El encuentro

Muerte, en el desolado campus de batalla, el hedor a muerte abundaba por doquier, la sangre de valerosos ninjas caídos en batalla se mezclaba con la tierra creando charcos de lodos hediondos. A pocos pasos de ahí miles de ninja con kunai en mano y defendiendo el símbolo de la armada trataban de dar pelea a los enemigos blancos, setsu`s que caían y volvían a aparecer como si nada.

A unos pocos kilómetros de ahí en un acantilado lejano, reposaban en tumbas improvisabas decenas de cadáveres sin rostro, sin nombres, ni aldeas ni mucho menos nadie que los lloraba, tan solo con un símbolo que los representaba "la gran armada ninja".

Un poco más alejado del campo de batalla, casi aislado una campaña improvisada se levantaba sirviendo como hospital, los ninjas-medic trataban de ayudar a los ninjas que no paraban de llegar pidiendo alivio temporal para sus heridas ya que tenían que regresar como diera lugar.

Una pelirosa con el cabello amarrado en una cola alta de caballo, había caído desmayada hace minutos, su cuerpo estaba tenso y agarrotado no le quedaba ni una gota de chakra, hace días que no descansaba, su cuerpo estaba pasándole factura por el sobresfuerzo que había en la inconsciencia su mente la traicionaba, se perdía en los recuerdos que tanto se esforzaba por olvidar, el comienzo de todo, sus días en el quipo 7, los entrenamientos con su shishou, yamato taichou ,los rostros de sus amigos se proyectaban en su mente – su shisou tsunade, shizune, inocerda, saibaka y por supuesto a naruto con su brillante sonrisa – kakashi sensei y su libro pornográfico y sasu.. ahh… sasuke-kun, como olvidarlo si con su partida de la aldea derrumbó su mundo, sus metas .todo. no se dio cuenta en que momento se volvió indispensable en su vida, se volvió el centro de su mundo y con su partida se sintió perdida, sin utilidad , una carga ….una ..una molestia.

¡Nos atacan! – gritó una desesperada shizune al producirse una explosición a unos metros de ahi – rápido salgamos de aquí, este lugar ya no es seguro, traten de llevar lo que puedan, y salven a los heridos –

La pelirosa podía escuchar gritos y sentía el movimiento alrededor, pero no podía siquiera pararse, su mente le gritaba que se pusiera de pie y que ayudara pero su cuerpo no le respondía, intentó gritar, pero las palabras se atoraron en su garganta produciendo gemidos ahogados.

Sakura neechan – gritó una voz juvenil en medio del ajetreo, un joven herido de la aldea de la lluvia al que le había tomado aprecio la llamaba con desesperación – ¡paren! Sakura neechan no está, no podemos irnos sin ella – angustiado observaba como todos se iban sin importarles nada donde se podía encontrar la ninja-medic.

Haku, rápido sal de aquí – exclamó una ajetreada shizune llevando lo ultimo que quedaba en aquella carpa.

No puedo sakura neechan aun no sale, no puedo dejarla ¡ella me salvo la vida se lo debo! –

¿Qué? Dond.. – no pudo continuar ya que una explosión estremeció todo el lugar derrumbando la carpa – salgamos sakura es fuerte, a penas encontremos un lugar seguro la mandaremos a buscar – rogo internamente porque nada le hubiese pasado a la pelirosa

Sakura neechan – susurró haku mientras abandonaba el lugar junto a shizune

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Un hombre caminaba en lo que parecía fue un campo de batalla, miraba tranquilamente a su alrededor observando los cuerpos ya sin vida a cada paso que daba no había más que armas tiradas en el suelo sin contar uno que otro cadáver, la guerra lo arrasaba todo, no distinguía enemigo ni aliado, cuando estas envuelto en esta guerra pierdes por completo tu identidad, sin nombre ni aldea simplemente un hombre tratando de poder sobrevivir, por una fracción de segundo el olor putrefacto calo hondo en él, a pesar de vivir prácticamente toda su vida rodeada de sangre nunca pudo acostumbrarse al olor, lo intoxicaba recordándole a cada momento lo sucedido en konoha

Reanudo su camino, no tenía sentido quedarse ahí, a pocos metros después de abandonar el lugar se encontró con lo que quedaba de una tienda medica o eso suponía el olor a medicina y oxido tan distintivo, sin saber el motivo sus piernas lo guiaron a adentrarse del todo, a cada paso que daba el olor a medicina se intensificaba generando malestar, inspeccionó con la mirada el lugar como si quisiera encontrar algo, mas no sabía qué.

– mmm ahh – un gemido ahogado lo sacó de sus pensamientos, sin pensarlo busco el lugar donde venia el sonido

Rosado – un susurró apenas audible escapo de sus labios, en una esquina envueltas en sabanas se encontraba una mota rosada – cerezo – ese era el olor que lo impulso a adentrarse de lleno a ese lugar, era como si en todo ese tifón de olores, el suave e imperceptible aroma de cerezos se levantase fuerte y tenue pero sin mezclarse con su entorno.

