¡Hola!

Este es mi primer fic, bueno el primero que publicó, llevo años leyendo historias y escribiendo, pero por fin me di el valor de publicar, espero sea de su agrado.

Nota: los diálogos estarán entre guiones, y los pensamientos serán escritos entre comillas (") y en cursiva.

Declaimer: Descargo toda responsabilidad los personajes utilizados en este Fic son propiedad del gran Akira Toriyama.

"A veces la vida nos pone en situaciones difíciles, el camino sentimos no es el correcto, te preguntas porque el destino es cruel, la vida da muchas vueltas y el fénix siempre resurge de las cenizas."

Mi nombre es Bulma Briefs, mi nombre es Bulma Briefs, mi nombre es Bulma Briefs.

Me lo repetía cientos de veces, para no olvidar. Si olvidaba quien era ahora sí todo estaría perdido.

Tengo 19 años, hija del reconocido Dr. Briefs y Bunny Briefs, me gusta pensar que heredé mi gran intelecto y facilidad por la ciencia de mi padre, nos unen los mismos intereses, pero sé que no es verdad, pues no soy su hija biológicamente… Fui adoptada a mis cortos meses de vida. Un extraño suceso, mi padre me encontró en medio de la nada.

Literal, él se presentó a estudiar una discrepancia que se había presentado en el campo magnético de la Tierra en esa zona. Mi padre me contó que no encontró nada extraño excepto a mí. Buscaron a mis padres sin encontrar nada, ellos se encariñaron conmigo y decidieron adoptarme, lo que considero ha sido lo mejor que me ha pasado y agradezco a Kamisama siempre.

Desde pequeña me di cuenta que no era normal o igual a los demás niños, hacia cosas que otros no, mis padres también se dieron cuenta, después de entretenerme con aprender a leer, multiplicar, dividir, hablar 2 idiomas, entender la estructura anatómica del cuerpo humano, y aprender a estabilizar cationes a los 7 años mi padre ya no sabía qué hacer conmigo. Cierto día mi padre me presentó a un viejo amigo, el maestro Roshi, mi padre se refería a él como un héroe, maestro de artes marciales. De inmediato me interese en él y me propuso entrenar, ¡Si entrenar! Así lo hice, desde los 7 años entrené artes marciales y me di cuenta que era buena en ello, tenía potencial, el maestro también se dio cuenta. Tenía gran fuerza, habilidades y aunque muchas veces me costaba aprender las cosas correctamente debido a mi comportamiento un tanto infantil, hice mi mayor esfuerzo para aprender.

No importaba la razón siempre había cosas diferentes en mí, en el momento en que aprendí a controlar el ki, me di cuenta de que mi fuerza era completamente patética… Superficialmente pues realmente yo era muy fuerte, aunque nunca lo aparente.

El maestro Roshi me dijo que era una ventaja ante el enemigo, nunca se esperaría que mi fuerza fuese la que es. Durante aquellos años viví decenas de aventuras, conocí a mis mejores amigos, Krilin, Puar, Tenshinhan, ( mi tiensito ), Oolong, Launch y el amor Yamcha, ellos también eran discípulos del maestro Roshi, juntos pasamos muchas aventuras, nos gustaba participar en los torneos los "Tenkaichi Budokai", gané tres, fueron días maravillosos, Pero ya no más.

Recuerdo cuando supere al maestro Roshi, me dijo que ya no tenía más que enseñarme, tenía 17 años. Fue un día horrible, regresé a mi casa junto con Yamcha y construí una cámara que aumentaba la gravedad 100 veces, en donde entrenaba unas horas al día, mis aventuras seguían y mi trabajo científico también.

Pero todo eso ya no importaba nada, nada, todo estaba perdido, no importaba que tan fuerte era, no pude protegerlos.

Recuerdos malos; Siempre me fascinó el viajar al espacio, motivo por el que construí una nave espacial. Estaba muy emocionada, mi padre igual, tarde unos dos meses en construirla y el día en la que la probaría había llegado, partiría sola en la nave, realmente era un vuelo y despegue de prueba estaría a sólo unos kilómetros de la Tierra, eran pruebas para la nave por lo que calculé estaría dos días arriba, que equivocada estaba…

El día llegó me levanté temprano 5:00 AM con toda la emoción del mundo, desayuné junto con mis padres y Yamcha, del cual me despedí pues tenía un entrenamiento con Tenshinhan temprano.

