Hola a todo el mundo, les dejo este pequeño, pero contundente(?) fic. Si soy sincera, lo tengo escrito desde que publiqué "Falta de respeto", pero no me había animado a subirlo y hoy, en mi clase de anatomía, tenía el pc a mano y me dije: "¿Por qué no?", lo busqué y aquí lo tienen :D

Espero que les guste.

Disclaimer: Ojalá tuviera la creatividad para idear a estos personajes, pero solo me alcanza la materia gris para estas historias... qué se le va a hacer :/


Miradas

Se miraban fijamente a los ojos. Una mirada que ninguno estaba dispuesto a bajar.

La mirada era tan profunda y tan intensa que los atravesaba. Traspasaba cada capa de piel, cada capa de la coraza que ambos habían forjado a su alrededor con el pasar de los años, con las experiencias que habían vivido.

Estaban tan cerca el uno del otro que sus pechos se rozaron. Ese ínfimo contacto les hizo estremecer. Un jadeo de sorpresa se escapó de los labios del más bajo y el rubio contuvo la respiración.

No bajaron la mirada.

Nadie les veía. Estaban completamente solos en ese viejo gimnasio.

No importaba como habían terminado tan cerca el uno del otro, solo importaba lo que ambos querían, lo que ambos deseaban y ninguno se atrevía a hacer.

Con la mirada alzada para alcanzar los ojos de su acompañante abrió la boca para decir alguna mordacidad de las suyas y acabar con ese tenso silencio en el que se encontraban, pero no pudo articular palabra alguna. Sus ojos viajaron hacia los labios del más alto y de vuelta a sus ojos color cielo.

Al notar la acción del más bajo, sonrió confiado y pasó un brazo firmemente por su cintura y le apegó a su cuerpo con fuerza, con pasión, quitándole la respiración. El moreno posó sus manos en los brazos del rubio. Su otra mano fue a parar a la mejilla del genio, que cerró los ojos un momento por el placer de aquel leve contacto.

Sus miradas se conectaron una vez más.

Poco a poco sus rostros se acercaron, mas no se besaron aún.

Sus miradas permanecieron conectadas un poco más.

―Voy a besarte. ― Dijo el rubio con la voz ronca y profunda por el deseo contenido.

―No vas a hacerlo. No te atreverías. ― La voz del genio se escuchaba igual de ronca, pero con un tinte de desafío.

Sin ningún aviso el rubio descendió un poco más su rostro y posó sus labios sobre los del moreno. Sus labios cálidos envolvieron tiernamente el labio superior de su contraparte y con la punta de su lengua rozó el labio apresado. Le sintió estremecer en sus brazos.

Se separó apenas un par de milímetros. Ladeó un poco la cabeza y, en un ángulo perfecto, enlazó nuevamente sus labios. Un beso sutil, tierno y lleno de amor. Fue correspondido de la misma forma hasta que sintió la lengua del más bajo contra su labio inferior. Lentamente sacó su lengua hasta rozar la punta con la del otro. El roce fue glorioso. Les hizo jadear. La temperatura subió y la cordura de perdió.

El beso subió de intensidad. Sus labios se rozaban con fuerza, con pasión, con vehemencia. Sus lenguas se buscaban con necesidad, se encontraban y se acariciaban con ferocidad.

La mano del rubio viajó de su mejilla hasta la nuca para acercarle más a él; mientras que sus brazos subieron hasta el cuello del más alto atrayéndolo a su altura.

El beso era demandante y no querían dejarlo. El aire comenzó a escasear y se vieron obligados a separarse lentamente.

Sus miradas volvieron a conectarse. Sus ojos oscurecidos por la pasión del momento. Sus respiraciones agitadas, sus manos aferradas firmemente al otro.

―Si me atreví. ― Dijo el rubio con un tinte triunfante y una sonrisa de medio lado.

―Y pagarás por ello. ― Esta vez fue él quien inicio el beso. El segundo de muchos otros.


Si les gustó, pueden dejar un review, me encanta leer sus comentarios :)

Nos leemos pronto.

Besos.

Bye :D