¡Hola, muy buenas!

Hace tiempo, tuve una idea para una súper historia sobre Slenderman. Es un personaje que, sinceramente, me gusta muchísimo, y fue de hecho el que me metió en el mundillo de las Creepypastas.

E investigando y leyendo Fics/Creppypastas por Internet... Me he dado cuenta de que nadie le ha dedicado una historia a todos los mapas creados de Slender D| ¡Así que voy a hacerlo yo! :'D

La historia se llamará 'SLENDER: El último caso', y recogerá los mapas de Slender: The Eight Pages, los mapas creados de Marc Steene (Sanatorium, Hospice...) y QUIZÁS el Slender: Haunt y Slender: The Arrival.

Y digo 'quizás', porque a esos dos juegos no he jugado todavía y/o no los conozco muy bien |'DDD

Este prólogo es la primera parte de esta historia, la correspondiente a Slender: the Eight Pages.

El Mapa fue creado por Parsec Productions.

Slenderman fue creado por Victor Surge en los foros de Something Awful.

Sin embargo, el resto de los personajes, son invención mía~

¡Espero que os guste!

Prólogo: El diploma

Lunes 17 de Septiembre. Año 20xx

A pesar de las grises nubes que cubrían el cielo aquella tarde, Amy Applewood saltaba de alegría por la calle principal de su urbanización. Llevaba en su mochila una gran sorpresa para su amiga Lyra Stuart y estaba deseando llegar lo antes posible a su casa para poder enseñársela.

Amy torció a la derecha, yendo así calle abajo, hasta llegar al número 12. Una vez frente la puerta, golpeó con sus nudillos un par de veces y esperó pacientemente. Fue la misma Lyra la que abrió la puerta.

- ¡Hola Amy! - saludó la joven. - ¿Qué tal todo?

- Muy bien, gracias. - respondió ésta. - Traigo algo del centro de la ciudad.

Tras decir esas palabras, Lyra dejó pasar a su invitada con una sonrisa en la cara, imaginándose la sorpresa que Amy le traía. Fueron juntas a su habitación y allí, la muchacha sacó de su mochila un enorme diploma enmarcado. Lyra gritó de emoción.

- ¿Hemos ganado el primer premio? ¡Lo sabía, lo sabía! - exclamó, mientras daba palmadas, loca de contenta. Después le dio un codazo a su amiga. - Y tú que decías que no lo conseguiríamos.

- ¿Perdona? ¡Nunca dije eso! - dijo ella en una sonrisa.

- Entonces... ¿Éste me lo quedo yo, no?

- ¡Exacto! Recuerda que yo tengo el del año pasado.

Lyra tomó el diploma como si fuese de porcelana, con muchísimo cuidado, hasta dejarlo en lo alto de una estantería, junto a otros diplomas y trofeos y ambas se quedaron contemplándolo, embobadas.

Amy y Lyra tienen un equipo de investigación de lo paranormal. Son conocidas como "el dúo de lo místico" y eran famosas por sus múltiples teorías sobre el mundo de lo desconocido. Fantasmas, sucesos inexplicables, extraterrestres... Eran temas que apasionaban a ambas, por lo que decidieron trabajar juntas investigando. Llevan juntas desde los 15 años y Lyra, la pequeña de las dos iba a cumplir los 19 en unos pocos días.

- Ya es el tercer año consecutivo que ganamos el primer premio en el concurso del programa "Paranormal Investigation", ¿eh, Amy? ¡Y todo gracias a tu teoría sobre los entes electrónicos!

- Bueno, bueno, tampoco es para tanto. Tú me ayudaste un montón. ¡Eh, y también hay que agradecérselo a tu novio, que al ser poli nos ha dejado materiales con los que llevar a caso los "entes electrónicos"!

- ¡Claro, se lo diré a Tom! Ya verás que contento se pondrá cuando le diga que hemos ganado.

Amy se sentó en el suelo, mientras se tocaba su pelo castaño con la mano derecha. Eso era señal de que estaba pensativa.

- ¿Y ahora qué?