–Nos vemos en dos días– Regrese a la cocina, mi padre me miró con aires de grandeza y me dijo que era hora, una sonrisa se dibujó en mi rostro, asentí con la mirada y subí por mis cosas.

Tomé mi estuche de cápsulas aquella que llevaba en mis aventuras, tenía todo lo necesario, en realidad demasiadas cosas, pensaba en dejar algunas pero algo en mi conciencia me decía que no lo hiciera, salí del cuarto y caminando en el pasillo una pequeña risa salió de mi al pensar que llevaba mi cápsula con ropa y armas de entrenamiento, me reí pues pensé en que jamás las utilizaría en la nave por esos dos días, que equivocada.

Llegue al área de investigación e ingeniería de la corporación ahí estaban mis padres, me despedí de ellos y les dije que no tardaría, subí a la nave he inicie el conteo para el despegue, todo estuvo bien, cuando atravesé la atmósfera me sentí genial, lo logré me dije. Una fantástica emoción.

Cuando llegue a un punto correcto me contacte con el área de investigación de ingeniería, todos reían y bailaban, lo logramos, lo logramos llegamos al espacio, mi padre me felicitó, fue muy lindo.

El segundo día mientras analizaba el mecanismo de aceleración de la nave, una alarma sonó, un ruido estridente, pensé en las posibilidades, 1. Algo se desconectó 2. Algo dejo de funcionar y 3. una amenaza externa, corrí al control y me di cuenta de que una lluvia de asteroides se acercaba, entre en pánico podía mover la nave y esquivar, pero en el momento que vi la trayectoria de aquellas rocas algo se rompió en mi corazón, la angustia se apoderó de mí. Impactarían en la Tierra en cuestión de minutos, todo acabaría rápidamente, inicie curso, intenté una y mil veces contactarme con mi padre, pero no lo logré, no pude.

No sé cuánto tiempo pasó, la nave se sacudió, caí, me golpeó la cabeza, cuando me levanté, vi como la realidad me golpeaba de una manera muy agresiva. La Tierra había sido impactada por cientos de asteroides, todo había terminado. Lloré por horas, estaba tirada en el suelo llorando desconsolada, pensaba en todas las posibilidades, en que los satélites de mi padre detectarán los meteoritos y escaparán. Realidad como escaparía si yo era la única que tenía una nave.

Paso tiempo, tal vez más de un día, abrí los ojos con el mayor cansancio que había sentido en mi vida, me senté pues no tenía fuerzas en las piernas, pensé en todo lo que había pasado volví a intentar comunicarme a la Tierra y nada, nada.

Y ahora qué hago era la pregunta, llegué a pensar en darme por vencida, después de todo ya no tenía nada, pero no, esa no era la gran Bulma Briefs, me levanté de la silla y pensé en todas las posibilidades, me dolía mucho, pero si seguía estando yo era por algo, por algo Kamisama me había dejado con vida, y averiguaría la razón.

¡Tenía por lo menos energía para viajar por seis meses perfecto!, pero lo importante mi energía, mi sustento, en la nave tenía comida para una semana y las cápsulas tenía comida y agua para 20 días.

Plan llegar a un planeta habitado o con recursos, encontrar un nuevo hogar y mi destino, muy sencillo…. Luego pensé en que cerca de la tierra no había ningún planeta con recursos sólo grandes rocas sin vida, no sabía dónde estaba, en el momento en que puse la nave en movimiento para esquivar la lluvia de asteroides ni siquiera me fijé hacia dónde se dirigía, miré el radar que me indicaba que en miles de miles de kilómetros no había nada, ¡Nada solo el infinito espacio! Sólo quedaba seguir y tener la esperanza de pronto encontrará algún cuerpo celeste en el cual pudiese aterrizar, pasaban los días, suministrando la comida. Todo estaba bien menos yo, estaba deprimida los recuerdos me bombardeaban y eso me debilitaba.

