Disclaimer: South Park NO me pertenece, y eso me pone tan triste, es propiedad privada de Trey Parker & Matt Stone.

Summary: ¡Dios, pero qué idiota!...Pero después de todo ese malentendido termino bastante bien…CREEK

Bien, es la primera vez que escribo un Fic estilo romantico de South Park, así que no sean malos conmigo, soy simple principiante.

Un estúpido malentendido.

El pecho me dolía, fuertes punzadas lo azotaban, mis ojos se encontraban cristalinos, me dolía, y mucho. Estaba frente a ellos, aún no entendía por qué diablos no me iba y dejaba de sufrir, pero por alguna razón mis piernas no respondían, me hacía daño, pero al parecer era un maldito masoquista.

Lo amaba, quería que fuese feliz, conmigo a su lado, pero al parecer Dios no quería eso, para nada en absoluto. ¿Por qué Dios me castigaba de esa manera? ¿Por qué?, esas preguntas eran las que tenía en mente, pero ninguna estaba respondida.

Estaba celoso, de esa maldita Testaburger, ¿quién mierda se creía para alejarlo de mí?, sencillamente dudo mucho que él sienta lo mismo por mí. No creo que sea un maldito marica, como yo. Aceptar que mi mejor amigo me gusta, me fascina, es bastante difícil, intentaba declararme, pero el terror de ser rechazado me invadía, soy un estúpido paranoico, pero eso qué. ¿Por qué diablos tuvo que ser él? ¿No podía conformarse con Stan Marsh?, pues al parecer no, estúpida puta.

Craig se veía bastante enamorado, y no podía hacer nada, el amor es el amor, no se puede luchar contra él, pero puede llegar a ser demasiado doloroso, ¡Jesucristo!, ¡Dios! ¡¿Por qué tuviste que crear el amor? ¿No sabías que sería así, verdad?

Lo que sencillamente me rompió el corazón fue ese estúpido beso que se dieron, sí, definitivamente, era un completo masoquista. Las lágrimas brotaron de mis ojos, y coloqué mi mano en el pecho intentando evadir el horrible dolor que en esos momentos me invadía por completo, solté un jadeo. Notaron mi presencia, aunque estaban tan metidos en su mundo que no se dieron cuenta de que ahí me encontraba, Craig me miro sorprendido por un momento, se separó de Wendy y se acercó a mí, retrocedí con temor y con las mejillas sonrojadas.

-Tweek…-Pronunció con preocupación, no necesitaba su maldita lástima, no ahora. Estiró su mano hacia mí para tocar mi hombro, pero de un manotazo lo alejé.

-N-No m-me toques…idiota- Mi voz se quebró y rompí en llanto, fueron sollozos, pero no dejé que Craig se me acercara, estaba totalmente sorprendido, al parecer no se esperaba esa reacción de mi parte. Me alejaría de ahí corriendo, como un torpe cobarde marica, pero antes de siquiera tener la oportunidad, Craig me tomó del brazo y me acercó a él envolviéndome en un abrazo.

-Tú eres el idiota…- susurró en mi oído- Yo te quiero Tweekers…- Apreté los ojos con fuerza, quería separarme de él, era un maldito hipócrita.

-S-Suéltame… ¿q-qué acaso Testaburger n-no te e-espera?- Comenzaba a temblar por el nerviosismo, esa era demasiada presión. Craig negó ligeramente.

-No, ¿qué te hace pensar eso?- dijo acariciando mi espalda, provocándome escalofríos.

-Y-Yo… ¿qué demonios f-fue e-eso?- Dije algo calmado, pero continuaba un poco alterado.

-¿A qué te refieres?... oh, ¿el beso?- asentí- eso fue un simple favor- me separé de él y lo mire confundido, ¿un favor? Craig soltó una carcajada mientras sonreía, era una brillante sonrisa. –Se lo debía desde hace un tiempo- dijo volviéndome a acercar a él.

-¿De verdad creíste que te dejaría?- se separó de mí y me tomo el rostro con ambas manos, me encontraba desorientado, perdido, confundido. Sonrió mientras terminaba con los escasos centímetros que nos separaban. –Yo te amo, Tweek- Dicho esto me besó, fue un pequeño y delicado beso, fue realmente dulce, pero solo fue un tiempo y nos separamos.

-Lo tomaste como un malentendido, bobo- me acarició la cabeza de manera cariñosa, me sonrojé al instante.

-L-Lo siento…- soltó una carcajada, sonreí por lo bajo, me acerqué nuevamente a él y lo besé. -Yo también te amo, Craig- Lo abrace fuertemente, sí, yo lo amaba, y él a mí.

Después de todo, fue un malentendido, un terrible, terrible malentendido, pero al parecer todo salió bastante bien, al parecer correspondía a mis sentimientos, creo que de verdad era un maldito paranoico. Pero Craig aun así me amaba.