¡Hola! Hmm si esta es una nueva historia, hmm si voy a seguir escribiendo Twilight baby (obviamente ¬¬) y espero que les guste. Reviews sil vou plait!

Disclaimer: No me pertenece Twilight ni ningún personaje de este hermoso libro. PERO las canciones (o la mayoría de ellas) si son mías.

Capitulo 1: "Un día completamente normal"

Era un día completamente normal o eso creía. Un día soleado, el clima habitual de aquí en Miami. La mañana era calurosa pero eso no evitó que los mismos chicos de siempre se pelearan por una discusión tonta.

Mi nombre es Isabella Swan, Bella para todos…tengo 17 años. Mi madre es abogada y está en una de las firmas más importantes de Florida y como no tiene mucho tiempo para nosotros, nos metió a mí y a mi tonto hermano a este internado. Era prefecta de los dormitorios Norte ySur, gracias a mis sobresalientes calificaciones.

Lamentablemente, mi era evitar problemas. Me acerqué a los chicos que se estaban peleando y los jalé para separarlos.

-¡Ya basta!-grité-Vayan a sus clases ahora miso.

-Ok, Ok-los dos murmuraron al unísono.

Me froté fuerte las sienes y me dispuse a ir hacia mi clase de Filosofía pero alguien me jaló del brazo.

-Hola Bella-Mike me saludó con una sonrisa.

-Que tal-respondí.

-Bella, te quería decir que si tu...que si tu….-tartamudeó

Gracias al cielo el timbre que marcaba el inicio de las clases sonó.

-Bueno Mike después hablamos ¿está bien?

-Si claro.

Me di la vuelta y caminé hacia mi clase. Cuando llegué el salón era un hervidero de conversaciones. En eso entro el profesor pero no venía solo; la directora lo acompañaba.

-Buenos días alumnos-saludó la directora-Hoy tenemos un anuncio importante; Acaban de ingresar al instituto tres nuevos alumnos, de los cuales dos están en un año mayor que ustedes pero uno estará con ustedes durante el resto del año.

Sin saber el motivo alguno las chicas empezaron a arreglarse el cabello desesperadamente y ponerse gloss en los labios. Entonces entendí la razón: un chico nuevo.



-Den la bienvenida a Edward Cullen-la directora le hizo una seña al chico que estaba afuera para que entrara.

Edward entró poniendo sus ojos en blanco. Y las chicas quedaron con la boca abierta incluyéndome.

Edward Cullen era el chico más guapo que en mi vida había visto y el termino guapo es quedarse corto, el era hermoso. Tenía un cabello color cobre y unos ojos color verde hermosos. Era blanco como el marfil, tenía unos rasgos perfectos. En pocas palabras él era deslumbrante. Isabella Mary Swan no empieces a hiperventilar como tonta-pensé. En eso una suave brisa despeino mi cabello dejándome unos cabellos en la frente. Entonces Edward me miró como si yo tuviera algo que destacaba de todas las demás. La mirada no duró más de 5 segundos pero duró lo suficiente para que me sonrojara como un tomate. Volteé a mí alrededor y vi las feroces miradas de las demás chicas que lanzaban en mi dirección. Edward se sentó al otro lado del salón y trató de no hablar con nadie. Aun así todas las chicas lo miraban con lujuria, casi podías sentir la lujuria en el salón.

Traté de no mirarlo y obviamente fracasé rotundamente y a veces nuestras miradas se encontraban y veía sus hermosos ojos y estaba a punto de derretirme.

La clase no duró mucho y en cuanto sonó el timbre Edward salió del salón con una elegancia de otro mundo. Me quedé congelada en mi asiento, después me dirigí hacia mi siguiente clase y me encontré con mi mejor amiga Alice, ella era la prefecta de los dormitorios Este y Oeste.

-¡Hola!-me saludó con una sonrisa.

-Hola Alice.

-Oye ¿ya te enteraste sobre los Cullen?-me preguntó pero luego miro mi rostro y agregó-por tu expresión supongo que sí.

-¿Cuál expresión?-pregunté nerviosamente

-La de "oh dios mío"-se rio-parece que te interesó mucho Edward eh.

-¿Qué?-grité-claro que no…y espera un momento ¿cómo sabes su nombre?

Se volvió a reír.

-¿Qué tiene de gracioso?-le pregunté

-Oh por favor, no me digas que no escuchaste a Laureen.

-No.

-Estaba gritando "¡Edward Cullen es el chico más hermoso, más divino y pronto será mi novio!"-Alice hizo una perfecta imitación de Laureen que hizo que me echará a reír.



Seguimos platicando mientras nos dirigíamos a nuestra próxima clase y nos reímos mucho al ver las tontas expresiones de las chicas cuando hablaban de él.

Gracias a dios todas las clases pasaron rápidamente y la hora del almuerzo había llegado…estaba hambrienta y casi corrí para entrar a la cafetería pero en la entrada me lamenté haber entrado.