Pasaron 27 días, comida aún había, pero el agua, sólo quedaba agua para dos días, estaba muy mal y mis esperanzas morían cada vez, los malditos recuerdos, mis padres, mis amigos, Yamcha, ¿Porque a mí? ¿Que había hecho mal para sufrir de esa manera?

Revise el radar, tenía horas que no lo hacía, al posicionar mi vista en aquella pantalla lo vi, el radar me indicaba la proximidad de un sistema solar con al parecer 16 planetas, me emocione, 12 días de distancia. Problema solo me queda agua para dos días "Tengo que resistir".

Fijé curso al planeta más cercano, los días pasaban y yo me debilitaba, ya no había comida, ja.. hace una semana que no probaba alimento, acostada en la cama improvisada de la nave me reí, casi con locura pues me di cuenta de que tal vez también era diferente en ese sentido, en que podía resistir más que una persona normal sin comida y agua, una cosa más que agregar a la lista. Me sentía terrible ya no había fuerza en mi cuerpo, faltaba un día para poder llegar a aquel planeta. Y ni siquiera sabía si el planeta podía tener recursos. Cerré los ojos no sé por cuánto tiempo tal vez un par de horas…

Me desperté por un estridente ruido, una vez más la alarma, las mismas tres posibilidades y otra vez una amenaza externa, cuando miré los controles que me indicaban que una nave se acercaba a mí no supe cómo reaccionar solo me sorprendí. Luego un fuerte golpe, ellos golpearon la nave, caí, y me desmayé.

Ahí las cosas se vuelven confusas, más golpes, y ruidos, luego la compuerta de extracción se abrió y creo que tres seres entraron. Intenté levantarme, decir algo, verlos, pero simplemente no pude, sentí frío.

Escuchaba voces, me golpearon o movieron, no estoy segura.

Despierto no sé cuánto tiempo después, para darme cuenta que ya no estoy en mi nave, que mis pies están atados y una de mis manos es aprisionada por lo que parecen ser unas esposas sujetas a la pared, estoy en una sala con mucha luz blanca, en realidad parece un pasillo, mis ojos se cierran y escucho pasos acercarse.

Una voz se dirige a mí un hombre creo, pues es una voz muy grave.

–Vaya mujer por fin despiertas tienes muchas cosas que explicar ¿Quién eres? ¿Qué buscabas en el cuadrante 23yx?, de que planeta vienes, ¡Habla….!

Sentí un golpe en las costillas, un dolor agudo y otra voz

–Nappa déjala en paz, no ves que apenas y puede respirar– esta voz era un poco más cálida.

–Escúchame bien Kakaroto a mí no me dices qué hacer, ella es nuestra prisionera y haré lo que me plazca.

–Las órdenes de Vegetasei son claras, llevarla con vida... está muy débil la llevaré al tanque de curación, si no lo más seguro es que no resista el viaje.

–Hmp, Haz lo que quieras Kakaroto, solo me interesa toda la información que necesitamos, después de todo es tan débil que no nos puede dar problemas.

Ante estas palabras Kakaroto desató a Bulma y quitó de su mano aquel aprisionante cerrojo, la tomó entre sus brazos y la llevó a una sala de aquella nave, en donde la desnudo y la metió en una gran cápsula con una mascarilla en la cara, donde en segundos un líquido algo espeso de un color azul la rodeo.

No sé qué pasó, después de ese golpe, voces, si dos personas hablando y luego sentí que me liberaban, intenté moverme, pero no lo logré, luego sentí que unos brazos me cargaban, sensaciones extrañas y frío mucho frío.

–De verdad que eres una intriga– Habló en voz alta Kakaroto dirigiéndose a la gran cúpula transparente –Espero que estés bien regresaré en un rato, y luego nos dirás todo.

Las horas pasaron y el chico de cabello alborotado regreso a aquella sala, presiono unos botones y el líquido de la cápsula se fue drenando, abrió la compuerta y cargo a la chica, la acostó en una especie de camilla algo intrigado.

"Valla ya debería estar consciente… Es muy bonita" La cubrió con una manta. –Mujer despierta, mujer ¿Acaso estás muerta?

