alguien estaba coqueteándole al peliblanco, mientras se levantaba.– ¡¡Acabas de firmar tu sentencia de muerte!!- gritó mientras sacaba a su amada Judgement (su pistola) y apuntaba al samurai.

-Ja, inténtalo si puedes viejo- contraatacó Kanda ya en guardia y con Mugen desenvainada. Hacia tiempo que quería tener unas palabras con Cross y ese era el momento perfecto, ya que nada ni nadie le podría impedir dar su merecido al General.

La tensión que había en aquel momento entre los dos era tal que parecía con incluso un oxidado cuchillo se pudiera cortar. Ninguno de los dos se movía, esperando que el otro diera su primer paso para que el otro pudiera atacar por alguna abertura que su contrincante dejase. Sus miradas clavas en los ojos del otro destellando rabia y furia.

-Tienes agalla chico, me gustas, me caes bien- dijo mientras bajaba a Judgement y la volvía a poner en su funda. Kanda se quedó perplejo, le había humillado de esa manera y no se volvía, seguramente algo rondaba por la cabeza del General Cross y seguro que no era nada bueno- Pero- ahí estaba- lastima que seas gay, seguro gracias a ti podría haber conseguido un autentico harem de mujeres de verdad(Véase 90 60 90) Ja ja ja ja ja.

Ha Kanda se le apareció una gota de sudor tras su nuca "Como demonios sabe lo de mis preferencias sexuales este tipo" pensó mientras envainaba a Mugen. Siempre estaba intentado ocultar sus sentimientos respecto a Allen, pero había algunas veces que ellos podían más que su orgullo y se dejaban ver a través de su mascara.

-Se que eres gay por como le miras el trasero a mi aprendiz cada vez que esta de espaldas a ti y por la cara que pones cada vez que alguien le coquetea, lo toca y lo mira demasiado, deberías aprender a controlar más tus celos- dijo mientras sacaba un cigarrillo y le prendía fuego- Además si lo continuas tratando así lo único que conseguirás será aceros daño mutuamente. Si lo quieres de verdad cógelo y demuestra quien manda y haz que no pueda andar bien por una semana entera. Ten coge esto te irá bien- le dijo mientras sacaba un bote largo y le extendía al samurai.

-¿Que es esto?- preguntó muy desconfiadamente. Cualquier cosa viniendo por parte de Cross seguro que nada inocente podía ser.- ¡¿L-lubricante?!- leyó en lo que ponía en la etiqueta. ¿Que hacia el General llevando esa cosa encima?

-Es de gran calidad, seguro que te irá bien en tu próxima misión- dijo mientras se daba la vuelta- bien y ahora a buscar a ese idiota que a saber hacia donde se habrá ido- dijo mientras se ponía a andar hacia la dirección en la que había huido Allen para acto seguido desaparecer en la negrura de los pasillos.

"¿ Que querrá haber dicho ese pervertido con que me irá bien para mi próxima misión?" pensaba Kanda mientras se dirigía hacia su habitación a meditar un poco, ya que si iba a la sala de entrenamiento seguro que seria molestado fácilmente por la desquiciada fan girl Yaoi y el conejo estúpido, además no querría ni imaginarse que pasaría si le descubrieran con el bote de lubricante encima. Estaba a punto de llegar a su habitación cuando escucho la voz de aquel de que hacia llamar su padre.

-Yuu-kun te estaba buscando, ¿Como estas?, hacia tiempo que no te veía, ¿Ya comes bien? Porque es muy importante comer en época de crecimiento- decía mientras se abalanzaba con grandes lágrimas de cocodrilo a abrazar a su hijo. Abrazo que por desgracia Kanda no pudo esquivar.

-Déjame ir viejo- decía entre dientes el samurai mientras intentaba con todas sus fuerzas que su auto nombrado padre le dejase ir.

-Suerte que he encontrado a Cross y me ha dicho donde estabas, porque sino seguro que te vas a tu próxima misión sin despedirte de mi- decía un poco, solo un poco más calmado.

"¡¡Esta me la pagas viejo pervertido, mujeriego, embaucador, teñido...!!" Y toda una gran extensión de insultos hacia el General pelirrojo hasta que... "¿Misión, que misión?"

