Estoy feliz... si! muy muy feliz de regresar para esta última aventura del año, espero que la disfruten tanto como yo al crearla. Aviso que mi inspiración vino de ver por 6a vez "Lie to me" el dorama coreano el cual es uno de mis favoritos. Espero que les guste, por supuesto, la historia no es basada en ello, solo inspirada eh!
Y bien, los personajes pertenecen a Naoko Takeuchi, la historia es original mia. Sin más preambulos... vamos a lo que vamos!
MENTIRAS PIADOSAS
I
Mina escribía en la laptop lo más rápido que podía, debía entregar ese artículo antes de las 12 del día y hoy era uno de esos días en los que la inspiración no estaba de su lado. Se esforzaba trabajando duro, tenía una brillante carrera en la revista Rash, se encargaba de la sección de psicología, diariamente le llegaban casos preguntarle que debían hacer con esto o aquello, todo el tiempo le resolvía la vida a alguien y escogía algunos casos para publicar en la revista.
Del otro lado de la pared estaba su jefe, el editor en jefe Yaten Kou, un hombre muy guapo y profesional del que era amiga desde hacía ya 4 años cuando ingresó en la revista, Mina era de las pocas personas que toleraban su humor cuando algo iba mal, de hecho casi siempre se desquitaba con ella pero Mina lo mandaba al cuerno, eso era lo que hacía que se llevaran bien, mantenían el equilibrio. De vez en cuando salían con el resto de sus compañeros a tomar algunos tragos, en general tenían una buena relación, no de completa complicidad pero si de amistad relajada, de esas que sabes que compartes los buenos ratos pero sin involucrarse demasiado en lo personal.
-Mina- Yaten se asomó en la puerta de su oficina y llamó a Mina con voy baja, la vio tan concentrada escribiendo que tuvo que acercarse y poner su mano en el hombro de la chica.
-Ah Yaten, me asustaste, ¿Qué pasa?
-Me acompañas a comer hoy? Tengo una reunión el fin de semana y tengo que buscar algo que ponerme, es la boda de mi primo Taiki y debo ponerme un traje, podríamos pasar a ver unos en las tiendas del centro comercial.
-¿Y me comprarás un helado a cambio?- preguntó con unos ojos alegres y sonrisa radiante
-Hecho
-Tenemos una cita compañero- le guiño el ojo feliz.
-A las 2… ah termina ese artículo que Zoisite lo quiere ya.
-Si ya sé, ya sé
Alcanzó a entregar el artículo a tiempo y ahora estaba en revisión, se fueron a comer tranquilamente mientras mantenían la conversación alegre, Yaten compró helado para los dos, mientras veían algunos trajes y discutían si era el adecuado para el peliplata o no. Iban saliendo de una tienda discutiendo si debía usar el color negro o el gris, Yaten parecía ni siquiera haber pensado en eso y ahora tenía que agregarle la camisa y la corbata que hicieran juego con el traje, por suerte para él Mina era una fashionistanata que le ayudaría saliendo del trabajo.
Mina iba tan distraía discutiendo con Yaten sobre si la camisa debía ser azul o verde y la corbata que debía usar al tiempo que le daba una cucharada a su botecito de helado que no notó a la chica con la que chocó, ésta la miró feo.
-oye fíjate, que tonta eres
-Lo siento mucho no me fijé es mi culpa
-¿Mina? ¿Mina Aino?
Mina miró bien a la chica y abrió enorme los ojos, su corazón saltó en su pecho, tuvo la gran necesidad de salir corriendo de ahí y en lugar de eso sonrió grande y lució excesivamente alegre
-Katherin! ¿Cuánto tiempo ha pasado?
-5 años, mírate, eres toda un mujer, te ves de maravilla, has cambiado mucho, ¿te hiciste cirugías?
-¿Cirugía?- preguntó incrédula- No, claro que no, solo me arreglo mas- Mina se ruborizó, no había pasado ningún bisturí por su cuerpo pero si sabía que había cambiado mucho desde la última vez que vio a Katherin
-Ah ya veo, me alegro que hayas decidido ser más femenina, te queda mejor. Y dime sigues soltera?
"Soltera…" 5 años de no verse y lo único que le importaba a Katherin Abernathy era si Mina conseguía a un hombre o no y burlarse de ella
-¿Qué? ¿yo? ¿soltera?- Mina soltó una carcajada divertida- "y ahora que le digo?"
-Ay mina, tu no cambias, no es como si cualquiera pudiera tener un hombre, Disculpa, que grosera soy, mi nombre es Katherine, mucho gusto- Ofreció su mano al peliplata que la tomó
-Yaten Kou soy…
-Mi prometido…- interrumpió Mina
-¿Tu qué?- Katherin la miró sorprendida y parecía que de pronto la lengua se la hubiera comida un ratón.