Seguía sintiendo frío, y otra vez esa sensación de que alguien me cargaba, sentí que me depositaban en una superficie algo blanda, escuché que me hablaban y me movían, entendí lo que dijo, –Mujer ¿Acaso estás muerta?– Entonces reaccione, abrí los ojos muy rápido y lo vi, era un chico muy parecido a un humano en primera instancia pensé que era uno.

–No estoy muerta– Hablé rápidamente a un sin comprender –¿Qué fue lo que pasó? ¿Do..donde estoy?– Mire hacia los lados y me senté, me di cuenta de que estaba desnuda y me asusté, grite y me cubrí con aquella manta.

El muchacho enmarca un puchero en su rostro aquel grito había sido demasiado agudo –Cálmate no te haré nada, mi nombre es Kakaroto soy soldado de las fuerzas sayayin de Vegetasei, estas una de las naves de recolección y eres nuestra prisionera.

–¿Que?– "¿Sayayin? ¿Nave? ¿Prisionera?", demasiada información, lo miré tenía un semblante fuerte pero en sus ojos transmitía algo conocido, no entendí que era y luego me sonrió.

–Estas confundida debes comer traeré algo– Se veía indefensa sentí algo, no sé qué fue, curiosidad, empatía, me dirigí a la salida y me habló.

–Espera yo, yo… Necesito saber qué hiciste conmigo, ¿Acaso me forzaste a estar contigo?– con una frustración increíble pues necesitaba saber, estaba desnuda y bueno fue lo primero que pensé, "me hicieron algo, acaso fui violada, no kamisama por favor no"

–Jamás haría algo así. Tu ropa está en aquella mesa, si no la llevas puesta fue porque estabas en la cámara de curación– Señalando la gran cápsula y salió.

Bulma se levantó cubriéndose con la manta, se preguntaba qué había pasado, ya no estaba débil, en realidad su cuerpo se sentía bien, se vistió y vio aquella sala, lo primero que se le vino a la mente, "una sala médica, si eso debe ser" Por curiosidad se acercó a aquel aparato en donde el chico le dijo que estaba, su curiosidad científica de daba por analizar las cosas, no podía evitarlo al fin y al cabo no todos los días era tomada como prisionera por quién sabe quién, en quién sabe dónde. Diablos tal vez ya estaba muerta.

–¿Qué haces?

–Ahh yo, yo, lo siento es solo que sentí curiosidad, soy científica y esta máquina es impresionante– Estaba nerviosa –Mi nombre es Bulma Briefs– Se acercó dándole la mano y sin recibir un saludo, regresó su mano al costado "Bien hecho Bulma acabas de revelar tu nombre y fuiste cortes, vamos Bulma te dijo que eras su prisionera", –perdón

–Ven hay muchas cosas que debes de explicar, Sígueme, no intentes nada o te arrepentirás

Caminamos por un pasillo largo, y llegamos a una gran sala donde había otros 2 hombres

–Está recuperada dice llamarse Bulma, Bulma, Bulma...

–Briefs– Interrumpí y me di cuenta la mirada fulminante que me mandaron los otros 2 sayayin

–Si eso Bulma Briefs y dice ser científica

–Científica hee…– Mencionó el hombre más viejo y fornido del lugar, –¿Que hacías en el lugar del cuadrante 23yx? ¿Qué buscabas? ¿Trabajas para Freezer?

–¿Que? ¿Que…? Yo no sé de qué me hablas, no sé quién es Freezer

–Vamos Nappa deja a la hermosa criatura, no sabe ni dónde está– Menciono otro de ellos era un hombre alto con pelo largo, se acercó a mí muy rápido, muy cerca, me incomode iba a alejarme pero no Bulma Briefs no tenía miedo, no se doblegaría ante nadie, lo miré a los ojos con algo de rudeza, él lo noto.

–¿Qué pasa mujer no te gusta mi cercanía?

–Raditz, déjala, hay que seguir las órdenes

Sentí que volvía a ser yo, sentí algo de incomprensión, pero las palabras salieron de mí –Que irrespetuosos son, les he dicho mi nombre Bulma Briefs científica de la Tierra, la mente más brillante y hermosa que hay– "Mmm creo que lo último salía sobrando"

–Valla que tienes agallas mujer para hablarle de esa manera a soldados sayayin.

