Disclaimer: Todo le pertenece a la genia inigualable Joanne Kathleen Rowling
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NADA MÁS
Capítulo Único
- Yo quiero amor siempre en esta vida, sentir calor de una mano amiga.
La voz de Luna cantando resonaba por la habitación, de más está decir que la afinación no iba de la mano con sus cuerdas vocales.
- Quiero tener un hogar sin muro, quiero a mi hermano sonrisa al viento…
La muchacha movía los brazos en el aire de lado a lado bruscamente, salpicando pintura por todos los sitios sostenida de quien sabe donde para poder llegar al techo.
- ¡Yo quiero tener un millón de amigos y así mas fuerte poder cantar! ¡YO QUIERO TENER…!
- ¡Luna! - Los golpes de su padre contra la puerta eran bastante fuertes - ¡Luna, mi niña, abre la puerta!
- ¡… FUERTE PODER CANTAR!
- ¡LUNA!
- ¡Estoy trabajando, papa!
La forma en que Luna decía el nombre de su padre, sin el acento al final, recordaba a una niñita italiana o a las patatas que habían comido esa mañana.
- ¿Pero te sientes bien? – Se escuchó del otro lado de la puerta.
Luna se tambaleó en la escalera y unas gotas de pintura cayeron al suelo, quedó inmóvil unos segundos antes de responder.
- Muy bien, pero no puedes entrar.
- Me alegro hija, creí que…-
Luna no dejó terminar de hablar a su padre.
- Estoy en un proyecto súper secreto y se necesita todo el poder de mi mente para mantenerme concentrada y enfocada. Cualquier error de cálculo podría terminar con una mal pincelada o conmigo en el piso.
- ¿Crees que terminarás para la cena?
- ¿Hay sopa de plimpies?
- Como siempre…
Luna sonrió ampliamente.
- ¡Entonces veré que puedo hacer! No quiero distraerme, pero el estomago ya empieza a rugir. Dibujar estas gafas es mas difícil de lo que creía.
El señor Lovegood sonrió y se alejó de la puerta. No tenía idea de lo que su hija podría estar haciendo, pero sea lo que sea, la estaba manteniendo ocupada y feliz.
Una vez que se escucharon los pasos de su padre alejarse, Luna alejó un poco la vista para observar todo su techo y a las personitas dibujadas en él.
- Orejas de Dumbo y cejas preocupadas; pelo inflado y enmarañado y boca enojada; nariz larga y cara graciosa; pecas hasta en las cejas y ojos bien oscuros; cabello negro revuelto y…. – Luna sacó la lengua de costado mientras daba los ultimos toques con el pincel que tenía en mano – …Gafas negras…
Luna inclinó la cabeza dejándola colgando de su cuello para poder mirar toda su obra, adoptando una postura totalmente incomoda aunque ella pareciera no notarlo.
El techo de su habitación brillaba con una luz extraña del mismo modo que los ojos soñadores de ella.
Tomó una vez mas el pincel y comenzó a deletrear una palabra, aquella que le había enseñado que había algo más para ella en el mundo que snorkacks de cuernos arrugados y torposoplos.
- Yo quiero tener… - Comenzó a cantar de nuevo, pero se decidió a mejorar la letra de la canción, desafinando mas bonitamente que nunca – Solo cinco amigos… y… - Luna se alejó de su obra una vez más para admirar sus pinceladas que deletreaban la palabra "amistad" – Y… y ya no pido nada más.