-¿De que misión me estás hablando viejo?- preguntó amablemente (nótese el sarcasmo ¬.¬) el japonés, cosa que hizo recordar al General porque lo estaba buscando y que dejase de abrazar al japonés y volviera a una postura un poco más digna. (véase de pie y dejando de llorar ¬.¬ Suki: deja de interrumpir ò.ó# (abanicazo))

-Es que Komui dijo que te buscáramos y que te dijéramos que te reúnas con él en su despacho para darte un misión, ¿No te lo dijo Cross cuando lo viste?- preguntó un poco ingenuo el General. Kanda le lanzó una mirada heladora que se veía claramente el mensaje de "No me vuelvas a hablar de ese mujeriego o te corto la cabeza"- Por la cara que pones me parece que no te lo ha dicho. Ah por cierto Yuu-kun había pensado de que cuando vuelvas de misión podríamos reunirnos todo el grupo y...-Y antes de poder terminar la frase el samurai ya había desaparecido de su vista, no quería que el viejo le metiese en uno de sus planes de vivir un día en familia, antes muerto que sufrir semejante humillación.

Y así sin poder ir a meditar (O a tener pensamientos impuros sobre Allen . (zape por parte de Suki)) ni poder entrar a su habitación a dejar el lubricante se dirigió a la oficina de Komui para ver cual era la misión que tenia.

TOC TOC

( Lo siento pésimos efectos especiales es que ya me he gastado todo el dinero de esta semana por culta de Suki y... Suki: será tu culpa fuiste tu la que quisiste comprarte los doujinshis Yullen como loba hambrienta por carne fresca Amat: Vaya comparación... Suki: ¡A trabajar!( Zape con un ultra abanico autora en K.O.))

-Pase- se oyó la voz desde dentro. No fue muy sorprendente encontrar toda la oficina llena de papeles, ni tampoco a un Rever con voz de fondo diciendo ya de que una vez limpie su escritorio, ni a un Lavi pintando la cara de un inconsciente Allen con un gran chichón en la cabeza del peliblanco (Quien se lo abra echo ¬.¬) en el sofá mientras una Lenalee intentaba pararle, y ni a un Komui viendo toda la escena como si de una película de lo más entretenida se tratara, si todo normal.

¡Espera! alto, alto, alto... recapitulemos, ¿Un Allen inconsciente en el sofá con un gran chichón en la cabeza? ¡¿Que demonios había pasado allí?! ¡¿ Quien había sido el idiota que había noqueado a su Moyashi?! Bueno, por suerte no parecía que tuviera ningún rastro de abuso sexual alguno.

-Ah, ya estas aquí Kanda- dijo el científico, pero al ver que el samurai tenia sus pensamientos ocupados por algo, o más bien alguien añadió- No te preocupes por Allen-kun solo está inconsciente. Debe de tener la cabeza muy dura para poder soportar los golpes del General Cross y no morir después.

-¡¿Quién se está preocupando por el Moyashi?!- gritó el samurai un poco exaltado, pero internamente... "¡¿Otra vez él?! ¡¿Como se ha atrevido a hacerle esto a MI Moyashi?! Juro que si lo vuelve a tocar otra vez...¡¡ LO CASTRO!!" digamos que estaba un poquitín cabreado.

-O no te enfades- dijo rápidamente el supervisor, tenia que vivir para evitar que ningún pervertido se acercase demasiado a Lenalee – Yo solo decía porque te lo habías quedado mirando y tenias una cara tan pensativa...- el japonés le envió una mirada que etiquetarla como terrible seria decir poco- Bueno- se aclaro la garganta- en fin, ¿Lavi-kun puedes despertar a Allen-kun por favor?

-En seguida – y acto seguido el pelirrojo se inclinó sobre Allen para darle un beso para despertar al bello durmiente. Al ver el acto que quería realizar el Bookman Jr., Kanda empezó a emitir una aura tan negra que nublo todo el despacho e izo que el pelirrojo le recorriera un escalofrío por todo el cuerpo, llegando a lugares que incluso él no sabía que tenia, eso izo parara y se fuera lo más lejos del peliblanco y el samurai posible. No había sido muy inteligente por parte intentar poner al japonés un poquito (Amat y Suki: solo un poquito ¬.¬ Lavi: je je n.nUU Kanda: ¬.¬-xxx Lavi : T.T estoy muerto verdad¿? AmatSuki : Si y ahora te das cuenta ¿? ¬.¬U) celoso para que confesara sus sentimientos por el pequeño, y sobretodo intentándolo hacer de la manera que había echo. Kanda ya iba a desenvainar a Mugen cundo los gritos de Komui lo pararon.