Yaten la miró consternado ¿por qué mentía? Mina lo miró suplicante para que no la contradijera
-Mucho gusto señorita Katherin..
-Oh no, ya no soy señorita, soy la señora Abernaty- mostró su anillo de matrimonio poniendoselos casi en la cara para que lo miraran bien- mi esposo Armand está en la cafetería esperando por mi, debo irme, Mina, tenemos que salir un día de estos y contarnos todo
-¿Qué? ¿Encontrarnos? ¿Pero cómo? Tú vives en Manchester, es imposible.
-Oh, no te dije, a mi Armand lo enviaron para un proyecto muy importante y viviremos aquí en New York, al menos los próximos 6 meses, será divertido verte y tener una amiga cerca, ojalá nos veamos pronto, dame tu numero
Mina le dio su número de mala gana y se despidieron como si fueran las más grandes amigas. Mina ya no pudo seguir comiendo su helado y lo tiró a la basura, todos sus ánimos desaparecieron.
-¿Me vas a decir porque diablos dijiste eso?- Yaten estaba un poco desconcertado, en realidad ni siquiera le importó que dijera aquello pero sabía que Mina no mentía de ese modo descarado
-Es una larga historia, por favor si nos la volvemos a encontrar solo finge, no quiero que sepa que aún sigo soltera- Su cara de preocupación le dio más curiosidad
-¿Qué tiene eso de malo?
-No lo entenderías, es una de esas situaciones en las que el orgullo de una mujer es importante, tengo casi 28 y ningún novio, ella tiene esposo, es… solo que… no sé… no lo entenderías, mejor solo olvídalo- su voz de tristeza se terminó con una sonrisa que no llegaba a iluminar sus ojos- iremos por el traje mas tarde, probaremos con el gris oscuro y la camisa verde para que convine con tus ojos, también con la camisa lila para resaltar lo blanco de tu piel, seguro que te queda genial.
Ese salto de un tema a otro dejo claro que no quería seguir hablando de lo mismo.
El resto de la tarde Mina se la pasó contestando mails de los lectores de su sección y pensando en temas para el próximo artículo, debía decidirse por uno para comenzar a investigar. El tiempo pasó muy rápido.
-Mina vámonos, son las 7 tenemos que ir a comprar el traje
-¿Tan tarde?
-Ya todos se fueron, vámonos
Mina se llevó las manos a la cara y masajeó sus mejillas y sus ojos, estaba cansada y ese encuentro le había afectado anímicamente. Yaten la obligó a apagar la computadora, tomó su bolso y ella en cada mano. Ya en la tienda Yaten estaba en el probador midiéndose el traje, y la camisa que Mina escogió, mientras ella veía distraídamente algunas mancuernas en plata, pensando en que esas le combinarían estupendamente a Yaten cuando una chica se le acercó.
-Señorita su novio la espera en el probador, me dijo que necesitaba algo de usted
-Oh… ya voy…
Ni siquiera se había inmutado cuando le dijo "su novio" ya que muchas veces ya le había pasado, optó por no negar ni afirmar, no ganaría nada con decirle a una vendedora si era o no algo de Yaten.
-¿Qué pasa Yaten?- se paró frente a la puerta del probador
-Ah Mina, un favor, la camisa es muy pequeña, podrías darme una talla más grande?- habló sin abrir la puerta
-¿Estas bromeando? Pudiste pedírsela a la vendedora!
-Lo sé pero ya sabes como soy, necesito que sea tal cual como yo quiero, y ella probablemente me traiga otros 5 tipos de camisa menos la que necesito
-De acuerdo, de acuerdo iré por la camisa- Estaba por retirarse cuando la puerta del probador se abrió, Yaten estaba con el pantalón solo abrochado por el cierre y desnudo del torso, Mina se sonrojó, tantos años trabajando juntos y Mina no sabía que Yaten tenía tan buen cuerpo.
-Mina, ¿podrías traerme unos calcetines que me combinen con el traje?
-¿Qué soy? ¿tu madre?- preguntó Mina irritada para evadir la mirada que Yaten le daba al notar su sonrojo y como le miraba
-Claro que no, eres un ángel- La miró con cierta ternura que la hizo sonrojar aún más.
-Chico loco- estaba por golpearlo en el hombro cuando escuchó de nuevo una voz inconfundible
-Cariño por favor aquí no, oh Mina… de nuevo nos encontramos en el mismo día- Katherin iba del brazo con Armand, su marido jugando cariñosamente mientras entraban al probador, sin embargo ambos se notaron tensos al verla- Armand, parece que se nos adelantaron los tortolos
-Kath, no, no es lo que piensas yo…
-Hola Mina, tanto tiempo sin vernos- Armand le extendió la mano para saludarla y también a Yaten que tomó su mano indiferente
-Hola Armand, que gusto verte- lo saludó Mina con un poco de vergüenza por que la encontrara en esas condiciones con Yaten.