"Sayayin esa palabra volvió" con audacia una vez más –¿Que son los sayayin?– Todos rieron

–Nosotros somos sayayin, la raza guerrera más fuerte del universo– Los observé con cuidado luego lo noté, "O por kami ellos, ellos tienen cola", Me sorprendí y ellos volvieron a reír.

Raditz –Así que una humana, mmm nunca oí de ellos, te pareces a nosotros solo te falta algo

Me rodeo inspeccionando cada parte de mi cuerpo, lo noté y eso me enfureció –Deja de hacer eso ten un poco de educación– Luego una fuerza me había arrojado a uno de los muros, fue tan rápido, no tuve tiempo de reacción, me levanté tan rápido como caí.

–¡A mí no me hables de esa manera mujer entendido! Aquí eres prisionera y te comportas como una, ahora Kakaroto llévate a esta mujer a una de las celdas que se le quite ese aire de grandeza que tiene.

El sayayin más grande me tomó del mentón –Mujer tienes muchas cosas que explicar cuando lleguemos a Vegetasei pasarás a explicar todo al rey y luego te pudrirás en una prisión, aunque si tienes suerte tal vez se compadezcan de ti y te mandé como una puta.

–Kakaroto llévala a tu cuarto y mantenía en raya, en una hora deberemos de encender el estado de hibernación, tú también Raditz entendiste

–Si

–¿Y tu Kakarotto?

–Si Nappa, sígueme

"Acaso escuche bien una puta" Me sorprendí demasiado, era lo último en lo que pensaría, prefería morir, inmersa en mis pensamientos y luego la orden –Sígueme– Odiaba que me dieran órdenes pero no estaba en poder de reclamar, luchar con ellos no era una opción, eran fuertes, podía sentirlo y yo no estaba muy bien, tenía que mantenerme como él dijo a raya, hasta saber más información y encontrar una solución. Salimos de aquel cuarto, una vez más por el pasillo blanco, poco después nos paramos en frente de una puerta, introdujo un código en una especie de teclado y la puerta de abrió.

–Bulma entra

–¿Bulma, me llamaste por mi nombre?

–¿Que no era eso lo que querías?– Con una mano detrás de la cabeza y en tono de duda

Asentí efusiva –Si muchas gracias Kakaroto

Entramos a la habitación, sencilla algo amplia –Puedes sentarte en la cama, como oíste me dieron órdenes de aprisionarte, pero no eres una amenaza, nos quedaremos aquí por una hora luego encenderé el gas de hibernación, llegaremos a Vegetasei en una semana– "Valla tiene unos ojos hermosos"

–Si gracias– "mmm gas de internación" –¿Que es el gas de internación?

–Pues es un gas que te duerme, lo usamos en los viajes largos, nos duerme y así no gastamos energía.

–Eso es muy interesante, oye te puedo preguntar algo

–Si

–¿Es verdad que me pondrán en un prostíbulo?

–No lose, nunca habíamos capturado a una hembra, eres curiosa, hace días que encontramos tu nave decidimos atacar, pues parecía una de las naves de Freezer, no hubo respuesta del ataque por lo que decidimos investigar, abordamos y ahí estabas tú, tirada en el piso.

–¿Que hicieron con mi nave?

–Está en el hangar de la nave, la revisamos nunca habíamos visto algo parecido, hay muchas cosas extrañas.

·Oye, sé que talvez te estoy incomodando con tantas preguntas, pero podrías decirme ¿Quién es Freezer?

–Freezer es el ser más despiadado que hay, un ser cobarde, se hace llamar emperador del universo, es extremadamente poderoso, tiene un enorme ejército, el va a los planetas y los purga, saca todo lo bueno que hay y luego los vende y esclaviza a aquellos que sobrevivieron, es nuestro enemigo, pero también tenemos que seguir sus órdenes pues si no nos eliminará… ¿Tu no trabajas para él cierto?

