No sé por qué, mi corazón estaba como estallando en un millar de cosas esta tarde y ha salido este drabble. Una breve aportación al viento... Para InWhite.
Disclaimer: Kuroshitsuji y todos sus personajes son propiedad de Yana Toboso.
Atazagorafobia
Tumbado en la cama, Sebastian todavía intenta comprender; si el señorito le necesitaba, podría haberle llamado. Por algún motivo, algo parece haberle arrastrado hasta su pequeña habitación de servicio. Merodea en silencio, aún en ropa de cama; no parece haber en él una intención concreta. Camina observando las paredes, la mesa, el perchero. No gusta mucho al mayordomo estar exento de su uniforme en presencia del joven conde, aunque mayor es su preocupación por lo seguro del escondite del gato negro que ha recogido de la calle por la mañana.
—¿Hay algo tuyo en este mundo, Sebastian?
Abriendo los ojos, deja de fingir dormir y se incorpora.
—¿Milord?
—¿Conservas algún objeto? ¿Posees algo, Sebastian? —pregunta el niño mirando por la ventana, iluminado por la luna—Dime... ¿hay algo que para ti tenga valor?
—¿Ha tenido una pesadilla, joven amo?
No hay respuesta; el mayordomo se levanta, y se pone la camisa. Se acerca al señorito por la espalda, y se inclina.
—¿Puedo hacer algo por usted?
—Alguna vez, sólo alguna vez, podrías contestarme —enuncia el conde, con un tono cuya mezcla, más que cansancio o dolor, refleja una extraña resignación.
No merece la pena explicarlo; ¿verdad? Hablarle de pesadillas a un demonio no tiene sentido.
En el fondo da igual.
—Le tengo a usted, milord —susurra entonces tan servicial voz a su espalda.
Gira y encuentra a Sebastian arrodillado. Con una sonrisa resignada, y la sensación de que el hielo sigue poseyendo su corazón, toma el rostro de su mayordomo entre sus manos con cuidado, y apoya su frente contra la fría piel del demonio con delicadeza. Exhala lentamente, sintiendo el vacío.
—Qué bien mientes, Sebastian... —dice con voz cálida.
Y el mayordomo queda sorprendido mirando la puerta, cuando su amo se va sin decir nada más, mientras el conde camina por los enormes y vacíos pasillos, guardando con celo su mayor debilidad para con su mayordomo.
Su mayor secreto.
Su atazagorafobia.
Atazagorafobia - Fin
Aunque lo dice en el resumen, la atazagorafobia es el miedo al olvido; miedo a olvidar, ser olvidado o ignorado. De algún modo escribí esto con la intención de que Ciel quiera significar en el fondo algo para Sebastian... Quién sabe, dejo el sentimiento a vuestra libre interpretación.
Gracias por leer.
Bou.
