Había momentos en que Billy Joe Cobra, anhelaba y disfrutaba el silencio espectral que despedía la mansión, más cuando jugaba uno de los nuevos juegos como Destiny en la nueva Xbox One de Spencer la cual a un que fuera increíble, era poco apreciada por el castaño que prácticamente vivía endiosado en su computadora con sus programas de edición y filtros para sus películas de terror.
Hombre esto está para morirse – inquirió el fantasma, antes de soltar una risa a un carcajada ante sus propias ocurrencias.
En realidad el juego era absorbente tanto que no había prestado tanta atención a Spencer cuando había salido en la mañana de la habitación con una sonrisa de oreja a oreja, hablando de algo que en realidad no recordaba si le había prestado atención o no.
No supo cuánto jugo hasta que un portazo en la puerta de la habitación que compartía con el castaño.
Hey Bro – saludo sin voltear a ver a su primo desde el sillón.
Tomare un baño así que déjame solo – replico Spencer encerrándose en el baño al instante que dejaba en claro su petición azoto la puerta con tanta violencia que el fantasma dejo el mando a un lado y se levantó hasta llegar a la puerta del baño.
¿Estás bien? – pregunto a la puerta, Spencer había sido demasiado claro, varias veces en su privacidad.
Déjame solo – gruño el castaño desde adentro.
Como quieras – gruño el fantasma mirando con enojo la puerta después de todo, mucha gente se viera vuelto loca al tener a Billy Joe Cobra preocupado por su persona – idiota – gruño para asi y volvió a jugar su videojuego.
Sabía que la carrera cinematográfica implicaba retos incluso traicionaría su condigo moral, observo de nueva cuenta su mano, suspiro pesadamente dejándose caer dentro del agua, había hecho lo que en realidad había hecho, se cuestionó de nueva cuenta, despreciándose un poco cada vez mas.
Te desprecio – fue lo único que dijo al aire, mientras intentaba alejarse de toda su realidad y eso incluía a cierto fantasma que se alojaba en su habitación y posiblemente rompería el mando del Xbox One de continuar jugando tan violentamente con él.