-¡¡Lavi como te atreves a hacer esas cosas delante de los ojos puros de mi inocente Lenalee-chan, es que no tienes vergüenza!!- decía un sulfurado supervisor, mientas intentaba tapar los ojos de su querida hermanita para que no viera tal escena. (Aunque con el aura que desprendía Yuu tampoco es que se viese mucho ¬.¬)

-¡¡Oni-chan que haces, quiero ver lo que ocurre, que no ves que esto solo pasa una vez en la vida y hay que aprovechar el momento!!- chilaba como fan girl Yaoi que es. (Tranquilas esto es un YULLEN no LAVEN)

-¡¡ Ves lo que has causado, has hecho que el corazón de mi linda Lenalee se manchara de tu corrupción!!- lloriqueaba Komui mientras abrazaba fuertemente las piernas de su hermana- ¡¡ Lenalee no dejaré que tu lindo corazoncito se manche más por escenas tan impuras!!

-Si, corazón puro, si ella es la que se encarga de hacer los fanfics y las historias Yullen más pervertidas e eróticas- murmuró por lo bajo, esperando que nadie lo escuchara.

-¡¡Como te atreves a decir eso!!- chillaba rabioso Komui- ¡¡ Te vas a arrepentir de haber dicho eso, ataca Komur...!!- pero no pudo terminar ya que unas botas le golpearon en la cabeza dejándole medio inconsciente.

-¡Lavi demuestra que eso era un secreto!- dijo intentando localizar al pelirrojo entre la densa niebla negra – Por cierto Lavi yo de tu vigilaría tus espaldas...- decia la china un poco asustada.

-¿Porque dices eso?- preguntó un muy aterrado Bookman Jr. temiendo saber la respuesta se esa pregunta.

-Porque Kanda... no... esta... aquí...- dijo mientras miraba a todos lados para poder localizar al samurai e impedir que asesinara a su auto nombrado amigo.

-Que quieres decir con...- pero no pudo acabar de decir la frase ya que sintió como los pelos de su nuca se erizaban al sentir una gélida mirada detrás suyo. Tragó saliva al oír como una espada era desenfundada- B-ba-ba-amo-s-s Yuu-cc-cha-an to-todo el mu-mu-mundo sa-sa-sa-sa-sabe-be que All-le-le-len es so-sol-oo tu-tu-tu-tuyo- dijo como última esperanza el pelirrojo. La aura se izo más densa si era posible. "Seguro de que de aquí no salgo vivo" pensaba un pelirrojo con unas grandes lagrimas derramándose por sus mejillas.

-Hey Baka usagi ¡¡Cuantas veces te he dicho que no me llames por mi nombre de pila!!- dijo para acto seguido abalanzarse contra Lavi con la espada en alto.

" AH AH AH Dios lo siento, prometo que si me libras de esta are más caso al Panda, no jugaré bromas a la gente de la orden, iré a confesarme cada fin de semana, aré todo lo que tu quieras, pero no me dejes morir ahora estoy en la flor de mi juventud" Y entonces se izo la luz, literariamente.

El aura negra había desaparecido y eso le llevó a pensar al pelirrojo que ya había muerto, idea que descartó inmediatamente al ver a Mugen a un milímetro de su frente. La cuestión era porqué el homicida antisocial Yuu Kanda había parado su ataque, teniendo en cuenta que desde hacia mucho tiempo que le quería rebanar la cabeza al Bookman Jr.

La respuesta fue clara al vez hacia donde se dirigía la mirada del japonés. Alí en el sofá estaba un Allen somnoliento, que daba a conocer que se había despertado recientemente seguramente por culpa de los gritos anteriores, que se estaba tallando el ojo dando la imagen más encantadora que el samurai había visto en la vida.

-¿Qué ocurre aquí?- dijo mientras miraba a su alrededor- Lo último que recuerdo es el marti...- un notorio escalofrío le recorrió la columna vertebral. Los otros no necesitaron más explicación- Ah, ¿Que has hecho esta vez Lavi?- preguntó el británico en darse cuenta de la situación en la que se encontraba su amigo.

El pelirrojo era un poco estúpido a veces, pero no completamente un imbécil, si le decía que Yuu lo estaba intentado matar por haberlo intentado despertar con un beso seguro de esta ya si que no saldría con vida y dudaba mucho que con alguno de sus órganos con buen estado.

-Che, que no se vuelva a repetir conejo, sino me aseguraré de que absolutamente nadie te pueda reconocer ni intentando encontrar tu ADN- dijo mientras envainaba su espada y de dirigía al supervisor que esta en K.O.- Oy, levántate de una vez o quieres que tu cabeza ruede por los suelos?