-Mina, por favor la camisa- le distrajo Yaten para evitar que siguiera metiendo la pata
-Claro, yo… iré por la camisa correcta- estaba roja como nunca la habian visto. Yaten por su parte solo cerró la puerta también sonrojado. Escuchó vibrar su celular, era un mensaje de Mina.
"No me incrimines y finge, te prometo que te compensaré por ello"
"¿Qué gano yo? El traje lo pagas tu?"
"¿Qué dices? Olvídalo, te compraré los calcetines y la corbata"
"Tus compensaciones no son convincentes, apresúrate con la camisa, tengo frio"
Mina llegó con la camisa correcta y los calcetines, Yaten la miró juguetonamente. En otro de los probadores se escuchaban las risas ahogadas de Armand y Khatherin pero salieron rápidamente tomándolos por sorpresa, Katherin se detuvo un momento
-Mina, podríamos salir a comer el sábado? Con nuestras parejas por supuesto, será bueno volver platicar
-Por supuesto que si, me encantaría pero ah… cariño- dijo dirigiéndose a Yaten que al recibir ese apodo se sonrojó un poco y la miró extrañado- la boda de tu primo este sábado verdad
-Si, no puedo este sábado lo siento, es una lástima- se disculpó falsamente Yaten
-No te preocupes, el siguiente sábado esta bien?
-"Maldita insistencia la de esta mujer"– pensó con desagrado Mina-si por supuesto, claro si mi Yaten esta de acuerdo- Le colocó una mano en su pecho desnudo y le dio la más coqueta de sus sonrisas, estaba viendo una faceta de Mina que no conocía.
-Si, no tengo inconveniente el siguiente- pensó que rechazar dos veces traería una tercera invitación que de volver a rechazar levantaría sospechas.
-Excelente en ese caso los dejamos donde se quedaron, te veré pronto Mina querida- Kath se despidió con un beso en ambas mejillas de Mina y Yaten, Armand solo se despidió de mano.
-Vamos cariño, metete conmigo en el probador y ayúdame a desabrochar el pantalón- Yaten tomó a Mina por la muñeca jalándola hacia dentro, ella seguía en shock, Katherin siempre tenía ese efecto en ella, la alteraba demasiado, cuando se dio cuenta Yaten la tenía dentro del probador contra la pared y con una sonrisa divertida, ella solo brincó reaccionando, lo aventó totalmente sonrojada.
-Pervertido!- Salió del probador volviendo a cerrarlo solo se escuchaban las carcajadas de Yaten- cállate eres un tonto!
Mina volvió a recorrer la tienda en lo que Yaten terminaba con el traje.
Cuando terminaron en la tienda la llevó hasta la entrada del edificio donde vivía, tal como hacía siempre que iba con ella.
-¿Entonces quieres que siga fingiendo delante de los Abernathy que estamos comprometidos?
-Por supuesto, por favor solo dame unas semanas más y luego le diré que terminamos, te lo prometo
-No me afecta mientras no digas que está próxima la boda o intentes algo así- sonó relajado y despreocupado, en realidad la mentira no le caía mal porque no le afectaba en lo más mínimo y estaba ayudando a una buena amiga.
-Muchas gracias Yaten te debo una- lo abrazó por el cuello dándole un beso en la cien.
-¿Una? Olvídalo, irás a trabajar los sábados
-¿Un mes?- Yaten hizo una mueca y negó con la cabeza- ¿Dos meses?- Hizo el mismo gesto y negó- ¿Tres meses?
-Que sean cuatro meses y estaré tranquilo
-¡¿Qué cuatro meses?! ¿Acaso crees que no tengo vida social?
-¿La tienes?- preguntó incrédulo, Mina iba a decir algo pero se arrepintió pensándolo mejor
-¿Eso está a discusión ahora? No importa, esta bien, tu ganas pero a cambio fingirás todo el tiempo que yo te lo pida
-Me parece justo, no creo que pase de un mes y este asunto estará olvidado
-Por supuesto- lo miró entusiasmada
-¿Vamos por unas cervezas el viernes?
Mina lo miró pero Yaten no notó la decepción en sus ojos
-¡Por supuesto! es más yo invito la primer ronda- dijo animada
-Esa es mi chica- dándole unas palmaditas en la cabeza.
Algún reviewsito que quieran dejar por aquiiiiii? anden anden! ¿que opinan? espero actualizar seguido jejeje la idea es que sea diario pero bueno... ya saben, una planea pero de que se haga... jeje saluditos!
