Aviso: Este fic participa en el Reto Especial "Dean Winchester" del foro "Supernatural: Blood Brothers".
Aviso 2: Este es un Drabble de 155 palabras exactas.
Aviso 3: Contiene Spoilers de final de la última temporada y el comienzo de la nueva.
Disclaimers: Los personajes mencionados en este fic son creación y pertenecen a Eric Kripke.
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Dean despertó y sentía…nada. Esa era la palabra clave, nada. Crowley estaba en una esquina de la habitación, sonriendo como si hubiese conseguido un millón de almas para el infierno, le extrañó no ver a Sam, se preguntó dónde estaría su hermano, pero lo pensó bien y en ese momento descubrió que no le importaba. No le importaba porque Crowley estaba allí y Sam no, tampoco le importaba donde estaba o que hacía.
Era un demonio y no le importaba.
Era una sensación nueva, diferente, pero buena. No estaba preocupado por nada ni nadie…era lo mejor que se había sentido nunca, se sentía liberado.
Se levantó lentamente, admirando la espada -su espada- firmemente sujeta en su mano, sintiendo el poder.
-Si no quieres dar explicaciones y pasar un momento incomodo vámonos ya- advirtió Crowley.
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-Déjame ir Sammy- le escribió a su hermano. Sintió algo retorcerse en su interior. Pero mentiría. Se mentiría a sí mismo.