Edward Cullen estaba a menos de cuatro centímetros de mí y me volvió a mirar con esos ojos tan hermosos pero con furia. No empieces a hiperventilar , ¡No empieces a hiperventilar!-grité para mi interior

-Eh…lo…lo…lo…siento-tartamudeé como una idiota y salí corriendo de la cafetería.

-Bella ¿qué pasó?-me preguntó Alice.

-No nada.

Me di la vuelta y esperé afuera de la cafetería. Respiré profundamente y después comprendí que había actuado como una completa tonta. No iba a dejar que él tuviera efecto alguno sobre mí, no señor.

Con valentía entre de nuevo y me dispuse a comprar mi almuerzo y sentarme con mis amigos y con otras personas que sinceramente no tenía idea de que estuvieran haciendo ahí.

Laureen no paraba de hablar de lo sexy que era Edward Cullen y no paraba de parlotear con Jessica….no prestaba atención por dos cosas: La primera no me importaba en lo más mínimo y la segunda estaba mirando Edward Cullen que estaba platicando con, yo pienso que su hermano y otra chica, su hermana yo creo. Lo miraba con mucha atención….Bella no me digas que te gusta, puede ser guapo sí pero de seguro es como todos los hombres-una vocecita me repetía eso cada vez que lo veía. De repente Edward miró en mi dirección. Me sonrojé y desvíe la mirada pero sentí la suya en mi espalda.

Cuando me di cuenta de que ya casi se acercaba la hora para entrar a mi clase de Biología me paré precipitadamente y salí de la cafetería. Necesitaba aire ya que sus ojos hacían que dejara de respirar. Es como todo los hombres, ¡Es como todos los hombres!-grité para mi interior. Suspiré y me dispuse a ir a mi clase de biología pero la directora me detuvo.

-Bella ahí estás, te estaba buscando.

-Pues ya me encontró-respondí con una sonrisa falsa.

-Te quiero pedir un favor-me pidió.

-Sí, lo que diga.

-Quiero que le muestres el instituto a Edward Cullen.

-¡¿Qué?!-grité



-Sí, muéstrale el colegio, dile donde esta cada salón y todo eso, tu sabes.

-¿No lo puede hacer Alice?- insistí.

-Lo siento Bella pero ella está con los otros dos hermanos.

-¿Qué tal si Edward se les une?-le ofrecí.

-No se puede ya que sus hermanos están en otro edificio ¿recuerdas?

-Está bien-gruñí.

-Muy bien, búscalo en el salón de biología-me ordeno-no tendrás las últimas dos clases ya que estarás mostrándole el colegio.

-De acuerdo-murmuré.

M e fui con desgane al laboratorio de Biología, entonces caí en cuenta que estábamos en la misma clase y yo era la única que no tenía compañero….tragué saliva entonces ¡él iba a ser mi compañero! Dios no me hagas esto.

Esperé afuera del salón como me dijo la directora pero él nunca llegó. No teníamos tema nuevo ni examen así que me fui a mi habitación. Cuando llegué me dirigí hacia donde estaba mi guitarra y decidí crear otra canción.

Mientras trataba de encontrar mi inspiración pensé en Edward y empecé a tocar. (N/a: la canción es mía…yo la escribí)

Yo no quiero volverme a enamorar

Porque tengo miedo de que me vayan a lastimar

El de seguro es como los demás

Su rostro es bello

No lo niego

Pero estoy segura que él es igual

A lo demás.

¿Qué estoy haciendo? Componiendo una canción sobre el….no, no me lo debo de quitar de la cabeza. Al menos la canción tiene algo de razón: Estoy segura que él es como los demás.

-¡Bella! Qué bonita canción-me felicitó Alice-¿Es nueva?

-Eh sí pero no pienso terminarla.



-¿Por qué?-me preguntó

-No tengo la inspiración.

-Era sobre Edward ¿verdad?-enarcó una ceja.

-No-mentí pero no se mentir.

-¿Te gusta?-insistió

-Claro que no…es guapo sí-desvié la mirada-pero de seguro es como todo los demás hombres.

-Bella, ¿Cuándo te vas a convencer de que no todos son como tu padre?

Bajé la cabeza .Mi padre abandonó a mi madre ya que no quiso asumir la responsabilidad de ser papá y se fue y nunca he sabido de él. Por eso he tenido rencor hacia todos los demás hombres y no dejo que ninguno entre a mi vida, por que tengo un miedo gigantesco a que me llegan a herir a sí.

-Perdona, no debí de tocar ese tema-se disculpó Alice.

-No te preocupes.

-Bueno cambiando de tema, debiste de ver lo que hizo Laureen en el almuerzo después de que te fuiste-se empezó a reír.

-¿Ahora qué locura hizo?-pregunté poniendo los ojos en blanco.