–No, no, yo jamás, no tengo el coraje para hacer eso– Se acercó a mí y se sentó a mi lado, me sonrió y me sentí bien, los minutos pasaban y platicamos. Me contó un poco de los sayayin, me dijo que junto con Nappa y Raditz que resultó ser su hermano, eran parte del escuadrón élite de la corona, servían al rey, al príncipe Tarble y al príncipe heredero Vegeta…. "Vegeta, qué nombre tan curioso"

La hora transcurrió, yo también le conté sobre mi, bueno puntos clave no le iba a decir que era peleadora no era conveniente. Le dije lo que me había pasado, que había perdido todo, sentí como él con sus ojos y aunque no me lo dijera me decía, o más bien me transmitía compasión y esperanza. Una alarma sonó.

–Es hora de encender el gas

–Me gustaría seguir platicando, hace tanto tiempo que no hablaba con alguien… "¿Porque dices eso Bulma? Ya cállate"

–Son órdenes, debo cumplirlas, pero… Yo también quiero seguir platicando… Los demás ya encendieron el gas de hibernación, ya están dormidos… Está bien nos quedaremos despiertos unas horas más– Con una sonrisa en los labios, yo también sonreí.

Seguimos platicando, yo preguntaba él contestaba y viceversa, en pocas horas me di cuenta que el era buena persona, sentí confianza en él, estábamos los dos sentados en la cama y mi estómago rugió me apene un poco, él se rió, se levantó y me dijo.

–Sabes yo también tengo hambre, ven vamos a comer– Acercó una mano a mí, me estaba invitando a que tomara su mano y lo siguiera, que lindo pensé, acepté su invitación y nos fuimos a otra sala en donde había una mesa, me senté, me dijo que esperara, regreso con mucha comida, en realidad demasiada, me sorprendí, pero cuando empezó a comer todo tenía sentido.

No se miraba muy apetitosa la comida, pero no estaba en posición de quejarme. La probé, en realidad no sabía mal "Ay Bulma qué tal si te está envenenado, aunque él también está comiendo", Yo terminé de comer mucho antes que él.

–Comes muy poco

–Estoy satisfecha, gracias– Me sonrió y siguió comiendo "Que gracioso"

Regresamos a su habitación, abrió la puerta y me invitó a pasar con la mirada, entre y le pregunte que si podía asearme, me sentía algo sucia, eso es muy incómodo.

–Si, adelante es aquella puerta– Señalando al muro continuo.

–Oye, sé que te estoy pidiendo mucho, pero crees que pueda ir a mi nave por ropa para cambiarme

–Mmm no sé si esa es buena idea tal vez intentas escapar

Una sonrisa se dibujó en mi rostro al imaginarlo, pero no era el momento para ello -Tú puedes ir conmigo

–Bueno está bien… Vamos– Me habló y me ofreció su mano, bajamos al piso inferior de la nave por una escalera en forma de caracol, ahí estaba mi nave y a los lados se encontraban tres esferas blancas también parecían naves, entramos y tome mi estuche de cápsulas. El me miro.

·¿Qué no venías por ropa?

–Si aquí está– Abrí mi estuche, saque una cápsula y se la mostré. El me miro con una cara de incomprensión.

–No es verdad estoy seguro de que eso no es ropa

Sonreí –Ven te mostraré– Bajamos de la nave, presione el botón, –Esta es una cápsula, ¿Recuerdas? De las que te conté que inventó mi padre– Después de que el humo se disipara mi armario apareció.

El se sorprendió bastante –Vaya Bulma eso es increíble

Sonreí, tomé unos jeans sencillos, una blusa blanca, mis botas azules y una chaqueta, volvía a encapsular el armario y nos fuimos, ya en su cuarto entre al baño y empecé asearme.

Mientras tanto en el cuarto, "Valla que es increíble, esa es una muy buena tecnología… es buena persona espero que no le hagan nada", la puerta se abrió y ella salió "se mira hermosa"

Salí, ahí estaba sentado viéndome directamente, me sonroje un poco, y luego sentí mi cansancio bostece tenía sueño, el lo noto se paró, se puso enfrente de mí mirándome directo a los ojos –Veo que tienes sueño, puedes dormir en la cama.