- ¿Cómo que "y ahora qué"? ¡Ahora a preparar el siguiente concurso! El de la Comunidad de lo Paranormal.

- ¿El del mes que viene? ¡No nos va a dar tiempo! - se quejó la chica. - Y además, ¿de qué lo vamos a hacer?

- Por eso no te preocupes. Mientras he estado mala en casa y aprovechando que las clases todavía no han empezado, me he dedicado a investigar - de repente, señaló una carpeta verde que había encima de su escritorio- ¡Y ya tengo tema!

Amy cogió la carpeta y la examinó con curiosidad. Era una carpeta un poco vieja y tenía un extraño dibujo en uno de los lados: un círculo con una enorme X roja atravesándolo. La chica abrió la carpeta para ver su contenido. Dentro había varios recortes de noticias de periódicos, todas ellas relacionadas con desapariciones misteriosas de gente. Luego había unos documentos impresos y fotografías varias.

- ¿De cuándo son las noticias? No me suena haberlas visto en la tele. - preguntó Amy, aún con los recortes en la mano.

- La más antigua es de hace 13 años. La más reciente es de hace sólo una semana. ¡Mira, mira! - le mostró su amiga, mientras tosía un poco.

El recorte mostraba la fotografía de un niño de 8 años, llamado Jeremy Sky, desaparecido hace exactamente una semana y 3 días. Un viernes por la tarde.

Lyra le quitó el recorte antes de que le diese tiempo a leer algo más de la noticia.

- Pues bien, he estado investigando estas desapariciones, comentándolas con Tom, ya que una de las desapariciones tuvo que investigarla él y buscando opiniones de otras personas en Internet. Muchas personas relacionan estas desapariciones con una entidad paranormal. ¡Y creo haber encontrado una pista que me llevará a dicha entidad!

- ¿Esto va en serio Lyra? - en cuanto su amiga dijo que sí con la cabeza, la otra sonrió emocionada. - ¡Esto se pone interesante! ¿Y cuándo vamos a investigar? ¿Y dónde?

- ... Esta vez, iré yo sola.

Amy miró a su amiga a los ojos.

- ¿Qué?

- Amy, escucha, no te puedo dar más detalles, pero si estoy en lo cierto y esta entidad "existe"... Estaré corriendo un riesgo muy grande. Por eso te pido, que esta vez, me dejes actuar a mí.

La joven Amy se quedó mirando a su compañera. Aquella mirada era seria, aquellos ojos avellanos no mentían: aquello iba muy en serio.

Lyra se dirigió al armario de la ropa, lo abrió y levantó una de las tapas de madera del suelo. Había ahí un escondite secreto del cual, extrajo una caja de zapatos. El mismo símbolo que había en la carpeta estaba en la tapa de la caja.

- ... Sé que eres muy curiosa Amy. Por eso, voy a darte esto. - y entregándole la caja, añadió. - Si algo me llegara a suceder, puedes abrir la caja. No te lo recomiendo, pero sé que si te dijera que no hagas nada si eso pasara, no me vas a hacer caso. Y una cosa más: el contenido de la caja, cuantas menos personas lo conozcan, mejor. No dejes que nadie sepa nada de lo que hay aquí dentro. ¿Entendido?

Tras unos segundos pensándoselo en silencio, Amy aceptó las condiciones a las cuales le ponía su amiga.

- ... De acuerdo.

Ambas se sentaron en el suelo, en completo silencio. Lyra fue la que lo rompió, al cabo de un rato.

- Una cosa más, no vuelvas a pasarte por mi casa hasta que yo te llame. Tengo la sensación de que algo va a pasar por mi casa y no quiero que te veas implicada.

Amy asintió un par de veces. Nunca, en estos 4 años que llevaban juntas, había visto a Lyra de aquella forma tan seria, tan decidida.

La que iba a serla más dulce de las tardes, la que iba a ser la más grande de sus investigaciones, acabaría convirtiéndose en una horrible pesadilla de la cual ninguna de las chicas iba a poder escapar.

Pero eso es algo que Amy desconocía por completo.