-Cuando era hora de entrar a clases, se tropezó "por accidente" y empujó a Edward y "para sostenerse" lo abrazó-rompió a reír a carcajadas.

-Esa chica tiene problemas ¿lo sabías?

-Obviamente-se volvió a reír y me uní a ella.

Seguimos platicando cuando un tocaron la puerta con unos ligeros golpes. Abría la puerta y vi a una chica rubia muy bonita alta y escultural. Su cabello caí en cascada hasta su espalda. Era blanca como la cal, ella era la hermana de Edward.

-Hola-saludó con una voz de soprano-me llamó Rosalie Cullen y soy su nueva compañera de cuarto-.

Oh-estaba sorprendida-Me llamo Bella y ella es Alice, pasa.

-Déjame ayudarte-me ofrecí cargando una maleta pero caí al suelo, estaban muy pesadas parecía que traían piedras ahí dentro pero ella llevaba sus maletas como si no pesaran nada. Caí en cuenta que las maletas tenía rueditas… y yo las estaba cargando.



-Gracias-me agradeció.

-Se puede preguntar ¿Qué traes ahí dentro?-pregunté con un hilo de voz.

Se rió por lo bajo y abrió las maletas. Traía kilos y kilos de ropa, parecía que traían una boutique ahí dentro.

-WOW-dijimos Alice Y yo al mismo tiempo.

Nos reímos las tres pero a Rosalie le llamó la atención mi teclado que estaba al lado de mi cama.

-¿Tocas?-me preguntó y enarco una ceja.

-Si…pero no como experta...-murmuré sonrojada.

-Como de que no como experta, Bella tocas precioso-Alice me interrumpió y le di un manotazo en la cabeza.

-¡Ouch!-exclamó.

-Pues entonces toca para todas nosotras-me alentó Rosalie.

-No, es que bueno…-tartamudeé.

-Oh vamos, por favor-dijo Alice mientras me empujaba al piano.

Hice una mueca y empecé a tocar Nocturne de Chopin….de pronto olvidé que tenía a dos personas mirándome y me concentré completamente en la música. Cuando terminé la melodía, suspiré, me tranquilizaba mucho cada vez que tocaba el piano.

Escuché aplausos detrás de mí, me sonrojé.

-Gracias-murmuré.

-Sabes a quien le caerías muy bien, a mi hermano-Rosalie sonrió al ver mi expresión de confusión-Edward, creo que y lo conociste ¿no?

-Eh si…algo por el estilo.

Alice iba a empezar a hablar pero le tape la boca con mi mano antes de que dijera algo más.

- Oh me estoy muriendo de hambre, ¿podemos ir a comer?-preguntó Alice quitando mi mano de su boca con mucha impaciencia

-Está bien… ¿vienes Rosalie?-le pregunté.

-Sí gracias y por favor dime Rose-me pidió.

-Hmm bueno ¡vámonos!-nos apresuró Alice.



-Dios tranquilízate-le dijimos las dos.

Salimos hacia el centro comercial más cercano. Nos dirigimos hacia el área de comida y pedimos comida italiana.

-Bella, mira quien está ahí-Alice me hizo voltear hacia la dirección de su mirada.

Edward Cullen estaba apoyado en una barda, probablemente estaba esperando a alguien por la expresión de impaciencia de su bello rostro. Mientras que Alice terminaba de comer yo me pasé todo el tiempo mirando a Edward. ¿A quién estará esperando?-pensé, un escalofrió recorrió mi cuerpo ¿Y si espera a su novia? Que estoy pensando, sacudí la cabeza no puede ser que tenga celos, el no me gusta en lo más mínimo. Volví a mirarlo pero lo lamenté .Edward me estaba mirando, bueno apuñalando con sus ojos color esmeralda. Me puse colorada y empecé a picotear lo que quedaba de mi pasta.

Alice miró atrás de mi espalda y musitó.

-Edward Cullen te está mirando.

-¿Y?-traté de actuar con indiferencia.

-Oh vamos a quién quieres engañar-se rió-si no te importara no estuvieras roja como un tomate-me dijo Rose

-Vamos, el es como todos los demás hombres-puse los ojos en blanco-tontos, insensibles, inmaduros, bla, bla, bla.

-En algo tienes razón pero te sigue mirando- Alice se rio por lo bajo.

-Alice déjame de molestar por favor-le pedí irritada

Terminamos de comer, Alice me volvió a molestar con el asunto de Edward Cullen. Cuando estábamos subiéndonos a mí adorado audi r8-que mi madre mí había regalado en mi cumpleaños diecisiete-pensé para mí: Y eso que hoy en la mañana pensaba que hoy iba a ser un día normal.

Ok me emocioné un poquito…pero es mi proyecto y puedo hacer lo que sea ¿no? he he es broma, espero que les haya gustado. Sigo escribiendo las canciones…si alguien gusta ayudarme o tiene alguna idea mándenme un MP o un correo (mi correo están en mi perfil) bueno ¡adiós!