–Yo.. yo.. No te preocupes dormiré en el suelo, no es un problema, no quiero quitarte tu cama– "Que lindo me ofreció su cama"

–No, duerme tú en la cama, yo dormiré en el piso, no es la primera vez que lo hago, además activare el gas de hibernación, nos despertaremos una hora antes de aterrizar.

Asentí con la cabeza, tímidamente me acosté en la cama, él se acostó en el piso, le di la almohada no quería tomarla, pero sonreí, él también, "Qué mal, es su cama y él está acostado en el piso"

–Entonces dormiremos por seis días

–Si

El sueño me venció estaba cansada, soñé algo no recuerdo que era, cuando sentí que una luz se hacía presente en aquel lugar abrí los ojos, me senté y giré la cabeza buscando a Kakaroto, luego la puerta del baño se habría y lo ví salir, sólo con una toalla en la cintura, no pude evitar no verlo y ruborizarme, de verdad tenía un increíble cuerpo completamente trabajado, y esas gotas que resbalaban en su pecho. "O por kamisama, es increíble, disimula no lo veas directo"

–Hola Bulma veo que ya despertaste, sabes estas muy roja

"Ay no… por kamisama" –Amm si, si a de ser que dormí por tanto tiempo

–No creo solo dormiste como unas diez horas, yo no active el gas… Creo que podemos esperar hasta llegar a Vegetasei

–De verdad "No prendió ese gas, será que quiere estar conmigo"

Una sonrisa involuntaria una vez más, y luego se apartó y ví ese movimiento ¡Iba a quitarse la toalla y cambiarse! ¡Frente a mi! Instintivamente grite

–¿Qué? ¿Qué pasa?

–No piensas desnudarte enfrente de mí, o si "ay Bulma para que hablas"

–Si eso si es verdad, ahora vuelvo– Entre al baño a cambiarme cuando salí ella ya estaba fuera de la cama, acomodando las sábanas, "Que digo, ahora, Bulma quieres comer, no Bulma vamos a desayunar" –Vamos a comer

–Si

Los días pasaron rápidamente, me divertía mucho con Kakaroto era alguien divertido, en las cápsulas traía varias cosas para entretenernos, intenté enseñarle a jugar baraja y damas chinas, pero me di cuenta de que era muy despistado, traía un ajedrez, pero…. No mejor no.

Conversábamos bastante, ella intentaba enseñarme juegos de su planeta no les entendí eran muy difíciles, me gustaba oírla reír, ella era diferente a cualquier persona que yo conociera. Ya habían pasado 6 días era tarde y al día siguiente según los cálculos estaríamos entrando a la atmósfera de Vegetasei.

Estábamos sentados en la cama, –Oye yo ya te conté sobre mis amigos, tu no, ¿Quieres contarme sobre los tuyos?– Habló Bulma

"¿Amigos? ¿Amigos?" -Yo no tengo amigos, eso no existe en Vegetasei, existe la lealtad y compañerismo

–Vamos debes tener un amigo– "Como es posible que no tenga amigos eso es muy triste" –Alguien con que pases tiempo, hagan cosas juntos, supongo cosas como entrenar y así

–Entonces tal vez la persona más cercana que podría considerar amigo es a Vegeta el príncipe Vegeta, me asignaron como su escudero cuando el regreso de trabajar con Freezer siempre entrenamos juntos, el me da órdenes yo obedezco

–Eso no es un amigo...

¡Espera! dijiste que tú príncipe estuvo con Freezer entonces él es malo, Creí que lo odiaban.

–Así es, el estuvo en su ejército hasta los 15 años, pero fue obligado, un acuerdo entre el y el rey, un acuerdo en donde Freezer entrenaría a Vegeta para hacerlo un buen rey, claro todo era mentira lo tenía como esclavo y lo mandaba a purgar planetas, aún lo hace. Si freezer da órdenes tenemos que cumplirlas pues el nos mataría a todos si no lo hacemos, por eso lo odiamos y tenemos que vencerlo, Vegeta está destinado a eso, el se convertirá en el super sayayin.

–¿Super sayayin…? Sabes Kakaroto, si no tienes amigos a mí me gustaría ser tu amiga…