-Pues como les iba diciendo les he reunido aquí para darles los detalles de la misión en la que partirán de inmediato cuando terminen de hacer su equipaje- empezó Komui. Caída estilo anime por parte de Allen, Lavi, Lenalee, Autora y Pseudo autora (Suki: OY ¬.¬ Amat: je je n.nU)- Lenalee los detalles por favor- dijo mientras la china les entregaba a los chicos.

-Les vamos a enviar a Japón para que eliminen los restantes Akumas que quedan allí. Como ya saben ese país fue anteriormente la base enemiga y como nueva información que tenemos, sabemos que desde hace poco Edo ha sido repoblado por los habitantes se que ocultaban de los Akuma. Así que para que la capital pueda volver a la normalidad se ha decidido que ustedes tres vayan a ayudar a la reconstrucción y a su protección por un tiempo- hizo una pausa.

-Allen-kun te habrás preguntado que haces aquí ¿no?- el peliblanco asintió- pues resulta que anteriormente esta misión tendría que haber sido realizada por Kanda y al General Cross, ya que ellos han estado en Japón por largos periodos de tiempo así que he decidido que tu y que Lavi seréis los sustitutos de Cross- dijo con una sonrisa- Arreglad vuestras cosas, en una hora os vais- dijo para culminar la reunión.

Los tres se levantaron y se fueron a sus respectivas habitaciones para hacer su equipaje sin prisas. Lo bueno de tener el Arca en sus manos es que así podían salir directamente a su destinación sin tener que abordar un tren como lo hacían antes. Esta tan sumergido en sus pensamientos que no se dio cuenta de que Allen se había ido hasta que Lavi lo llamó.

-Ey Yuu se te ha caído una cosa -dijo de repente, mientras se agachaba a recogerlo. Con la movida que había habido antes al Japonés se le había olvidado completamente que todavía llevaba el bote de lubricante en su bolsillo y en ese momento se le había caído.

-Yuu-chan que haces con un bote de lubricante encima, no crees que todavía es demasiado pronto como para pensar en tener sexo con Allen-chan si todavía no te le has declarado- dijo el Bookman Jr. pícaramente, Kanda le dirigió una mirada heladora.

-No es tu problema lo que quiera hacer con el Moyashi, además tu y yo tenemos un tema pendiente- el pelirrojo tragó saliva- te voy a perdonar la vida con una condición, la aceptas o no?- dijo con malicia.

-De acuerdo- dijo rápidamente sin pensar. Después se abofeteó mentalmente por haberlo echo y aun más al ver la cara que había puesto el samurai.

-Perfecto, es una cosa bien sencilla- dijo mientras se le acercaba y le agarraba la camisa- invéntate alguna excusa para no venir en esta misión. Si te veo venir de aquí una hora en el arca te juro que te voy a dejar sin descendencia. ¿Entiendes?- Lavi asintió- Muy bien, entonces espero no verte de aquí dentro de una hora- Le dejó ir del cuello y se dirigió a su habitación.

-Estas bien enamorado de él no?- preguntó. Pudo ver como la cara de Kanda tomaba un poco de color- Cuídalo y no le hagas daño. Demuéstrale quien manda, cómetelo y hazlo tuyo.- dijo como despedida el pelirrojo antes de irse en dirección contraria.

-Jejeje muy bien Yuu-chan me boy a encargar que después de esta misión Allen-chan y tu seáis la pareja más enamorada del siglo, pero para eso necesito un poco de ayuda- una risa malvada se dibujó en sus labios- ya va siendo hora de que Allen-chan conozca a tu familia.

Amat: Que tal les ha parecido?

Suki: Muy malo.

A: No estoy pidiendo tu opinión estoy pidiendo la opinión de las lectoras y lectores si hay alguno por ahí. Y una pregunta ¿Por qué eres tan amargada?

S: Preocúpate de tu misma y de continuar el fic, que de seguro que ya no tienes ninguna idea de cómo continuarlo.

A: (con una flecha clavada en su cabeza y otra en el corazón) T.T Que mala... En fin esperamos sus review. SAYONARA

S: como que dejarán alguno ¬.¬

A: (Con un bazoca, pistolas, granadas, cuchillos, coetes, ametralladoras, escopetas ytodo apuntando a Suki) ¡¡A CALLAR!!

S: Y despues me consideran a mi la personalidad oscura T.T