Se encontraba frente al bulto rosado, observando que se trataba de un menuda muchacha

Sakura Haruno – recordó su nombre, era de konoha, alumna del kakashi y la 5ª hokage, amiga inseparable del kyubi y como si fuera más irónico todavía la eterna niña enamorada de su sasuke. Su … otouto baka

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Observaba las repetidas veces que ella retorcía su cuerpo como si tratara de escapar de algo, el fruncido de ambas cejas y el gesto de su boca le dijeron que por más que lo intentaba no daba resultado.

— ¿Se que estas despiertas, no piensas levantarte? – Indagó curioso.

— ¿Tu? –¿Qué hago aquí? – trato de incorporarse, pero aun su chakra no se recuperaba del todo

— te traje yo – respondió calmadamente

Ya me percate de eso – ironizó jugando con ambas cejas—. Lo que quiero saber es con que propósito—Alzó su mirada, su rostro era perfilado y finamente delineado pero sin parecer el de una mujer, sus ojos negros, como dos pozos profundos, oscuros e interminables, debajo de ellos 2 profundas marcas, senderos oscurecidos por el tiempo o lagrimas tal vez, tan parecido y a la vez tan distante de su sasuke kun .

—sakura haruno – no entendía la razón de llevarla consigo, su tiempo era limitado y se encontraba ahí lejos del campo de batalla – tu chakra aún no se recupera, duerme – tenía muchas que hacer y no podía seguir perdiendo tiempo con esa chiquilla.

¿Que? Noo ,la guerra, como es que estoy aquí, y los heridos – las imágenes del día anterior golpearon fuerte su cabeza – donde están todos– no recordaba lo sucedido

Sigue la guerra, yo te traje y solo estabas tú— respondió cada una de sus preguntas sin importarle demasiado,

No mientas, exijo una repuesta – se coloco en posición de batalla

Itachi la miro detalladamente por unos minutos, no la recordaba así, pensó que en cuanto se diera cuenta de que el estaba ahi, lloraría y clamaría por que no la matase, pero en contra todos sus pronósticos, la joven se levanto lo más dignamente como pudo y al no ver a sus compañeros adopto una posición de defensa.

Tienes graves heridas, y apenas el chakra para mantenerte consiente, — una imperceptible sonrisa broto en él.

Soy médico se cuidarme perfectamente sola y podría patearte el trasero si no contestas mi pregunta— reprocho enojada, quería saber el paradero de sus amigos, pero lo que más le enojaba era el hecho de que lejos de estar asustada al encontrase sola, lo que quería realmente era hablar con él, Uchiha Itachi — además tu también estas débil verdad, típico de un Uchiha hacerse el fuerte sin importar nada, solo su puto orgullo

Abrió levemente los ojos de la impresión, esta chiquilla era de verdad estúpida, acaso no lo reconocía, sabría que él podría matarla en fracción de segundos, pero aún así lo trataba como si fuera un crio — brillante deducción —El tono acido y hasta burlón de aquel comentario, le dieron ganas de llorar como una cría, sin poderlo evitar recordó a sasuke kun.

La contemplo por breves segundos antes de cerrar sus ojos, ya no podía perder más tiempo, tenía que encontrar a kabuto y deshacer el edo tensei, eran muchas las cosas que debía hacer y no quedaba mucho tiempo, antes de siquiera dar un paso más se encontraba en el suelo, un entumecimiento en todo el cuerpo lo había tumbado

¿Qué te sucede? Hey me escuchas — no entendió lo que sucedió de un momento a otro se encontraba a punto de pelear con él, y en segundos se encontraba tumbado en el piso con los ojos cerrados — tranquila soy médico recuerdas— dijo hincándose a su lado

Suéltame, acaso eres estúpida no te has dado cuenta aun —

No y no me importa, te quiero ayudar— tenía que hacerlo podía ver su rostro perlado por el sudor, le estaba doliendo— sé quién eres y no me importa,

Imbécil, sin hacer esfuerzo alguno te podría matar — en verdad esa mujer era estúpida

Pero no lo harás— proclamó con una absoluta seguridad

Como puedes estar tan segura— no lo entendía, ella era tan.. tan..

Porque eres el hermano de sasuke kun — una hermosa sonrisa afloro de sus labios

Eso no es motivo par.… — sin siquiera terminar cayo desmallado en los brazos de la kunoichi, esa mujer lo desconcertaba, sus palabras, su mirada, ella lo miraba como si el fuese una persona, como si de verdad tuviera fuese alguien que tuviera valor, sin duda alguna esa mujer era estúpida ..muy estúpida